SIEMPRE FUISTE TU

Capítulo 1

Hanna

El corazón me palpita fuerte y las manos me sudan sin cesar, pronto volveré a verlo, después de tantos años, después de extrañarlo tanto.

Abril está muy emocionada,  ella siempre se ha llevado bien con su hermano, él es muy bueno por eso siempre lo he amado.

Recuerdo cuando éramos niños y jugábamos, siempre me defendía mientras yo me perdía mirando sus radiantes ojos verdes.

Es amor imposible, él siempre me ha visto como a una niña, además soy su prima, sé que mi amor es enfermizo, pero no puedo obligar a mi corazón a dejar de soñar con un beso suyo.

Y de pronto, lo miro, sus radiantes ojos verdes me deslumbran por completo, sonríe alegremente y abraza a mi tío, su mamá llora de alegría y Abril sonríe divertida.

−Pablo, no sabes cuánto te extrañamos – dice su mamá mientras lo abraza con cariño, él sonríe y la estrecha fuerte a su cuerpo.

Yo solo lo miro, es mucho más guapo de lo que recuerdo, siempre fue un niño muy lindo, pero ahora, es un hombre, uno muy guapo y atractivo.

Sus castaños cabellos combinan con sus radiantes ojos verdes, mi tío Alex sonríe al ver a su hijo mientras yo siento que el corazón ha revivido al mirar al hombre que siempre he querido

−Ella es Hanna, ¿te acuerdas de ella? – dice mi tío Alex, Pablo me mira fijamente, siento como todo mi cuerpo se estremece, sonríe seductoramente y asiente

−Claro que me acuerdo, ¿cómo estas Hanna? –dice con su sonrisa de lado, no puedo hablar, estoy perdida en su deslumbrante mirar

−Bien –digo aduras penas con las mejillas ardiendo, él sonríe y me da un breve beso en mis enrojecidas mejillas, puedo oler su perfume, delicioso a mis sentidos, escucho perfecto sus latidos, llenando de sentimientos los míos.

Se separa de mí y me mira fijamente, ¿cómo se supone que puedo dejar de quererlo?, si cada minuto tengo presente su recuerdo

Hace años que se fue a estudiar al extranjero, puedo decir que cuando se fue se llevó una parte de mí con él.

Sé que no tengo perdón, es pecado amarlo así, él es prohibido para mí, pero no puedo sacarlo de mi corazón, porque él es el único dueño de mi interior.

Estamos sentados alrededor de la mesa, Pablo nos cuenta sobre sus estudios, obtuvo las mejores notas de la universidad, ha regresado para hacerse cargo de la empresa junto a su papá.

Yo siempre he visto a la familia Cantú como si fuera la mía, he convivido más con ellos que con mi propia madre.

Ella se fue a trabajar a otro país cuando yo solo tenía 6 años, desde entonces mi abuelita se hizo cargo de mí. Mi padre nunca se ha preocupado por mí, ni siquiera me ha dado su apellido, y aunque mi tío Alex y mi padre son primos, puedo decir que al único que llamaría padre es a mi tío.

Desde que mi madre se fue, los Cantú me ofrecieron su cariño, siempre han sido buenos conmigo, me quiere como a una hija más, y yo los quiero como si fueran mis papás.

Abril es muy alegre y simpática, es como la hermana que nunca tuve, la Sra. Angeles es muy buena y dulce, como me hubiera gustado, que así fuera mi mamá.

Y él siempre ha sido el amor de mi vida, lo he amado en silencio desde que tengo uso de razón, solo soñando con su amor.

Cuando se fue a estudiar, me dolió mucho saber que no lo volvería a ver, he vivido extrañándolo, pero ahora está aquí, y aunque sé que es un imposible para mí, me conformo con mirar su deslumbrante mirada que me llena de paz el alma.

Pablo

Me siento muy feliz, por fin estoy en casa otra vez, había extrañado mucho a mi familia, pero por fin he vuelto.

Tengo muchos planes y sueños, quiero trabajar en la empresa junto a mi padre,  él y yo siempre hemos sido muy unidos, siempre me inculcó el amor por nuestra empresa, es muy dedicado y ha logrado hacerla crecer, estoy muy orgulloso de mi padre y espero que algún día él lo este de mí.

Todos están muy felices por mi llegada, yo también lo estoy, pero lo que me ha llama la atención desde que llegue es la linda mirada de mi prima Hanna.

Siempre ha sido muy tímida, recuerdo que cuando éramos niños nos la pasábamos jugando, ella y Abril son 2 años menores que yo, siempre las he visto como unas niñas.

