Capítulo 55. Dónde hay un cazador... siempre hay una presa. Luciano chasqueó la lengua. -- ¿No tienes que responder verdad? Porque sabes muy bien que si él se entera… si Mark Leclerc llega a descubrir lo que hiciste esa noche, no quedaría ni tu nombre para el recuerdo. Y no lo digo en sentido figurado Ariadne... todo el país conoce el poder de Leclerc, lo tenía en el pasado y no tienes idea de lo que significa ahora – El aire se tensó. Ella lo sabía, claro que sí. Lo había investigado antes de volver. Sabía que él tenía razón, pero no le importaba, no iba a retroceder. No después de todo lo que había planeado, no después de todo lo que había soñado durante casi tres años... No después de tanto tiempo esperándolo. -- Luciano Arcos – le dijo finalmente, suavizando la voz, -- No te es

