Capítulo 3

1845 Palabras
(Actualidad) El lugar estaba repletó de gente, amaba estos escenarios, nadie se daba cuenta nunca de las cosas, Madison veía todo el lugar con disimuló, les sonreía a varios, coqueteaba, pero ninguno se daba cuenta de lo que realmente estaba haciendo. Comencé a buscarlo con la mirada, pero no lo encontré, a quien si encontré fue a Fred, viniendo hacia nosotras, Madison se acercó a mi y le sonrió a Fred. —Hola chicas, me alegró que vinieran—dijo él, dándonos un beso en la mejilla a cada una. Era un lástima que fuéramos a deshacernos de él esta noche, después de todo no había muchos chicos como él, pero si lo dejaba vivo, seria un problema para mí. Por el rabillo del ojo vi a alguien perfectamente conocido, ese era mi chico, junto a una chica pelinegra, si algo aprendí muy bien fue qué Connor ama las pelinegras, por eso mismo, le daría las dos cosas que el ama, a mi y mi cabello pelinegro, Madison entendió mi mirada y sonrió, era hora de empezar con esto, Fred fue un momento con sus amigos, yo me quede de espaldas a ellos y Madison de frente, ella era la que me diría lo que hacían. —Connor tiene la mirada puesta en ti—dijo ella mirándome coqueta, yo solo reí y negué —Fred viene hacia acá —dijo y beso mi mejilla. Era hora de que ella se fuera. Ella se alejó con la excusa que iría por algo de beber, mientras yo hablaba de tonterías con Fred. —¿Vamos a bailar?—me preguntó y le Sonreí, o si, esto iba de maravilla, lo tome de la mano y lo lleve hacia la pista, vi a Madison cerca de Connor haciéndome sonreír, me giré para ver a Fred y comencé a bailar, mis caderas se movían al compás de la canción, sus manos se posaron ahí para acercarme mas a él y ambos comenzamos a bailar. Vi a Madison acercarse a nosotros, en cuanto estuvo cerca me dio un besó en la mejilla diciendo que se iría por ahí. Cinco minutos después me gire dejandome ver por Connor, mi trasero estaba muy cerca de el amiguto de Fred, no paraba de bailar sin dejar de ver a Connor, él me veía confundido, estaba claro que la droga esta a haciendo efecto, me acerque mas a Fred y moví mi trasero en esa zona y eso hizo que él empezara a besar mi cuello, mi mirada jamás dejo la de Connor, lo estaba torturando, lo estaba consiguiendo, de un momento a otro, él caminó hacia las escaleras, iba hacia las habitaciónes, Madison apareció queriendo bailar con Fred, me excuse para ir al baño y seguí desde lejos a Connor. Lo vi entrando a una habitación y lo seguí, en este piso no había cámaras, entre a la habitación y lo vi en la cama acostado, en cuánto cerré la puerta, él se sentó en la cama y me miro sorprendido, pero sus ojos estaban nublados, no estaba seguro de que fuera real, la droga estaba ahí, le Sonreí y lentamente me acerque a él, sus ojos recorrieron todo mi cuerpo, el no se movía ni cuando lo hice mirarme a los ojos. —Hola mi amor—le dije con una sonrisa y el no hizo nada, eso me hizo reír. Connor estaba tan confundido como para pensar bien, estaba segura que no sabía si yo era un ilusión o realmente estaba aquí, lo se, por que yo también estuve bajo sus efectos. —¿Cielo?—murmuro y Sonreí, me acerqué hasta estar en su regazo, tome su rostro y lo bese lentamente y el me correspondió el besó de la misma manera, me separe de él y me levante, él también se levantó, pero lo empuje y cayo a la cama, no lo dude y me subi sobre él, le Sonreí y comencé a besar su cuello hasta sus labios, mientras mis manos se escapan dentro de su playera, necesitaba sacarla y eso fue lo que hice, se la quité y el no ponía ninguna resistencia, eso me gusto. Connor estaba a mi total merced, le demostrare que es mio completamente y eso jamas lo iba a cambiar, ni él ni nadie y de eso siempre me encargaría yo. —Cielo —murmuró sin dejar de verme, le Sonreí mientras me quitaba la ropa —¿Estas aquí? ¿No es un sueño?—preguntó y me acerque a besarlo, comencé a moverme sobre él, estimulando a su amigo de abajo. —Solo dejate llevar amor. Esas palabras causaron un efecto en él, ya que se lanzó hacia mi, su boca fue muy exigente, lo separe de mi y comencé a besar su cuello, sus manos estaban en mi cintura, no dejaba de moverme sobre él. Comencé a bajar mis besos por su pecho desnudó, el soltó un Jadeo cuando llegue a mi destino, lo hice acostar en la cama y le quite los pantalones, al igual que sus bóxer, lo mire y le Sonreí mientras pasaba mi lengua por mis labios. Tome su erección,y comencé de arriba hacia abajo de manera lenta, torturándolo con mis movimientos. Esto sería tan divertido. Acerque mis labios rozando su erección, él no apartaba su mirada de mi, le Sonreí y metí su polla en mi boca, eso lo hizo soltar una maldicion, seguí los movimientos constantes, mi lengua se movía de una lado a otro, succionen cada vez mas fuerte, mis ojos jamas dejaban de verlo, mi cabeza subía y baja tomando todo de él. Justo cuando