Capítulo 3

1088 Palabras
Cada día me entraba nostalgia a recordar a mi jefe, sentía que lo extrañaba. Pero hoy quiero enfocarme en mi y olvidar todo lo que sucedió, mande un par de currículos para poder empezar de nuevo, tenía la esperanza que muy pronto en contraria trabajo y que lo que estaba sintiendo por mi jefe se me iba a pasar. Se hizo de noche me di una dicha y me puse la pijama, iba camino a mi habitación cuando escuché tocar el timbre. Se me hizo raro porque que era algo tarde y no sabía recibir visitas a esa hora. Pensé que podían ser mis padres que habían llegado para levantarme el animo. Cuando abrí la puerta me sorprendí mucho al ver al señor Wilson en la puerta de mi departamento. -Tomas que hace aquí? -Señor wilson para usted. Note en su vos que estaba tomado. -Disculpe yo ya no soy su empleada, y respecto me rece respecto y usted no me respecto entonces yo tampoco lo are. -Por eso vengo, quiero disculparme contigo. Lo observé y vi que apenas podía estar de pies por la borrachera que andaba. -Pase adelante y diga lo que me viene a decir. Tomó asiento porque ya estaba yéndose para los lados. -Señorita Rey, primero que todo me disculpo por la forma en que llegue, pero créame que no soy de las personas que saben disculparse y pensé que tomándome un trago agarraría valor para venir y así fue como termine así. También me quiero disculpar por la forma en que la traté, usted es una persona muy eficiente y sabe hacer bien su trabajo. Lo del contrato no fue culpa suya y quisiera que volviera a trabajar para mi compañía. -Mmm. Tengo que pensarlo, se que necesito el trabajo pero no me gusta que me traten como inepta. -Está bien le doy una semana para pensarlo, y si decide regresar le pagaré por los días que no a trabajado. -Ok. Le prepararé un café para que se sienta mejor.  Me levante y fui a la cocina, cundo venía saliendo con el café encontré al señor Wilson dormido, como pude lo lleve asta la habitación que le había prestado anteriormente. Cuando estaba acostándolo me caí sobre el su boca quedó cerca a la mía y no puede evitar robarle un beso. Me quede unos minutos observándolo viendo lo lindo que se miraba mientras dormía.  -Buenos días Señorita. -Buenos días jefe. -Jefe? -Si, decide volver hoy mismo al trabajo, pero quiero saber qué pasó con el contrato, como supo que yo no tenía la culpa. -Según la agonía por encontrar el contrato me puse a revisar los videos de seguridad que están en el pasillo ya que mi oficina no me gusta tener cámaras. Ese día Tatiana entro a mi oficina para decirme que Jony el de recursos humanos me ocupada de mi presencia salimos juntos de la oficina y ella busco para el lado del baño. Pero en el video se ve como ella volvió a la oficina y salió con una carpa y era la del contrato. -Como es posible. Ese día salió almorzar conmigo, porque ella aria algo como eso sabiendo que perjudicaría a la compañía y a mi también. -Ya la despedí, para que eso no vuelva a ocurrir. Y enserio lamento la forma en que la trate. -No se preocupe ya dejemos eso atrás y esa ves tráteme con más cariño jajaja. -Ahora cuénteme usted cómo llegue asta la cama porque no me acuerdo de nada. -Cundo volví con el café usted estaba dormido y cómo puede le ayude a llegar asta la cama. -Que vergüenza yo no se tomar pero sentía que ayer lo necesitaba. Desayunamos y el se ofreció llevarme al trabajo, cundo llegamos Yaki estaba asombrada por todo lo que había ocurrido.  -Sofi no puedo creer lo que hizo Tatiana, yo sabía que ella estaba enamorada del señor Wilson pero parece que me afectó demasiado que el se quedada en tu departamento ves pasada. Me siento culpable ya que fui yo la que conté que los vi llegar juntos ese día. -No te preocupes Yaki, solo espero que esta ves no cuentes nada. -No lo are, eso me queda como experiencia que es mejor mantener la boca cerrada. Estaba emocionada por esta de nuevo en mi escritorio y no podía dejar de pensar en el beso que le di a mi jefe mientras él dormía.  El señor Wilson me pidió que me hiciera presente en su oficina. -Dígame señor. -Comuníquese con los nuevos inversionistas y me transfiere la llamada, va donde Jony a conseguirme las planillas y las verifica que cada una esté como debe de estar y a las doce saldremos almorzar. -Ok ahorita hago lo que me ordeno y minutos antes de las dice le are saber para que no llegue tarde asu almuerzo  -Señorita Rey saldremos almorzar, ósea usted y yo. Me sentí emociona oír la palabra de usted y yo, no se si el lo noto porque no podía borra una sonrisa se mi cara. Toda la mañana estuve viendo mi reloj y sentía que los minutos no pasaban, esa fue la mañana más larga. -Señor ya es hora del almuerzo. -Si yo ya estoy listo. Vámonos   Me llevo a uno de los mejores restaurante, yo sabía que esa era una oportunidad para estar cerca de él así que le dije que dejáramos el auto no tan cerca del restaurante para que camináramos y pudiéramos distraernos del trabajo. Yo lo que buscaba era que el tiempo con el se hiciera más largo. Empezamos almorzar. Yo me estaba deleitando más viéndolo a el  -Cuénteme señoría un poco sobre usted. -Que le puedo contar? Mi vida no es que sea muy interesante. -A que se dedican sus padres.  -Mi mamá es ama de casa , y mi papá tiene una pequeña carni.cería. Le ayude un tiempo pero cuando me gradué empecé a buscar trabajo, aunque el no quería que trabajara pero tengo que devolverle todo lo que ha hecho por mi. No viviré como millonaria pero gracias a él estudié y nunca me falto el pan de cada día. -Me sorprende tu forma de pensar, se que estás muy agradecida con tu padre. Otra en tu lugar creería que el tenía la obligación de darte todo. - Yo nunca creeré que el tenia la obligación, ya que e visto a muchos padres cómo abandonan a sus hijos sin importarles nada y el nunca me abandono, el siempre estuvo en mis momentos buenos y malos.
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