Sandra está en casa de Héctor, desde que llego él la llevo a una recámara, ella está padeciendo el dolor de haber dejado de golpe los medicamentos de que ya eran parte de su vida. Al día siguiente ella amaneció con una fiebre alta y dolor intenso en todo su cuerpo, no deja de sudar. Héctor se asustó cuando entro a la recámara y verla en ese estado, llamo a su amigo el médico, diciéndole que sea confidencial esa visita.
—¿Qué tiene la joven?
—Está convulsionando, lo primero hay que controlarle la fiebre, al parecer ella es adicta a cierto medicamento, que al no suministrárselo el cuerpo reacciona de esta manera.
—¡Ayúdala!
—Le suministré una inyección para ver si le hacemos bajar la fiebre, no te preocupes, esta reacción le puede durar días, si la fiebre continua, dale baños fríos. ¿Qui
