Victoire Jussieu
El día transcurrió de lo más normal después de que nos fuimos de la casa de nuestros padres, fue difícil, lo fue, porque ellos aún no han podido procesar la idea de que Sergio está otra vez con nosotros, es complicado adaptarse a la idea luego de tantos años, sin embargo estoy segura que sienten la misma felicidad que nosotros sentimos al saber que mi hermano esta vivo, porque es una completa sorpresa para todos, solo que nosotros lo sabemos hace más días.
En los cuales nos desaparecimos del mapa, los negocios quedaron paralizados, poco fui al hospital, incluso le di libre a April quien se extrañó de ello pero continúo como si nada, apenas esta aprendiendo y no la quería aquí en un momento de tanta tensión como la que pasamos estos últimos días.
Mucho menos ahora que tendré a todos en casa por el simple hecho de que Sergio estará aquí, todos quieres estar con el después de tanto, es un sentimiento extraño, saber que la persona que tanto extrañaste siempre estuvo tan cerca de ti, tan a tu alcance pero nunca lo supiste, porque de Italia a Francia no hay tanta distancia, pero el se encargó de alejar a Sergio de nosotros.
Porque aunque nuestras mafias nunca hayan sido enemigas, la rivalidad siempre ha existido, es algo que no podemos evitar, el al ver a Sergio herido y a su alcance vio una oportunidad, hacer un cambio que nosotros sin duda aceptaríamos, yo hubiera dado todo por mi hermano, tanto en aquel tiempo como ahora, sin embargo le salió todo mejor de lo que esperaba al ver que Sergio perdió la memoria.
En su lugar yo me preguntaría como es que todo le salió tan jodidamente perfecto, sin embargo supongo que fue cosa de suerte durante un tiempo, porque ahora todo se le fue abajo por culpa de Marcus, si no, seguramente Sergio hubiera seguido destruyendonos desde dentro sin tener conocimiento de quienes somos o nosotros de quien era el.
Porque hasta ahora no se me pasaba por la cabeza nada que tuviera que ver con el, por lo menos no en vida, ya me había resignado a no tenerlo en mi vida, por lo que ahora que está no puedo sentirme más dichosa por ello.
Todo pasó de imprevisto, sin que tuviéramos tiempo de reaccionar, y pensándolo bien esas son las mejores cosas, esas que pasan sin esperarlas, que te sorprenden de manera única y te dejan una marca, porque son esas cosas y personas que duran años en tu corazón, esas que pasan como un flash, apenas lo viste pero la foto quedó.
A las personas fugaces apenas las viste pasar por tu vida, pero la foto quedó solo para recordarte que estuvo allí, que de verdad pasó, te preguntas ¿Por qué duró tan poco si era tan bueno?
Porque las personas extraordinarias pasan rápido, las amas, aprendes y luego se van, muy pocas se quedan, las que lo hacen es porque estaban destinadas a estar en tu vida o simplemente aún no han cumplido su propósito.
Aunque suene cruel asi es, Nard fue para mi una persona extraordinaria, fue mi alegría, solo que la paz y estabilidad que habíamos creado se fue tan rápido como llegó, ahí comprendí que nada es perfecto y que mi versión de dieciocho años se equivocó mucho con todos a su alrededor, incluyéndolo a el, quien aún considero como el amor de mi vida, ¿Por qué? Porque nadie me ha hecho sentir de la forma en que el lo hizo.
Porque todos pueden decirte palabras bonitas, todos pueden estar presentes, pero no cualquiera puede hacerte sentir única, como si fueras la única mujer en el universo, y no cualquiera puede causar en ti los sentimientos que solo una persona logró.
A veces es así, elevamos tanto nuestras expectación con alguien que cuando llega otra persona no podemos siquiera compararlas porque no tienen comparación, no hay forma de confundir blanco con n***o o frío con calor.
Y es lo más difícil de todo, que es por ello que los sentimientos por Nard siempre permanecieron ocultos bajo una máscara de odio, que en realidad solo era una herida sin cerrar, pero que con la llegada de Sergio se cerró y quitó esa máscara que había creado para no buscarlo, para no derrumbarme y admitir que lo amaba.
Sin embargo ahora que todo es diferente no sé que hacer, ni siquiera creo que tenga reparación el error que cometí hace años, eso solo puede determinarlo Nard, aunque dudo mucho que quiera hacerlo hoy, su negativa a hablar de lo que pasó anoche me tiene nerviosa, sin embargo debo actuar como si no ha pasado nada, hemos durado cinco años así, nada nos pasara por unos días más.
Lo mejor es fingir que no ha pasado nada, si a el no le afecta eso a mi tampoco debe afectarme, aunque lo hace debo hacer parecer que no, dado que el empezó todo esto, que lo termine o continúe si eso quiere.
Suelto un resoplo caminando hacia el comedor con April a mi lado, ella me mira con curiosidad talvez sospechando lo que me pasa, es muy buena leyendo a las personas por lo que le pedí que estuviera atenta a los movimientos de todos, más específicamente de Nard quien es el que más me interesa en este momento aunque intente demostrar lo contrario.
—Se ve enojada—menciona y yo sacudo la cabeza entrando al comedor.
—Solo estoy cansada por el viaje.
Menciono segura y ella finge creerme, sé que no lo hace sin embargo como buena empleada se mantiene callada, no le gusta meterse en mi vida personal para evitar un mal comentario de mi parte sin embargo a veces le pregunto cosas al respecto, es muy buena dando consejos.
—Te presentaré a mi hermano—señalo al rubio quien esta concentrado en su plato—Sergio.
El susodicho levanta la mirada hacia mi y yo me acerco a él junto a April.
—Te presento a April, mi asistente.
La castaña extiende su mano hacia el y este la toma con una ceja arqueada, su mirada lo dice todo más no menciona palabra alguna, es inteligente y aunque sabe que tener asistentes en este mundo es mala idea, sé porque decidí contratarla a ella, es necesario si quiero mantener todo estable en estos meses.
No puedo manejar todo a la vez, por primera vez en todos los años que tengo a cargo de la organización, es increíble ver como cambian las cosas de un momento a otro.
—Un gusto conocerte April, soy Sergio—se presenta para luego volver a su asiento, mi castaña amiga se mueve hasta su asiento a mi lado y pasea su mirada de mi hermano a mi y así sucesivamente.
—Son idénticos—menciona divertida comenzando a comer, eso despierta el interés de Sergio quien la observa entrecerrando los ojos.
Para el es aún más difícil confiar en las personas a su alrededor, después de vivir cinco años de su vida engañado y trabajando para el enemigo, no debe ser fácil considerar confiable a una persona que apenas conoce, ni siquiera nosotros, porque a pesar de ser sus familiares somos desconocidos a sus ojos.
Nosotros tenemos recuerdos, sentimientos y momentos que no se borran, pero el no los tiene, es como si tomaras todos sus recuerdos en un disco y lo sacaras para poner uno nuevo, no me imagino si me quitaran la memoria, sin siquiera saber mi nombre, nada.
Ni quiero saber como se siente el dentro de esta jaula llena de recuerdos sin descifrar.