||Karol|| Suspiré para tomar mejor el biberón que segundos Lucia me había entregado para seguir con lo suyo en la cocina, intenté tranquilizarme pues solo iban a hacer algunas cuantas palabras y después un "detente, no lo hagas". No debía ser tan difícil, él lo debía entender, él debía detenerse. Aun las palabras de aquel tatuado rondaban mi cabeza, Deniel Cortez... era difícil de absorber, al parecer todo había cambiado. Tal parecía que el mal solo había tocado mi puerta y empezando a permanecer junto a mí por un largo tiempo, yo era la desdichada... La que había recibido algo parecido a un castigo, sin deberlo, sin merecerlo. Con pena deje aquellos pensamientos aun lado, no debía sentir aquel sentimiento por mí misma, sin más que hacer tome la manija de aquella puerta de manera para

