Simplemente tú.

Capítulo 4

Alice.

Estaba muy nerviosa, hoy era el día de mi boda, no sabía que esperar después de lo que sucedería esta tarde pero en verdad estaba feliz, por fin encontré una pequeña cosa que me hacía feliz, no dejaría que nadie me quitara esta felicidad, sabía muy bien que no me estaba casando con él hombre que amaba, así como siempre lo había soñado, pero tenía la poca ilusión que al menos me trataba bien, no intentaba golpearme ni mucho menos intento abusar de mi, me sobresalte cuando vi entrar a mi recamara a muchas personas, al instante recordé que era el equipo que había enviado Alex para que me arreglaran el día de mi boda, traía puesta una bata de seda color blanco y entonces comenzaron con el nuevo luck. Me pintaron las uñas de las manos y de los pies con un estilo francés en color blanco, colocaron varias piedrillas brillantes, después empezaron a maquillarme, realmente los tonos que usaron en mis párpados, hacia que mis ojos lucieran aún más grandes y brillosos, mis labios los pintaron de color rojo, y mi piel se veía como de porcelana, me gustaba cuidar mucho mi piel, no tenía nada de acné ni espinillas, siempre procuraba ponerme mascarillas, después continuaron con mi cabello, me pusieron extensiones del mismo color de mi pelo, me hicieron un peinado que dejaba al descubierto mi espalda, dejaron algunos mechones sueltos y entonces llegó el momento de ponerme la ropa interior, me puse los protectores para los pezones y después coloque mi bikini color blanco, enseguida me puse un ligero blanco con flores del mismo color, me ayudaron a ponerme el vestido y cuando caí en cuenta, estaba una hermosa novia frente a mi, no podía creer que estaba hermosa, Astrid me entregó el enorme ramo de rosas blancas y en ese momento, en ese preciso momento teníamos que irnos para llegar a la iglesia.

Ragnar contrato una hermosa limusina, subí en ella, me sentía muy nerviosa, ni siquiera supe cuando llegué a la iglesia, me ayudaron a bajar de la limusina, al fondo se observaba la entrada de la iglesia, con nervios tomé el brazo del padre de Ragnar y caminamos en dirección a la iglesia. Todo estaba hermoso, los asientos y el pasillo estaban decorados con rosas blancas y arreglos florares, al fondo, en el altar se encontraba Ragnar esperándome, realmente se veía muy guapo, traía un traje color n***o, con un chaleco del mismo color, una camisa blanca y unos zapatos perfectamente lustrados, no había caído en cuenta que era un hombre muy hermoso, muy parecido a los dioses vikingos, su rostro parecía irreal de lo guapo que era, tenía heterocromia en sus ojos, el ojo derecho era de color azul, y el izquierdo color verde, tenía unas pestañas largas y risadas, su nariz era recta, sus labios carnosos color rojo, su piel pálida, casi sin color, su cabello era de color rubio cenizo, tenía el pelo un poco largo en la parte de enfrente, y en la parte de atrás estaba demasiado corto, era de una estatura muy alta, media 1:98 centímetros, su cuerpo era delgado pero tenía los músculos muy bien definidos, sus brazos, piernas y espalda eran grandes, su abdomen tenía los hermosos llamados six pack, realmente era hermoso,sentí su mirada para después depositar mi mano sobre la suya, levantó el velo de mi rostro y entonces pude ver que en su cara se formaba una sonrisa, no pude resistirme al ver aquellos hoyuelos formándose en las mejillas, me encanto su forma de sonreír, ambos nos hincamos de frente al padre.

-Queridos hermanos estamos aquí reunidos para celebrar la unión de dos almas en sagrado matrimonio. - dijo el padre.

-Ragnar Mitchell Bord aceptas a Alice Miller como tu legítima esposa para amarla y respetarla, en la salud y en la enfermedad.

-Si aceptó. - respondió Ragnar.

-Alice Miller aceptas a Ragnar Mitchell Bord cómo tú legítimo esposo para amarlo y respetarlo en la salud y en la enfermedad.

-Si aceptó. - respondí.

-Lo que Dios a unido que él hombre no lo separe, Ragnar puedes besar a la novia.

