La mañana del martes llegó antes de lo que esperaba, por segunda vez dormí las horas necesarias y todo fue producto del aroma de mi omega. Creo que si me viera a mi mismo hace seis años no encontraría necesario buscar a alguien más, solo esperar. Me levanté con una extraña sensación de alivio, descansado y realmente energético. Kim se encontraba en la cocina hablando con el bebe y el aroma del increíble desayuno invadió mis sentidos. -¿Kim, hey, queda algo de lo que preparó luca anoche? - Kim me miró de reojo y sonrió. -Lo dejé en un tupper, lo calentare para ti- -Tengo tanta hambre que comeré todo. Llevas pocos días con nosotros Kim pero ya manejas muy bien la casa. ¿Pensaste lo del contrato fijo? - -si lo pensé y me quedaré, además es un ambiente agradable, aunque el primer día q

