Amor y odio: el internado

6. Damián

Esta clase si la disfruto, la tomo yo, porque Liliana tiene interpretación y representacion, Nate y yo queremos ser médicos, razón por la que ambos entramos a esta clase.

Me siento en uno d ellos extremos y después entra Nate con Allison, yo me sorprendo pensé que ella iría a otra clase, nunca le pregunté a donde le tocaba ir de clase, y ahora que la veo entrar me sorprendo. Nate se sienta junto a mi, y junto a él, Allison.

—¿Vas para medicina? —Pregunta Nate y yo solo miro me recargo en el escritorio pero me rio

—No tarado, seguro entro para sentarse contigo

El me fulmina con la mirada pero al final sonríe

—Si, quiero estudiar medicina

—Vaya, genial, ¿Alguna especialidad?

—Aun no decido, puede ser oncologia o cardio

—Ah eres un cerebrito.

—No, pero creo que tiene más valor que Plastica

Yo sonrío ante eso y solo en ese momento la observó, su mirada esta concentra en Nate, parece sincera, y sus ojos brillan cuando habla, le sonríe a Nate, pero no es una sonrisa como de las mujeres que suelen buscarnos, es sincera, e incluso tierna, es despreocupada, no es común ver eso en el mundo de ricos.

Y Nate, Nate parece mirarla con... No lo se... Parece que de manera sincera como me mira a mi cuando estamos solos.

—Entonces... —Comienzo a molestar, porque su esperanza y sonrisa me molestan, por algún motivo—¿Los plásticos qué ayudan a los niños con labio leporino o deformidades genéticas o por accidentes... Son menos valiosos?

—No dije eso

—Si lo hiciste.

Ella lo piensa un momento y asiente

—Tienes razón—Yo me sorprendo cuando ella me da la razón—pero en ese caso, cualquier persona que su vocación es mejorar la calidad de vida de otros es, por mucho de gran valor.

Observó cada detalle de su rostro cuando da su discurso, en verdad cree ene sus palabras. Y se que tiene razón, pero por algún motivo solo quiero molestarla. Nadie puede ser tan positivo en la vida.

—Empecemos la clase—Dice la maestra entrando al salón.

Y estoy en problemas, hace un año me acosté con ella, por esos días se acababa de divorciar y yo... Bueno digamos que saque 10 en química orgánica.

La maestra me observa y sonríe, debo reconocer que nos divertimos en esa época, pero después de un tiempo mi padre comenzó a tirarsela y desde entonces no me metí con ella.

—Yo reemplazare el resto del semestre a su profesora Nikte, por su licencia de maternidad.

La clase comienza y todo es normal, tranquilo, dura dos horas, y a mi se me pasan rapidísimo. Al terminar Allison sale antes que nosotros, se disculpa porque tiene que hacer una llamada urgente.

—Damián ¿Puedes quedarte?

Nate me mira sonriendo burlon, el sabe que me acosté con ella, y que después ella salió con mi padre, de hecho creo que aún lo hacen. No se, ni me importa.

Voy hasta el escritorio de la maestra y la observó fijamente. Cuando me examina, una sombra pasa por su rostro.

—Lo que paso con tu padre... —Comienza a explicar y pongo los ojos en blanco

—Simone, me importa una mierda con quien cojas—Ella me observa poniéndose pálida al principio y después roja, supongo de pena o enojo

—Damián, nosotros teníamos una relación cuando conocí a tu padre.

Yo rio burlándome de ella, se que no debo porque es mi maestra, pero enserio una persona de su edad, cree en esas tonterías de tener una relación y la monogamia...

—Tu y yo no teníamos un carajo— comienzo a decirle de forma burlona—Cogiamos de vez en cuando para que me bajaras la calentura, pero no teníamos una relación, era solo sexo, tu encontraste con quien más estar, y es tu decisión, y yo conseguí otra mujeres.

—Damián no puedes hablarme así, fueron meses los que estuvimos...

—¿Cogiendo? Si, pero te lo aclaro, no solo lo hacía contigo...

Trata de darme una cachetada pero la esquivo, me doy media vuelta y salgo.

Nate me espera recargado en la pared frente a la puerta

—¿Reproches? —Me pregunta directamente.

—Algo así.

Me mira con desaprobación y diversion.

—¿Qué harás esta tarde?—Me pregunta el.

—Samantha me invito a su cuarto a ver películas.

—Ya... Seguramente....

Yo me rio porque ambos sabemos que no llegare ni a la mitad de la película. Pero al final, tendré un poco de diversión. Samantha tiene muy buen culo, y espero lo sepa mover.

El resto del día pasa normal, me acostumbro a ver a la chica nueva, porque al final estará con Nate y conmigo en todas las clases. Y aunque cabría de esperar que Nate la trajera como perrito faldero tras de el, ella es independiente, de hecho después de anatomía, no volvió a sentarse con nosotros.

Por la tarde, me cambio y voy al cuarto de Samantha, y debo decir que fue una gran decepción, comenzamos a ver las películas de terror, acostados en su cama, de inmediato ella se "asustó" y se pego a mi, la abrace y sin manosearla, pero ella sólita empezó a mover su enorme trasero sobre mi m*****o, a restregarlo, y hasta aquí la noche pintaba bien, empezó el manoseo, le metí mano por todo el cuerpo, pecho, v****a, se encuero toda, y me hizo una muy buena mamada, saque el condon y me rogó para hacerlo sin el, pero obvio no acepte. A la hora de entrar en ella, estuvo bien, pero de ahí, la cosa se puso algo aburrida, y hacia demasiado ruido, gritaba y gemía demasiado, cuando me cabalgaba sus gritos y sonidos eran más de un animal en celo qué de una mujer excitada. Cuando llego al orgasmo, se quedó dormida y me dejó a medio palo,

Salí de su habitación, caliente y enojado, con un dolor de bolas impresionante. Llegue al cuarto furioso, tuve que meterme a bañar y hacerme una paja para poder descargarme. Cuando salí d ela ducha Nate ya estaba en su cama, y me pregunto por mi cita, cuando le conté, obvio no los detalles, solo que ella me dejó a medio palo porque llego a su orgasmo, se burló de mi, y decía que lo merecía por maldoso.

Me acuesto y me pongo a releer orgullo y prejuicio porque en dos días es el debate. Y no pienso participar, pero tengo que empezar a hacer mi trabajo escrito.