Enseguida Ragnar coloco sus grandes manos en mi cintura y me jalo hacia su cuerpo, quedando frente a frente, me dio un beso que le correspondí torpemente, me sonroje un poco al recordar que nunca había besado a alguien, Ragnar no dijo nada y entrelazo nuestras manos para después salir de la iglesia caminando, nos lanzaban pétalos de rosas y arroz, todos estábamos muy felices. Nos trasladamos al salón donde se llevaría acabo el festejo, jamás me imagine que el salón estaría bellamente decorado con flores de color blanco, todo estaba hermoso, nos sentamos en la mesa principal y disfrutamos de un delicioso banquete, al poco tiempo necesitábamos abrir la pista de baile, Ragnar me tomó la mano y me guió a la pista de baile, coloco su mano en mi cintura y sujeto mi mano, bailamos una hermosa melodía romántica.

-Te vez hermosa. - me dijo mientras apretaba con fuerza mi cintura.

-Gracias. - me sonroje un poco.

-¿Te gusta nuestra boda?.

-Si, mucho.

Terminamos de bailar y comenzamos con la celebración, bailamos un poco de todo con casi todos los invitados, llegó el momento de lanzar el ramo, lo lance por los aires y sólo vi que una chica delgada lo atrapó, cuando fue el momento de que Ragnar me quitara el ligero para lanzarlo me sentí muy nerviosa.

-Veamos que tipo de liga te pusiste, Alice. - me sujetó de la cintura para subirme a una silla.

-Ragnar... yo. - no pude decir mas, cuando sentí sus suaves labios subir por mi pierna y un pequeño pellizco de sus dientes para jalar la liga.

-Aquí esta. - se la quito de la boca y la lanzó por los aires.

Me baje de la silla con cuidado y observe que un hombre se acercaba a abrazar a Ragnar.

-Hola hermano, que bueno que estas aquí. - dijo Ragnar mientras le daba un fuerte apretón de manos.

-Jamás me perdería la boda de mi amigo. - dijo el hombre.

-Te presento a mi bella esposa, Alice Miller. - me sujeto de la cintura.

-Mucho gusto señora, soy Lucas William.

-Mucho gusto Lucas. - le respondí.

-El es mi mejor amigo, mi mano derecha en todo, lo considero el hermano que nunca pude tener. - me dijo Ragnar con una gran sonrisa.

Así transcurrió la celebración, entre risas y alegría, pero ya pasaban de las 4 de la mañana y ningún invitado quería marcharse, así que Ragnar decidió que era momento de irnos,salimos por la puerta principal y solo nos detuvimos a despedirnos de sus padres, me entró un poco la tristeza al recordar que mi mejor amiga no estuvo conmigo, sabía que su madre estaba enferma y que muy probablemente no se recuperaría.

Subimos a una Camioneta Ram último modelo, Ragnar condujo hasta llegar a la casa, me ayudo a bajar y entonces sentí sus grandes brazos pasar por mis piernas, me cargo como toda una pareja de recién casados.

-Es tradición de mi familia, que el varón lleve a su esposa hasta la habitación en sus brazos. - me explico mientras subía las escaleras.

-Entiendo. - respondí un poco apenada.

Escuché como la puerta de la habitación de Ragnar azotaba en la pared, un miedo invadió mi cuerpo al pensar que me pediría que fuera su mujer, no sabía que debía hacer ante esa probable propuesta. Me quedé inmóvil en medio de la habitación, Ragnar empezó a quitarse el saco y los zapatos, yo solo lo observaba.

-¿Quieres que me vaya para que puedas cambiarte?. - le pregunté mientras jugaba un poco con mis dedos.

-No es necesario, mejor entra al baño para que te pongas cómoda. - me miró de pies a cabeza. - Fue un día muy largo, tengo ganas de dormir.

-Esta bien. - corrí al baño y empecé a quitarme todo lo que traía en el cuerpo.

Después de quedar desnuda observe el baby doll que Astrid me había comprado porque según ella era lo más correcto para usar en la noche de bodas, dude en ponérmelo pero al final me lo puse, era de ceda color blanco, no tenia nada de tela que pudiera transparentar mi piel, así que me sentí confiada y salí del baño, y entonces lo vi... vi su hermoso cuerpo, sus músculos eran grandes, tenía tatuajes en los brazos, como unas mangas, en una de sus manos tenía dibujado una serpiente y en la otra una calavera con flamas, en los dedos de la mano derecha tenía una cruz y algunas letras, cerca del ombligo tenía un escorpión tatuado,lo mire por varios segundos hasta que me di cuenta que el me miraba.

