Serena
Todos nos felicitaban, Eliot estaba a mi lado, no podía creer que era su nueva diseñadora.
—Ven, allí está un nuevo inversionista, es muy importante para nuestra empresa.
Al acercarnos, veo su cara que me era un poco conocida, empecé a mirarlo y detallarlo bien.
—Señor Lucas Ambani que alegría que allá venido el día de hoy,
Al escuchar su nombre no podía creer, ya habían pasado seis años desde que lo ví en el hospital por última vez.
—A usted, por la invitación y muchas felicidades señorita Serena.
Ambos estábamos en shock, ninguno sabía que nos encontraríamos de nuevo y en este lugar.
—Señor Bellono me gustaría agendar una cita para hablar de nuestra nueva unión, me interesa firmar el contrato pronto.
Eliot se pone muy feliz al escuchar las palabras de Lucas que por cierto no dejaba de verme.
—No estás feliz Serena, lo miro y sonrió.
—Claro que si, es muy importante para nosotros que quiera este trato.
Extiendo mi mano del cual el la toma, Eliot coloca su mano en mi hombro.
—Bueno señor Ambani disfrute de este delicioso desayuno, nos veremos en la tarde para la firma del contrato.
Ambos nos vamos de su lado, volteo por un momento para verlo de nuevo, estaba hablando con su asistente.
La mañana transcurrió con normalidad, al llegar a mi oficina me llegó una sorpresa.
—Pero que bellas, digo mirando las hermosas rojas rosadas que estaban en mi escritorio.
—Señorita Serena, la envío el señor Lucas Ambani para felicitarla.
—Victoria sabes si el señor Ambani aún está en la empresa?
La miro y asiente, —esta con el señor Bellono en este momento.
—Entiendo, por favor búscalo cuando termine la reunión con Eliot.
Quería hablar con el, saber que había pasado con su vida, pero por lo que escuché de su apellido imaginaba que se había casado con Anyela.
Lucas
—Me alegra mucho que aceptara mi propuesta pero no esperaba que fuera tan pronto señor Ambani.
—Bueno entre más pronto mejor, no lo cree así señor Bellono.
Ambos reímos y empezamos a firmar el contrato, y ultimar los últimos detalles.
Al salir de su oficina una joven señorita se me acerca.
—Disculpe señor Ambani pero la señorita Serena quiere hablar con usted.
De inmediato me voy con la joven para ir a la oficina de Serena, al abrir la puerta ahí estaba mi primer amor.
Al verme entrar su asistente sale , se levanta de la silla y me da un abrazo, su acción me toma por sorpresa.
Correspondi su abrazo, su aroma no había cambiado tal vez había cambiado un poco físicamente pero si interior seguía siendo el mismo.
—Que alegría verte Lucas, estoy feliz de que estés muy bien, dice sollozando.
—A mi también me alegra verte muy bien Serena, seco sus lágrimas.
Ambos nos sentamos para charlar, mientras me trae un vaso de agua veo en su escritorio fotos de niños.
Tomo una que estaba Serena con dos pequeños y Eliot en una playa.
—Oh esa foto fue cuando lleve a los mellizos al mar por primera vez.
Me sorprendo al escucharla,
—tuviste mellizos, no puedo creerlo el medico no nos dijo eso.
—Bueno es que para ese entonces era muy pronto saberlo, mira el es Thomas y Charlotte.
Sonrió al escuchar sus lindos nombres, ambos se parecen mucho a Damián.
—Oh por cierto mira yo también soy padre de una niña,
—Wow, no puedo creerlo te felicito tu pequeña se parece mucho a ti y a Anyela.
Ambos nos miramos por un momento, —bueno y que tal es Anyela, sigue siendo la misma frívola de siempre.
Ambos reímos, —si pero ha cambiado un poco, es buena madre cuida muy bien a Lorena, he aprendido a quererla.
Ella toma mi mano, —eso es bueno Lucas, al final todo salió bien, por cierto mis más sentidos pésame por la muerte de tu abuelo, lo ví en las noticias.
Agachó la cabeza por un momento, —bueno ahora está con mi abuela, ellos se amaban mucho.
Serena se levanta de la silla por un momento, ya que su movil sonó, pero se queda inmóvil por mis palabras.
—Damian se casó hace tres años, un silencio inunda la oficina.
**Carajo no debí decir eso**,pienso, ella voltea a verme y sonríe.
—Me alegro por el, bueno creo que tengo una reunión, Lucas te gustaría conocer a tus sobrinos.
Me levanto de la silla y me acerco a ella, —claro que si, dame la dirección de tu casa e iré a verlos.
Serena
—Oye que tienes, estás muy callada, paso algo.
Miro a Eliot con cara de preocupación, —no te preocupes, solo que estoy un poco cansada.
— Qué dices si me acompañas a una fiesta de accionistas este viernes.
—Hmmm y me vas a invitar a bailar, digo con una sonrisa, el se acerca a mi.
—Claro bailaré con la mujer más hermosa de todas, coloca mis manos en mi rostro.
Empezamos a besarnos, Eliot y yo empezamos a salir hace dos años, empezamos a vivir juntos hace seis meses, queríamos ir despacio por los niños, sentía muchas cosas por él.
Al llegar a casa el me llevaba en sus brazos, besaba mi cuello, yo moría mi labio inferior.
Cada rose de sus labios me hacía estremecer, me acuesta en nuestra cama con cuidado, me trataba como una muñeca de porcelana.
—Serena te amo, el acaricia mi cabello con cariño.
Ambos nos quitamos la ropa, nos dejábamos llevar por nuestra pasión, besaba y mordía mis pezones que estaban duros por lo excitada que estaba.
Aprieto las sábanas y arqueo mi espalda, —carajo Serena cada uno de tus gemidos me vuelven loco.
Baja su boca hasta mi vagi**, empieza a estimularme con su lengua, yo movía mis caderas con fuerza.
—Eliot...ven, digo agitada.
El sonríe al oir mis palabras, me abre las piernas, se pone el condón y mete a su gran amigo que estaba duro para mí.
Empieza a embestir con fuerza, todo mi cuerpo se sentía caliente, sentía que mi cabeza se iba a derretir del placer.
Me alza, besa mi cuello y mis pechos, el gruñía con cada estocada que me daba, envuelvo mis brazos en su cuello.
—Te amo mucho Serena, yo beso sus labios, —Eliot, eres lo mejor que me ha pasado en la vida, te amo.
Al decir esas palabras, me embiste con más fuerza, yo gimo más fuerte, era la primera vez que le decía que lo amaba.
Yo podia creer lo que había dicho, era la primera vez que le decía a un hombre que me amaba.