Advertencia.
636 Palabras
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Este libro no esta basado en ninguna historia real, no he tomado como referencia una historia, únicamente se han tomado algunas anécdotas de personas que han brindado, previamente, su autorización.
Quiero aclarar, para este punto, que aunque parezca que la realidad se mezcla con la ficción no he tomado la historia de absolutamente ninguna víctima amarillista.
No escribo este libro desde el morbo, ni con intenciones sensacionalistas.
Es un libro influenciado por la sociedad, que se centra en las experiencias de diferentes mujeres a mi al rededor y que se exterioriza la idea en un personaje central femenino.
No busco ofender o hacer sentir mal a ninguna persona que lea el libro.
Tampoco busco juzgar, victimizar o de predisponer un pensamiento.
El principal objetivo es visibilizar problemas de una sociedad actual, siempre desde el respeto y la empatía.
Espero que les guste el libro y que pueda ser clara para una mejor comprensión.
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Cuando eres joven parece que no necesitas preocuparte por mucho, sientes que puedes con todo, apenas comienzas a vivir y a caminar sin la ayuda de los papás, pero queremos correr sin medir las consecuencias, no conocemos los riesgos ni nuestros propios limites y nos encaprichamos con cosas simples.
Queremos ser libres y no es nuestra culpa, en un mundo perfecto tener libertad segura es lo ideal, pero no, no estamos en un mundo perfecto, lentamente nos rompen la burbuja rosa en la vivimos y nos terminamos por acostumbrar a las crueldades del mundo.
Mi vida era bastante tranquila, estaba próxima a cumplir mis 14 años, nadie podría imaginar lo que comenzaría a vivir cuando iniciara mis clases en la escuela media.
Mi vida era dulce, con amigos que me querían y familia que me apoyaba, pero todo era parte de la frágil burbuja de la infancia en donde me hubiera gustado quedarme para siempre.
Mi nombre es Paulina, cuando cumplí 12 años anhelaba crecer para ser independiente, comenzaba una época rebelde mi vida, pero siempre fui una niña tranquila, tenía un pequeño gato y aun me gustaba jugar con mi hermano Valentín.
Mi nombre es Paulina, tenia amigas que estaban teniendo las mismas inquietudes que yo, mis amigas eran niñas amorosas conmigo y con las que compartía mi despertar a la vida.
Mi nombre es Paulina, pero en el colegio solían llamarme Pauli, Pau o chaparrita, mis papás solían llamarme princesa o morenita.
Mi nombre es Paulina, esta es la historia de mi muerte, de cómo conocí a mi asesino y de como nadie hizo nada.
Como termine por acostumbrarme tanto a mi entorno que no pude poner un limite, un límite que no deberia poner por que nadie debería llevarnos hasta esos extremos.
No soy culpable de lo que me hicieron, mi conciencia esta tranquila, solo era una persona, una niña convirtiéndose en adulta tal y como todos en la vida.
No soy culpable, no importa cuanto quiera la gente acusarme, ser yo no estaba mal, no era un error, no propicie las cosas ni puse las situaciones sobre la mesa.
Nadie seria culpable en mi situación, nadie deberia pasar un limite que por humanidad esta establecido.
Esta es la historia de como me caí ... de como me tiraron y ya jamás me pude levantar.
La cuento esperando no ser juzgada, esperando no der Paulina, la que se lo merecía, Paulina la que lo merecía, Paulina la que lo proposición.
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