-¿Te obligó mi madre a usar eso?. - me preguntó mientras se recostaba en la cama.

-Si, tu madre pensó que sería buena idea.

-Si es una buena idea. - me señaló el lado de la cama con su dedo. - Si fuéramos una pareja de enamorados, pero como no lo somos, entra a la cama.

Enseguida me recosté a su lado, me cubrí con la sabana blanca y voltee a mirar a Ragnar cuando apago la luz.

-Desde este momento esta será tu habitación. - me dijo mientras se daba la vuelta para darme la espalda.

-OK.

No pude dormir al instante, no podía conciliar el sueño, observaba el techo, escuché la respiración de Ragnar, al parecer él ya estaba profundamente dormido, agradecí el gesto de que ni siquiera intentó seducirme para hacerme el amor, eso fue lo mejor de todo. Poco a poco me quedé dormida. Me desperté y observe que Ragnar aún seguía dormido, me moví un poco de la cama y entonces sentí sus brazos en mi cintura.

-No te levantes aún, es muy temprano. - su voz la escuche cerca de mis oídos, me estremecí.

No dije absolutamente nada, al poco rato, Ragnar se giro, quedando boca arriba en la cama, y entonces se levantó de la cama, camino en dirección al baño y solo escuche que abrió la regadera, me puse de pie y mire por la gran ventana, después de unos segundos Ragnar habia salido del baño con una toalla enredada en su cintura,pude ver con más claridad su definido y marcado abdomen.

-Puedes bañarte, si así lo deseas. - Dijo mientras caminaba al vestidor.

Me metí a bañar para después salir y no saber a dónde se había ido Ragnar, agradecí el gesto de dejarme sola, me puse unos jeans negros y una camisa de botones de manga larga color n***o, el escote era en forma de uve, dejaba a la vista mis senos, me puse unas zapatilla del mismo color, cepille mi cabello, y me puse una maquillaje ligero, salí de la recamara para ir a la cocina y tomar algo de desayunar, cuando termine observe que Ragnar estaba con Lucas en jardín. Me senté en las escaleras de afuera de la entrada, los observaba mientras Lucas golpeaba a Ragnar en la espalda, ambos se percataron de mí presencia.

-Hola Alice. - dijo Lucas mientras caminaba en mi dirección para sentarse a mi lado.

-Hola Lucas. - sonreí un poco.

-Tu esposo es un pedazo de mierda. - rió a carcajadas mientras le lanzaba un piedra a Ragnar.

-Vete a la mierda, Lucas. - Ragnar estaba molesto.

-¿Vas a salir?. - preguntó Lucas.

-Si, ¿por qué?.

-Recuerda que ya estás casado, invita a salir a Alice. - Lucas me abrazo.

-En otra ocasión. - Ragnar subió a su auto para después salir de la casa a toda velocidad.

-No le hagas caso, siempre a sido así. - me dijo Lucas.

-No me importa, nuestro matrimonio solo fue algo pasajero para él, no se realmente para que me quiere.

-No se por qué hizo eso Ragnar, pero esta realmente loco, no es un hombre de malos sentimientos, es solo que tiene un pésimo carácter.

-Yo igual tengo un carácter fuerte.

-Bueno me dio gusto verte, al parecer estaremos viéndonos muy seguido, cuídate.

Se despidió de mi y se subió a su auto para salir de la casa, me puse de pie y recorrí toda la enorme propiedad, no deje ni un solo lugar sin conocer, desde los enormes jardines, hasta el interior de la casa, no me di cuenta del tiempo hasta que mi estómago me pidió comer la cena, fui a la cocina y una amable empleada me sirvió un rico plato de comida, cuando termine de comer subí a mi habitación y me bañe, me coloque la pijama y me metí a la cama. Ragnar aún no llegaba, así que no me preocupe por el, y me quedé dormida, no se cuanto dormí pero sentí que alguien se metió a la cama en la oscuridad, me sobresalte un poco.

-Duérmete. - me dijo Ragnar con brusquedad.

No me moví al escuchar su voz, creo que al saber que él estaba a mi lado dormí aún más profundo.