Pero ahora mirándola detenidamente, creo que Hanna ha dejado de ser la pequeña niña de coletas, sus grandes ojos azules brillan intensamente, y sus largos cabellos cobrizos caen a la perfección en su espalda.

Debo decir que se ha convertido en una muchacha muy linda, soy un maldito pervertido, Hanna es mi prima, además es una niña.

La miro fijamente y noto el carmín en sus mejillas, baja la mirada avergonzada y sonrío al mirar su tierna timidez.

Terminamos de comer, y nos sentamos a platicar, mi padre me habla de la empresa, me muero por empezar a trabajar, mi madre nos mira irritada y tanto mi padre como yo lo notamos

− ¿Pueden dejar de hablar de trabajo? – dice mi mamá, papá toma su mano y deposita un pequeño beso en su sortija de matrimonio

Lo que usted diga – dice mi padre divertido y todos reímos

Me gusta mucho estar en  casa, mis padres siempre se han llevado bien, jamás los he visto discutir, supongo que muchas veces han peleado, pero ni Abril ni yo nos hemos enterado.

Mi padre adora a mi mamá, siempre la mira con amor y cariño y mi mamá siempre ha dicho que mi padre es su único gran amor.

Espero algún día encontrar una mujer que me robe el corazón, y amarla así como mi padre ama a mi mamá.

Miro a Hanna y pienso en que ella no tiene una familia como la mía, su mamá hace mucho que se fue, se por Abril y su madre que casi no tiene contacto con ella, su abuela es la que la ha criado desde que era una niña.

Mi tío Daniel jamás se hizo cargo de ella, siempre ha sido un desgraciado, por eso no me sorprende que mi padre y él no se lleven bien.

Recuerdo que de niños jugábamos mucho, pero después me fui a estudiar y deje de ver a Hanna, pero ahora que la he vuelto a mirar, hay algo en ella que me tiene hipnotizado.

La tarde pasa entre pláticas y risas, había extrañado tanto estar en casa con mi familia, miro a Hanna, ella también me mira, se ve muy linda con sus mejillas enrojecidas, de verdad que se ha convertido en una muchacha muy bella, aún recuerdo cuando jugábamos de niños, siempre cargaba su muñeca de trapo y sus lindas coletas.

Pero ahora ya no es una niña, es una mujer, una muy hermosa, aunque su tierna mirada sigue siendo la de una niña, debo dejar de mirar a Hanna, es mi prima por el amor de Dios.

−Me tengo que ir – dice Hanna, no puedo dejar de mirarla

−Está bien, me saludas a tu abuelita – dice mi madre con cariño

−Claro – dice Hanna mientras se despide de mis padres

−Yo también me voy, te paso a dejar – digo y miro como el rubor se esparce por sus mejillas

− ¿Estás seguro que no quieres quedarte en esta casa? – dice mi madre y niego con una sonrisa, me encanta esta casa, es donde crecí, donde Abril, Hanna y yo jugábamos de pequeños, pero muero por llegar a mi departamento, siempre he sido muy independiente y me gusta tener mi privacidad

−Si mamá, pero no te preocupes, vendré a verte pronto –digo y mi madre asiente con un poco de tristeza, la abrazo y le do un tierno beso, después abrazo a mi padre, me separo de él y miro como toma a mi madre de la cintura acercándola a él, sonrío al saber que  a pesar de los años, mis padres se siguen amando.

−Vamos -  digo y tomo a Hanna de la mano, puedo sentir su nerviosismo

−Está bien –dice sonrojada, miro a mi padre y ambos asentimos, Abril se despide de Hanna y después salimos de la casa.

Está sentada a mi lado mirando por la ventana, creo que es demasiado tímida, la miro mientras el semáforo está en rojo, tiene varias pecas en su blanca piel, su largo y ondulado cabello tiene varios tonos cobrizos, se viste muy sencilla, solo unos jeans casuales y una blusa blanca de botones al frente, no lleva mucho maquillaje, pero aun así luce muy linda.

− ¿Y cómo has estado?, hace mucho que no te veía – digo para romper el silencio, me mira y vuelve a sonrojarse, debo decir que es la niña más tierna que he conocido

−Yo, bueno, no hay mucho que contar, ya sabes, la escuela está bien, espero sacar buenas notas para que mi abuelita este orgullosa de mi –dice y sonrío mientras sus lindos ojos azules se clavan en los míos

− ¿Y tú, como has estado?, sé que te fue muy bien en el extranjero – dice tímidamente

−Sí, saque las mejores notas, pero la verdad extrañaba a mis papás, y a la loquita de mi hermana, así que estoy feliz de estar aquí – digo con sinceridad, fue una buena experiencia estudiar en otro país, pero siempre es bueno tener a la familia cerca, además quiero empezar a trabajar en la empresa, por eso regrese.

