Horas antes… En la elegante mansión Lancaster Jade se encontraba en el baño, con la cabeza dentro del inodoro, vomitando la manzana que se había comido después de haber asesinado a su ex. Su larga cabellera roja caía desordenada sobre su espalda, mientras Jennifer, con los brazos cruzados frente a la puerta entreabierta, observaba la escena con una mezcla de enojo y tristeza. Jennifer, con sus ojos verdes visiblemente entristecidos, no podía contener la avalancha de emociones que la invadían al darse cuenta de la verdad que se ocultaba tras el vómito de su hermana. Por años había convivido con Jade sin presenciar que ella vomitara, lo que le confirmaba pensando: «Jade estaba embarazada, de Archie» Las lágrimas de rabia y dolor amenazaban con brotar de los ojos de Jennifer, pero se obl

