NARRA VALENTINA. “Querido diario” Comencé a escribir, me detuve por unos segundos buscando las palabras y continué. ¿Cómo huyes de tu mente?, ¿cómo escapas de ella?, ¿cuál es la forma de sobrevivir a sus palabras?. ¿Cómo salir ilesa de sus memorias?, si tan solo le basta un recuerdo para acabar contigo por completo. Todos batallamos con enemigos invisibles y de alguna manera somos conscientes de que es una batalla perdida, ya que nadie puede defenderte de ti mismo. Muchos quieren ayudarte, pero no pueden y lo sabes, estamos solos en esta habitación oscura a la que llamamos mente. Mi mente es un libro que jamás podría leer, le faltan páginas y le sobran historias. Mi mente no es un hogar, tan solo es un descampado solitario y vacío. A veces intento no pensar mucho en los malos recuerdos,

