Mich intento de las miles de forma mantenerse siempre en línea con esa mujer porque podía percibir que tenía miedo a todo, no importa que sea pero temia en cada gesto que hacía y solo quiso que lleven lo que queda de noche en paz. Tomó distancia, le dejo su espacio como debía ser y marco en su teléfono a su chófer. Tina por su parte se mantenía de pie y solo escuchaba la conversación. Cuando le responden el llamado empieza hablar — Te ordene dos platos, no lo olvides y que sea rápido — grita enojado. — Si, señor — se escuchó del otro lado del teléfono. — Lo espero entonces, estamos en el camarín del fondo, ¿quedó claro? — pregunta serio. Estaba conociendo la cara de ese hombre, el gesto con los empleados para tratarlos cambiaba completamente y eso le asustó pero también estaba acostum

