Capítulo 5
451 Palabras
Actualidad.
-No, su nombre es kendall.- Respondió nervioso.
-Pero la has llamado kiara- Exclamó obvio.
-Tan solo decía que el nombre de kiara me vendría mejor que el de kendall- Respondió Serena.
El muchacho no dijo nada, era más que claro que no se había creído esa estúpida respuesta pero prefiero investigar por su cuenta ya que desde que su hermano se reencontró con la chica este se había estado comportando extraño.
-Claro, la cena ya esta en la mesa y solo te estamos esperando Duncan - Le dijo a su hermano.-¿Te gustaría cenar? - Pregunto ahora a kendall.
-No gracias, la verdad tengo que ir a otro lado - Contestó con la mirada clavada en el suelo. - Me tengo que ir, mi turno a terminado - Se acercó a cada uno para darles un beso en la mejilla.
Media hora después.
Kendall tenia en sus brazos a emily la cual no tenía mucho que se había dormido, clavo su mirada en la puerta que daba a la habitación de su amiga.
Se encaminó a su cuarto y dejo a la pequeña en su cuna para después recostarse en su cama.
Ahora estaba más que segura que en su vida pasada fue algún dictador despiadado por lo cual le pasaban esas cosas.
Con su mano tomo el dije que tenía colgado en su cuello era la luna que Dylan le había dado.
Estaba frustrada aun no se explicaba del porque había dejado de sentir ese inmenso amor hacia Dylan.
¿Que era lo que estaba pasándole?
Tenia en claro que lo quería, le tenía un gran cariño.
El día que lo vio fue una gran impresión tanto que pensó que se estaba volviendo loca, pero al acercarse y abrazarlo fue raro esa sensación de cosquilleos que antes sentía cuando estaba junto a él se había desvanecido. Tal vez quería obligarse a creer que ya no lo amaba para así el no corriera peligro.
Al ver que el no sabia quien era y que Duncan hablará con ella y explicará lo sucedido lo tomo como una oportunidad para alejarse de el, ya que si el la recordaba y quería que estuvieran juntos no se sentiría a justo, ella había cambiado. Lo cual odiaba.
Unas cuantas lágrimas empezaron a caer por sus mejillas, se sentía impotente.
No sabía que era lo que sentía o quería. Y culpaba por todos sus problemas mentales a demian.
¿Que era lo que había hecho?
Desde que escapó habían noches en las que soñaba con el, en la que lo extrañaba. ¿Como era posible eso?
¿Acaso era que se había enamorado de Demian?
-Eso no puede ser - susurro cerrando sus ojos. -¿Después de todo lo que me hizo?- suspiro.
Se acomodo mejor en la cama para así dejar que el sueño la consumirá.
Ya no quería seguir pensando en sus problemas.
- Autor
