Ahora se que me amas

Guardando secretos

Eliot

—Señor, la señora está con sus hijos en el centro comercial y están con su cuñado.

—Gracias por la información, puedes retirarte, en ese momento entra mi amigo y socio Marcos.

El se sienta frente a mí, —oye todo está bien, porque tú jefe de seguridad estaba aquí.

Aprieto mis manos, me levanto de la silla, —quiero mayor vigilancia para Serena y los niños.

Marcos frunce un poco sus cejas, —acaso te amenazaron o algo así!!

—No, Damián Walton volvió al país, me enteré hace dos días, estepo tomando un trago.

—Oh mierd*, y Serena lo sabe!

Niego con la cabeza, —por el momento no pero lo sabrá muy pronto y se que se preocupara por lo niños.

—Que pasada cuando se vean, bueno Eliot lo digo porque tienen hijos y un pasado!!

Lo miro molesto, —exacto lo de ellos fue en el pasado, el la abandonó, ahora ella está conmigo y no pienso dejarla ni a los pequeños.

Marcos se acerca a mi, —lo se Eliot pero debes estar preparado, sabes cómo son los sentimientos, se que amas a Serena pero que pasará si volviera Angie a tu vida.

Me quedo en silencio, —es la misma situación con Serena, entre más pronto le propongas matrimonio es mejor.

Marcos empezó a caminar pero se tiene a mi pregunta, —porque nombras a Angie, no entiendo.

El volteo a verme, —porque ella volvió hace un mes, al país.

Me sirvo otro trago y me acerco a mi escritorio, saco de mi cajón una vieja foto, era de mi primer amor Angie y mía en París.

Cada vez que sonreía se le formaban unos hoyuelos en sus mejillas, ojos avellana, cabello castaño, piel blanca, labios pequeños, su nariz definida y dulce personalidad.

Aprieto mis manos,— joder porque ahora vuelves, maldito Marcos porque me dijo eso.

Serena

—Que quieres saber Mahia?

Ella me mira por un momento antes de preguntar.

— Tus hijos son de Damián!?

Mis manos temblaban, Mahia las toma, —oye tranquila, no le diré nada a mi hermano lo juro.

Ella me abraza, me da una palmaditas para calmarme, —si ellos son tus sobrinos.

Digo en sus brazos, —oh dios mío!!, dice sorprendida sin soltarme.

Ambas no separamos, —bueno ahora tengo tres sobrinos que alegría, toma mis manos.

—Gracias Serena, por traer al mundo a mis sobrinos, son hermosos, dice con alegría.

Mahia nos llevó a comer a todos,

—ire ayudar a Mahia con las bandejas.

Me quedo en la mesa con los pequeños, no dejaba de ver al pequeño Alex, era muy dulce y tierno, mis hijos eran feliz con él.

—Mahia no quiero que le digas algo a Damián, dice Jhon molesto.

—Jhon me estás lastimando el brazo, y por supuesto que no le diré nada a mi hermano, no se de que seria capaz si lo sabe.

Mahia se suelta de su agarre,

—Pero ahora ya se que tengo dos sobrinos más, no veremos más seguido.

Veo como Mahia se acerca con una sonrisa, mi hermano estaba con el ceño fruncido.

Hablamos y reíamos con los niños, yo cuidaba del pequeño Alex mientras ellos jugaban con los gemelos.

El pequeño me mira, —quero ir al baño, po favor

Sonrió y lo tomo en mis brazos,

—claro que si, vamos, te ayudaré.

Horas más tarde...

—Bueno fue agradable verlos de nuevo, Serena ojalá nos podamos ver de nuevo.

Yo asiento, —claro que si, ya tienes mi número llámame y ve a mi casa con el pequeño Alex.

—Siiiii y jugamos con mis juguetes, papá nos compra muchos juguetes.

—Claro pequeño Thomas y cuando vaya a verlos, le llevaré mucho más!!

Jhon se acerca a ella y toma su mano, —por favor guarda el secreto, por el bien de todos.

—Claro confían en mí, ambos no dejaban de verse.

Sonrió al verlos, eran igual cuando eran pequeños, veo como uno de los hombres de acerca a Mahia.

—Bueno debemos irnos, Damián está preguntando por Alex, sin decir más ella se va.

—Oye porque eres así con Mahia, que acaso todavía te gusta?

El me mira con una ceja levantada, —sabes que no, ahora vámonos, tengo trabajos que hacer, ser medico no es fácil.

Damián

Había llegado a casa, me quito la corbata y subo a la habitación de Alex, al abrir veo a mi pequeño dormido, sonrió al verlo.

—Se ve como todo un angelito, dice mi hermana.

—Me dijeron que te causó un poco de problemas, digo acercándome a él.

—Bueno un poco, pero luego lo pude controlar, el es un niño bueno, por cierto Vivían llegará mañana.

Suspiro al escuchar su nombre,

—Una mujer que no dudo en dar la custodia de su hijo y prefiere el dinero.

Ella se acerca a mi, —lo importante es que Alex sienta el amor de su padre, eso bastará para el, además hoy hizo amigos.

Volteo a verla, —jugo con dos niños que eran muy alegres en el centro comercial, rio mucho sabes, se divirtió mucho.

—Vaya eso es bueno, el no es bueno socializando, es un poco tímido.

—Lo se pero con ellos se abrió mucho, es más me gustaría que los volviera a ver que dices!!

Lo arropó bien y le doy un beso en su frente, —lo pensaré, pero confiaré en ti.

Ambos salimos de la habitación, en ese momento llega nuestra madre.

— Como que te vas a divorciar de Vivian, estás loco!!

—Madre esa no es tu decisión, además es la vida de mi hermano, dice Mahia molesta.

Mi madre cruza sus brazos,

—disculpa!!, como le estás hablando a tu madre, niña grosera.

—Mahia tiene razón, dice nuestro padre.

Los tres lo vemos, —pero cariño que dirá la prensa además....

—Ademas nada, Damián podrá solucionarlo, deja de tenerse en su vida Magda.

Mi hermana y yo nos miramos algo sorprendidos por sus palabras.

—Ahora deja el escándalo, nuestro nieto está dormido.

Mi madre se va molesta, mi padre se acerca a mi.

—Tú has cumplido como hijo así que yo voy a cumplir con lo mío, no me meteré más en tu vida.

Coloca su mano en mi hombro, se va hacia su habitación.

—Vaya nuestro padre ha cambiado desde que murió el abuelo.

Me quedo en silencio, lo veo irse, había algo de el que no estaba bien, —por cierto quiero que me acompañes a una fiesta.

Ella me mira y sonrie, —no es una cena de trabajo o algo así sabes que no me gusta ir a esos eventos.

Yo sonrió, —es el aniversario de Connor y su esposa.

—Esta bien iré, pero beberé mucho así que no quiero sermones después.

Ambos reinos, jamás pensé lo que nos esperaba a ambos ese día.