−Llegamos – digo y estaciono el coche frente al edificio donde vive, me bajo y abro la puerta, sale y queda a centímetros de mí,  me mira fijamente, no entiendo como no me había dado cuenta antes de sus lindos ojos, será porque siempre la he visto como una niña, además de ser mi prima.

−Gracias – dice con nerviosismo, ¿qué diablos me está pasando, porque no puedo dejar de contemplar sus bellos ojos?

−De nada –digo y le doy un beso en la mejilla, su piel es suave y el olor de su perfume es dulce, puedo escuchar su rápida respiración, me separo de ella y miro su sonrojo, mientras me pierdo en el resplandor de sus lindos ojos

−Adiós Pablo– dice tratando de reponerse

−Adiós Hanna – digo y la miro alejarse, ¿porque me siento así? ¿porque sus lindos ojos me han cautivado así?

Hanna

Camino temblorosa por el pasillo, lo tuve tan cerca de mí, lo había estado extrañado tanto, y volver a mirar sus hermosos ojos verdes ha sido extraordinario.

Si Pablo supiera todo lo que siento por él, si supiera que desde niña mi amor ha crecido cada día, sé que no puede ser, es mi primo y jamás se fijara en mí, solo es una hermosa ilusión que jamás se hará realidad.

No sé cuándo fue que empecé a enamorarme de él, se perfectamente que siempre me ha visto como una niña, como su prima, sé que nunca me vera como mujer, solo tengo que conformarme con mirar sus hermosos ojos verdes.

−Hola hija, ¿cómo te fue? – dice mi abuelita, sonrío y la abrazo fuerte, aún me late el corazón por haberlo tenido tan cerca

−Bien Tita, me fue muy bien, Pablo regresó – digo sonrojada, mi abuelita sonríe y me acaricia la mejilla

− ¿Y cómo están los Cantú? –pregunta alegremente

−Bien, la Sra. Angeles te mandó saludos – digo y mi Tita sonríe

−Oh, ella siempre tan linda, espero verla pronto para ponernos al día –dice mi abuelita, asiento y sonrío

Entro a mi habitación y me tiro en la cama,  sonrío al recordar lo cerca que lo tuve de mí, no puedo ser tan obvia, temo que Abril o alguien se den cuenta de todo lo que siento por él, pero es imposible, cada vez que me mira, o cuando se acerca a mí, mi corazón late de prisa, y el aire me asfixia.

***

El día llega y mientras la profesora de historia explica los inicios de la independencia, pienso en él, en sus hermosos ojos verdes, esos ojos que siempre he soñado.

Sé que es un amor imposible, él siempre ha pensado que soy una niña, además es mi primo, muchas veces he tratado de olvidarlo,  pero nunca he podido hacerlo, ni la distancia ni su olvido han podido sacarlo de mi corazón.

− ¿Qué te pasa?, has estado muy callada – dice Abril mientras caminamos por los pasillos de la universidad

−Yo, nada, solo, ya sabes, estoy preocupada por los exámenes – digo pero la verdad es que me he pasado el día recordando el resplandor de su hermoso mirar

−Hanna siempre sacas muy buenas notas, deja de azotarte, mejor acompáñame a la empresa, voy a ver si Papá me da permiso de ir al antro esta noche, obvio que tú vas a ir, ¿verdad? – dice y niego, a mí no me gusta salir de noche, y Abril lo sabe, siempre que me invita la rechazo, pero ella nunca se da por vencida

−No lo creo, no me gusta salir de noche, mi Tita se preocupa – digo y Abril rueda los ojos

−Hanna no seas aburrida, además tal vez Pablo vaya – dice y con solo escuchar su nombre el corazón me revolotea dentro de mi

−Vamos a la empresa, debo convencer a mi padre – dice Abril y me jala con ella, mientras pienso en que él estará en la empresa y tal vez lo vea.

Entramos al gran edificio, todos nos saludan con amabilidad, y Abril practica todo lo que le piensa decir a su papá

Entramos al ascensor y mientras los pisos se marcan mi corazón se empieza a acelerar, me muero por volverlo a ver, por volverlo a escuchar y ver su mirada brillar.

