Punto de vista de Emily. — Entonces, ¿de qué querías hablar? — Lo miré vacilante. Sentí su mano en la parte inferior de mí espalda mientras me llevaba a su escritorio. Me sentó sobre el escritorio y él se sentó en la silla justo frente a mí, sus manos descansaban sobre mis pantorrillas con muchísima suavidad, su toque era tan suave que dudaba incluso si sus manos de verdad estaban allí. — ¿Cómo te has sentido después del banquete? Discúlpame si te alejé muy rápido de Sídney, pero no podía dejarte beber más. — me dijo mirándome con mucho cuidado. — Yo… — me atraganté con mi propia saliva y comencé a toser. — Gracias por eso, y no te preocupes, de verdad de agradezco que me hayas puesto un alto. — dije una vez pude volver a hablar. — Y ese chico… ¿Qué tipo de relación tienes co