ya estaba cerca de su clímax, me aparte de él, subí hasta quedar a su altura. Bese sus labios y el me correspondió gustoso, sus manos bajaron a mi cintura y comenzó a moverme sobre él, sus dedos engancharon mi ropa interior y lentamente la bajó hasta quitármelas, ahora estábamos piel con piel. Extrañaba su toque, sus besos, sus caricias y todo de él, sus manos estaban en mi trasero, daba apretones sin dejar de moverme sobre él, nuestros sexos hacían fricción, se sentía maravilloso, pero necesitaba sentirlo nuevamente, solo por última vez. Sentí sus dedos en mi clítoris, frotándolo en círculos, oh esos se sentía tan bien. Por mucho que esto se sintiera muy bien, había llegado la hora de terminar con esto, tome sus manos y las apricione encima de su cabeza. —Viene lo mejor cariño—le dije y volví a besarlo, quite una de mis manos para agarrar su erección y llevarla a mi entrada, lentamente fui bajando, solté un jadeo al tenerlo dentro de mi por completo, alce mis caderas y volví a bajar, lo volví a hacer lentamente, torturándolo con cada uno de mis movimientos, le Sonreí haciéndolo maldecir. De un momento a otro sus manos fueron a dar mi cintura, haciéndome cabalgar, reí al verlo tan desesperado, él se sentó y yo lo abrace mas a mi, en la habitación solo se escuchaban nuestros gemidos, jadeos y el sonido de la piel chocando, sus embestidas eran cada vez mas rápidas, mi vientre comenzó a contraerse, ya estaba cerca, comencé a mover mis caderas en su encuentro, mi orgasmo llego, al mismo tiempo que el de él. Y justo cuando me iba a apartar, él se dio la vuelta, dejándome debajo de él. Oh mierda. Lo mire dormir, se veía tan lindo así, me acerque y le di un último besó, era hora de qué me fuera. Después de un segundo, tercer roun el se durmió y yo pude cambiarme, revise mi celular y tenia un mensaje de Madison, ella y Fred ya estaban fuera del lugar y podía apostar que nadie los vio. Mire por ultima vez a Connor y salí de la habitación cuidando que nadie me viera, baje y la mayoría de los chicos estaban muy tomados y alguno teniendo sexo, mi mirada se enfocó en la chica que llego con Connor, esa chica que toco lo que era mío, me acerque a ella al verla demasiado ebria, ella se me lanzó encima y me beso, yo le seguí el beso mientras miraba con disimulo a mi alrededor, nadie nos veia, muy bien, comencé a llevarla hacia el baño, al entrar cerré la puerta con seguro, la música amortiguaría sus gritos, eso estaba bien. Siempre iba armada y en este momento lo agradecí, comencé a besar el cuello de la chica, usando eso como distracción, Mi daga favorita jugaba en mi mano, estaba lista para entrar en acción. —Sabes, eres linda y te pareces a mi, pero él es mio y de nadie mas —le susurré y le clave mi daga en su estómago, grito y le tape la boca —Si hoy vas a morir cariño, es por culpa de Connor —le dije, saque la daga de ella y se la enterré en medio de sus pechos, pero con eso no estaba satisfecha, clave la daga en casa uno de sus ojos y para el final le corte la garganta, ella cayo al piso y trato de alejarse de mi, la tomé de una pierna y la jale mas lejos de la puerta, en el piso quedo el rastro de su sangre, esto iba a ser una gran obra de arte, deje a la chica y me coloque sobre ella, rompí su ropa hasta dejarla desnuda. —Le dejare un regalo a mi Amorcito. La chica iba perdiendo fuerza, yo tenía que apresurarme, nuevamente clave la daga en su estómago y fui bajando, la cortada crecía mas y más y la sangre no dejaba de salir, Sonreí satisfecha, mis manos estaban manchadas de sangre, me levanté y comencé a escribir en el espejo. "Esperó y te guste amor. Hasta nuestro próximo encuentro Connor. C.M." Me acerque a la sangre de la chica y manche mis labios con ella, fui al espejo ahí deje mi beso marcado con sangre, Connor eran tan afortunado de tener mis Besos de Sangre, no cualquier persona los tiene. Limpié las sangre que había en mi, acomode mi ropa y salí de baño, cerrándolo con llave por fuera, este regalito lo tenían que ver hasta mañana. Salí de la casa y seguí caminando hasta mi siguiente objetivo, el plan con Connor fue todo un éxito, había tenido un bonus extra y estaba satisfecha. Estaba nuevamente excitada, todo este ajetreo hacia mi sangre hervir, tal vez cite a Christian en algún lugar, pero primero tengo que desarme de Fred. Pedí un Taxi y me dejo unas calles antes de lugar, le mande un mensaje a Madison para que tuviera todo listo, mientras caminaba hacía el lugar, mi mente trabajaba. —Brinca la tablita yo, ya la brinque, brincala cariño pero te mataré, dos y dos son cuatro, cuatro y dos son seis, seis y dos son ocho, ocho y ocho dieciséis, dieciséis son los muertos que me siguen ya, solo juega conmigo a lo Lamentarás, dieciséis juegos que pasaras y si sobrevives, te salvarás. Mis juegos nunca acabarán.
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