Después de una tarde-noche agitada midiéndose cada conjunto, cada falda, cada calzado de marcas famosas, Emily entró a la casa donde ahora estaría viviendo, Sarah estaba sentada cenando cereal en el comedor, cuando vio a un par de hombres del hotel cargando bolsas y bolsas de marca, a lo último entró Emily, se le veía la cara de cansancio.
― ¡Emily! Wow, ¿Qué es lo que está pasando aquí?―dijo Sarah levantándose de su silla, los hombres desaparecieron dejándolas a solas finalmente. Emily se dejó caer en uno de los grandes sillones de la sala.
―Mis uniformes. ―Emily dijo finalmente, Sarah se acercó y comenzó a mirar el interior de una bolsa, entonces jadeó al ver la caja de zapatos con la marca GUCCI.
―Oh, Dios mío, ―susurró sacando unas zapatillas negras de tacón, eran hermosas, discr
