Capítulo 05

731 Palabras
Erior. —Me lo está poniendo difícil, enserio lo está haciendo. —Digo, Mark ríe abriendo la maletera del auto. Sully me mira con cara de ¿Enserio te crees tú mentira? —Venga hombre, sabes muy bien que las hormonas en las chicas de su edad están por los aires. No le hagas mucho caso —Deja los balones en el maletero y cierra. No sé en qué momento llegue a sentir que podía confiar en mi hermano mayor, quien resulta ser profesor de educación física y su novia, la psicóloga. Pero ya les dije todo, omitiendo la parte donde pase casi toda la tarde masturbándome sobre sofá con tantas ganas que a la noche ya había caído dormido y apenas pude levantarme por la mañana por la pereza que tenía. —Bien. No sé si ustedes dos son muy inocentes o retardados. —Sully se pone en medio de ambos, bajando la voz porque los estudiantes van saliendo en manada para ir a sus casas y nosotros aún seguimos en el estacionamiento conversando mis problemas, los cuales se han vuelto más grandes cada día. Primero, recién me graduó y cumplo los veintitrés y voy como tonto a anotarme para dar cursos extras sin siquiera esperar tener más años de credibilidad en el instituto. Segundo, mi novia de cuatro años me manda a la mierda por otro. Tercero, encuentro una estudiante que le gusta dormir en clases como una perezosa y no hace caso alguno, porque pareciera que quiere repetir el año escolar. Cuarto, descubro que tiene fantasías sexuales más calientes que las mías. Quinto, empiezo a sentir una extraña atracción hacía ella cuando recuerdo como me ayudo en el aula a subir mi ánimo. — ¿De que hablas, cari? —Indaga Mark, tomando una mejilla y ella abofetea su mano. —Es que es obvio... ¿Enserio creen que la chica tiene un novio y escribe todas sus aventuras con él en un cuaderno? Ah, y casual... Su novio tiene tu nombre. —Escupe como una sabionda. —Eh, sí. —Respondemos y ella borra su sonrisa para poner cara de ogro. —Miren par de idiotas, la chica obviamente tiene un amor platónico por Erior y más que una salidita romántica se lo quiere comer a él y no como caníbal. Te quiero follar duro y tú crees que es una dulce niña inocente que no mata una mosca. —Suspira— si te descuidas te viola. —No es como si él se fuera a negar —comenta Mark riendo, ganando un puñetazo de mi parte. Para ser mayores de edad parecemos más unos críos saliendo del instinto para volver y dar clases en el. —Lo que no entiendo es como esa adolescente —dice con la mano puesta en su barbilla— aún sigue aquí, Digo, ¿No debería de estar ya en la universidad? sino me equivoco solo está repitiendo algunas clases en particulares. Sully carraspea y agacha la cabeza —Lo siento, eso es confidencial. —Deja en claro que Mia tuvo algún problema psicológico al decir eso. —Amor... amorcito... cielo...—Mark se acerca y la abraza. Uh, ya le va a sacar la información. Escucho un grito y los tres giramos en la dirección de la que proviene. Hay varios del equipo de beisbol mirando y cuchicheando entre ellos. Entonces reparo en la persona a la que están molestando, Mia tiene el rostro rojo y su amiga Vicky está por saltar y clavar sus uñas sobre Riven, el líder de las Águilas de nuestro pueblo Wellshey. —Vamos muñequita, gime para mí. —Le comenta a la chica gótica, quien sorprendentemente lo patea en la entrepierna y antes de que pueda reaccionar lo pega a la cerca de hierro con su brazo derecho justo como en las pelis de acción, con el antebrazo asfixiándolo. —Mira pedazo de mierda, vuelve a decir algo y juro castrarte. No sé qué le está diciendo Vicky pero parece dejarlos fuera de sí, incluso se voltean para mirarla asustados. — ¿¡Qué!? —indaga ella y ambos niegan con la cabeza. —Cierra la boca se te cae la baba. —Reacciono y caigo en las miradas acusadoras del par que me acompaña. —Bien. Si tengo un problema... —Esperan a que les explique y eso hago— se llama Mia.
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