CAPITULO 2: Casada
1218 Palabras
-2 MESES DESPUÉS -
Estoy sentada frente al televisor, son casi las nueve y Liam aun no ha vuelto a casa.
Ya pasaron dos meses desde la boda y cada día parece el mismo.
Cuando despierto el ya se ha ido y cuando regresa ni siquiera me habla ni me mira, va directamente a su habitación.
Ni siquiera dormimos en la misma habitación.
Después de la boda no hemos vuelto a cruzar palabra.
Pero da igual....¿que puedo esperar? desde un principio me detesto y mentiría al decir que lo amo.
Este matrimonio es solo un espectáculo del que el y yo somos protagonistas.
Tengo que fingir felicidad, la cual no siento ni creo llegar a sentir nunca.
Mis ojos se llenaron de lágrimas tras pensar en la vida que llevó a su lado.
Oí como la puerta se abría, y volví a pensar en mi vida.
Y decidí algo que nunca he hecho.
Darle la bienvenida.
Cuando estuve frente a el, me di cuenta de que fue una muy mala idea, la expresión en su cara no era nada buena.
Me miraba fríamente, como acostumbraba hacerlo.
Mary: bienvenido - dije con una sonrisa esperando que el respondiera algo - tu... -dude un momento - ¿quieres cenar?
El suspiro y paso a mi lado, iba a su habitación pero yo lo detuve tomándolo de la mano -
Mary: te estoy hablando, no piensas responderme?
Liam: no quiero que te preocupes por mi -me mira - es más, no quiero que me hables
¿Entendiste?
Se soltó de mi agarre y fue a su habitación cerrando la puerta de un golpe.
¿Ahora que fue lo que le hice?
No dije nada malo para obtener esa reacción de su parte, trate de ser amable con el y esto es lo que conseguí.
Me quede de pie viendo al vacío, ¿porque me tiene que suceder esto a mi? Porque mi vida tiene que ser así de miserable ??
Tanto me odia, bueno en realidad si lo hiciera me desearía el mal.
Puede ser que mi voz le parezca molesta al escucharla.
Para el solo soy un accesorio que lo obligaron a usar.
A la mañana siguiente desperté con los ojos cansados y súper rojos, estuve llorando hasta quedarme dormida.
Desganada fui a la cocina por un vaso de agua, no me preocupe por Liam, el a esta hora ya se ha ido.
Genial, un día mas sola en este apartamento, no estoy molesta con el por sus palabras, lo que me molesta es no poder hacer nada para cambiar la situación.
Observe a mi alrededor y un gran silencio me inundo.
Realmente deseo tener a una persona con quien poder hablar o simplemente ver la televisión con alguien.
Por mi cabeza ha pasado la idea de llamar a Aiden, desde que se entero de mi boda, no he vuelto a saber de el. Y tampoco me atrevo a llamarle, solo conseguiría que Liam se enojara conmigo y no quiero darle motivos para tratarme peor de lo que ya me trata.
Lo único que tengo es el silencio como mi compañero matutino.
Ya estaba empezando a anochecer y sabía claramente que Liam no llegaría, como es su costumbre.
Prepare algo de comer para mi y encendí la televisión, seria algo demasiado deprimente comer en total silencio, así que ahora como viendo televisión.
Cuando termine levante los platos y los lave, suspire profundamente y vi la hora 7:40.
Así que decidí salir un rato, no muy lejos de donde vivo hay un lugar donde venden libros.
Estuve recorriendo los pasillos, habían demasiados libros y todos parecían interesantes.
Tome varios en mis brazos y fui a la caja a pagarlos, al menos tendré algo que hacer mientras estoy en casa.
Antes de que saliera del lugar una voz que me es conocida hablo a mis espaldas.
Aiden: ¿Mary?
No podía creerlo era Aiden !!, deje en el suelo la bolsa de libros y lo abrace fuertemente.
Mary: ¡Aiden! Te extrañe
Aiden: yo igual -correspondio al abrazo - no he sabido nada de ti en los últimos meses
Mary: perdona...creí que no querías verme
Aiden: no digas eso -apretó mi mejilla - claro que quería hacerlo
Si quieres podríamos ir a tomar un café -sonrisa-
Mary: claro vamos!!!
El tomó la bolsa que yo antes llevaba y empezamos a caminar.
Se sentía tan bien el tenerlo de nuevo conmigo y poder hablar con el me hace sentir feliz.
Estaba tomando mi café mientras Aiden me contaba algo,
Espera....¿que hora es...?.
Mary: Aiden..me podrías decir la hora?
Aiden: am claro -mira su celular - las nueve
Mary: ¡¡¿que?!!!!
Esto es malo, muy malo ¡¡Liam me va a matar !!!
Mary: perdona Aiden...pero debo irme
Aiden: ¿te sientes bien? Estas pálida
Mary: si solo que debo irme ya -tome los libros y le di un beso en la mejilla - adiós
Salí corriendo con todas mis fuerzas, rogándole a dios que Liam no haya llegado a casa aun.
Saque las llaves de mi cartera y abrí la puerta del apartamento.
Asome mi cabeza y todo estaba oscuro, lo que quería decir que Liam aun no había llegado.
Agradecí a dios y fui a la cocina por un vaso de agua, corrí demasiado.
Liam: ¿donde estabas? - una voz hablo a mis espaldas haciéndome temblar, deje el vaso de agua y me gire sobre mis talones.
El estaba de pie frente a mi
Pero esta ...¿borracho?
Nunca antes le había visto así.
Además por que de la nada le importo ¿porque no va a su habitación como siempre lo hace?
¿Me estaba esperando? ¿Se preocupo al no verme aquí?
No niego que me sentí feliz por un segundo al pensar que en realidad estuviera preocupado por mi.
Mary: te importa acaso? - dije desafiante -
El se acercó a mi, causando que mi piel se erizara.
Liam: ¿sabes la hora que es?
¿Donde estuviste?
Mary: bueno yo..-agache la mirada -
Fui por unos libros -señale la bolsa que había dejado al entrar -
Liam: y te tardaste tanto en ir por ellos?
Lo mas que tardarías serian unos cuantos minutos.
Mary: bueno y yo... -tenia una batalla mental en si debía decirle o no que me había encontrado con Aiden - yo...
Liam: ¿tu que? -habló algo fuerte -
Mary: fui por un café - fue lo primero que se cruzo por mi mente, pero tal parece que mi excusa no lo convenció -
Y me olvide de que tenia que regresar
Liam: ¿me crees estúpido?
Mary: ¿eh?
Liam: esperas que te crea eso de que fuiste por un café sola?
Y que te "olvidaste de que debías regresar" - dijo lo ultimo con cierta molestia -
Mary: pero es la verdad, estaba sola
Liam: ¡¡¡dejate de estupideces !!!!
-grito-
Nunca lo había escuchado gritar y poner esa expresión, siempre usaba un tono indiferente cuando hablaba conmigo.
De repente llego a mi memoria una escena donde mi padre y madre discutían y el le grito.
Yo retrocedí un poco ya que el empezaba a acercarse cada vez mas a mi.
No creo que esta discusión termine de una buena manera.
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