BAJO TUS ESPINAS.

CAP.2

Jacobo, se encuentra en el departamento de Eva, el entra ya que tiene una llave de este, entra sin hacer ruido, cuando entra se dirije al cuarto pero antes de entrar escucha una plática que tiene su prometida y una persona al teléfono.

Llamada ( solo, lo que el escucho de ella)

Eva: El no debe enterarse, no, no me lo perdonaría, claro, sabes que solo fue una vez, el dinero claro que me interesa, la empresa y todo lo que tiene que ver con eso, entiende que solo cuando me case tendré todo, no puedo darme el lujo de quedarme sin nada.- la plática sigue pero Jacobo se retira de la puerta y ya no escucha más.

Fin de la llamada.

El no podía dar crédito a lo que estaba escuchando, era cierto que ella solo lo quería por su dinero, no lo amaba como el a ella, el tuvo que pasar por mucho para que sus padres la aceptaran, tuvo que obligarlos para que perteneciera a esa familia, cuando la conoció, ella trabajaba en una tienda de artesanías, el entro para comprar unas cosas que necesitaba para regalarle a sus tíos que vendrían de visita y cuando la vio quedó prendido de ella, de sus labios rojos y sus ojos de diferente color cada uno, uno verde y uno café, era una belleza extraña, su cuerpo como reloj de arena, su pelo castaño que caía como cascada hasta sus cintura, de esa piel tan terza, hermosa, el pensó ver a un mismo angel, era hermosa, pero ahora se daba cuenta del error que cometió, al poner sus ojos en ella, su amiga siempre le dijo que no le daba confianza, qué era una caza fortunas una mujer que solo quería su dinero, como le pediría perdón.

La haría pagar, le haría derramar miles de lágrimas cada una de ellas serían de sa**re, y lo primero que haría era seguir con la boda, seguir con esa farsa le haria lo mismo que ella le estaba haciendo, la enamoraría, la usaría y después la botaría como la basura que es y así la trataría, solo su boda duraría pocos años hasta podría decirse que unos meses.

Ella sale de su cuarto y se encuentra con la mirada fría de su prometido, solo la mirada, de el la hizo estremecer, no era esa mirada que siempre le daba, de calidez, de amor.

Eva: Hola amor, que haces aquí, no me avisaste que vendrías.- le dice ella nerviosa

Jacobo: No creí que tenía que avisar, ya que me diste la llave, para que entrara y viniera cuando quisiera no?.- le dice el con frialdad.- o esperabas a alguien más? si es así dime para irme?.- le dice el ya enojado.

Eva: Claro que no, como siempre me avisas cuando vienes, es solo eso.- le dice ella un poco molesta.

Jacobo: Solo venia hablar sobre la boda, quiero que firmes un contrato prematrimonial, ya que mis padres lo requiere.- le mintió, era una parte de su plan.- Mañana a las doce en mi oficina.

Eva:Claro, mañana será , entonces quieres pasar unas horas aquí conmigo viendo unas películas, ya que entro a trabajar más tarde.- le dice ella un poco emocionada, ya que ese siempre era su rutina, cuando el iba a su casa, veían películas, comían o cenaban dependiendo la hora, pero el negó, y se despidió y se fue.