XXII

1149 Palabras

Después de la lucha que tomamos entrando a Manu en el coche llegamos a casa y yo me sentía más que feliz, era realmente hermoso estar así con el. -¿quieres ir a nadar? - asentí entusiasmada y corrí escaleras arriba para ponerme el traje de baño. Entre al baño y rápidamente me deshice de mi ropa, reí al recordar cómo esta mañana había encontrado cambios míos en la parte trasera de la maleta bien ocultas. Ese hombre es un necio. Salí del baño y me mire al espejo, era de dos partes y no mostraba mucho pero tampoco era muy tapador, mis mejillas se sonrojaron en sobre manera. Tenía mucha vergüenza, sé que me había visto en ropa interior ya, pero esas veces no me encontraba consiente, ahora sí tengo mis 5 sentidos y la vergüenza me mata. Mi subconsciente me miró mal y mi diosa levanto la cab

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