—Los gemelos te han traicionado, te han robado millones en mercancía y no, nos han querido decir dónde están.— Explico Anton. —N...no..no es ver.. verdad.— Murmuró con demasiado dolor Beliel quien tenía un ojo sin poder abrir por lo hinchado que estaba de tantos golpes. Cannan estaba mucho peor, Evelyne estaba segura que el había intentado proteger a su hermano de los golpes. —Ellos eran los encargados, nadie más sabía del trabajo.— Hablo Anton. —De que eran tus mejores trabajadores pero te han traicionado.— Soltó. —Ya veo, con que fue así.— Hablo. —Bueno, ¿pero que se le va a hacer si ese fue el caso?— Respondió de forma tranquila. —Ahora que termine de revisar, quiero comer algo ya veré que hago con ellos después.— Dio unos pasos para atrás dándoles una última mirada para después c