El elevador se detiene en el piso 10, las puertas se abren y miro el lujoso salón, Abril camina delante de mí, se detiene frente a la Sra. Inés y ella nos sonríe con amabilidad

−Hola muchachas, ¿cómo están? – dice la secretaria de mi tío con voz suave

−Bien Inés, ¿está mi papá? – dice Abril y la Sra. Inés asiente

−Sí, está en su oficina con Pablo –dice ella y mi corazón palpita más fuerte, está aquí, lo veré por fin

−Qué bueno, espero me dé permiso – dice Abril y me sonríe, y de pronto lo miro salir de la oficina junto a su papá, sus verdes ojos se fijan en mi mientras siento el corazón palpitar sin cesar

− ¿Que hacen aquí? –dice mi tío Alex, Abril lo besa con alegría en la mejilla y después hace lo mismo con su hermano, él me mira fijamente mientras las ganas de abrazarlo crecen en mi intensamente, bajo la mirada sonrojada, debo mantener la calma, nadie puede sospechar que lo amo con el alma

−Papi vine porque quiero pedirte permiso para salir esta noche – dice Abril mirando a mi tío Alex, mientras Pablo sigue con sus hermosos ojos en mi

−Abril, eres muy niña para salir de noche – dice mi tío con firmeza y Abril rueda los ojos

−Papá, ya soy mayor de edad – dice ella con irritación

−Papá tiene razón, son muy niñas para andar solas por la noche – dice Pablo con firmeza

− ¿Tú también?, eres un traidor, además seguro tú te vas de antro en las noches –dice Abril molesta

−Yo soy hombre y soy mayor que tú, no es lo mismo, además es muy peligroso que anden solas – dice Pablo y su hermana enfurece

−Que machistas son, aunque seamos mujeres nos sabemos cuidar muy bien, verdad Hanna – dice Abril sacándome del trance por mirar a su hermoso hermano

−Yo, bueno, si es peligroso andar en las noches – digo y Abril me fulmina con la mirada, miro una seductora media sonrisa en los labios de Pablo, haciendo que me suden las manos

−Ves, Hanna si es una muchacha responsable – dice mi tío Alex y Abril hace pucheros

−Porfa, papi, porfa, porfa – dice Abril con suplica, mi tío Alex suspira derrotado, sé que no puede resistirse a los pucheros de su hija

−Está bien, pero Pablo ira con ustedes – dice mi tío Alex y me sonrojo al ínstate

−Si papá, estoy de acuerdo, alguien tiene que cuidarlas – dice Pablo con firmeza

−Está bien – dice Abril y me toma de la mano

−Nos vamos, tenemos que arreglarnos, Pablo pasas por nosotras a las 8, adiós Papi – dice Abril y me jala con ella, me despido con  la mano de mi tío, miro a Pablo, sus deslumbrantes ojos me siguen mientras las puertas de elevador se cierran privándome de su brillante destellar.

Hanna

Estoy en la habitación de Abril, sintiendo mariposas en la panza, no estoy muy convencida de ir al dichoso antro, pero saber que Pablo estará ahí, hace que valga la pena.

Abril se ha cambiado de ropa más de 10 veces, sin exagerar, es una muchacha muy linda, tiene una larga cabellera caoba, sus ojos son marrones y tiene un cuerpo muy estilizado, además es muy divertida, por eso no me sorprende que todos los muchachos andan detrás de ella.

Gracias a Dios se ha decidido en su vestuario, tiene puesto un vestido dorado con zapatillas a juego, se ve muy guapa.

−No vas a ir así – dice Abril mirando mis jeans negros y mis converse favoritos, me miro y arrugo el ceño

− ¿Qué tiene de malo? –digo y Abril rueda los ojos irritada

−Espera –dice y va a su closet, la miro elegir varios atuendos, no tengo idea que piensa hacer pero no me da buena espina

−Este, es precioso, te vas a ver perfecta –dice y me extiende un diminuto vestido n***o, niego asustada, eso es demasiado pequeño, ni loca me lo voy a poner

−No, es muy chiquito – digo asustada pero Abril me lo entrega con firmeza

−Tienes que verte hermosa, tal vez ahí este el amor de tu vida – dice y pienso en Pablo, eso es definitivo, él estará ahí, él es el amor de mi vida.

Miro el diminuto vestido en mis manos, tal vez no es mala idea, me gustaría verme bien para él, aunque sé muy bien que nunca se fijara en mí.

−Póntelo y no discutas – dice Abril sacándome de mis pensamientos, suspiro derrotada, de todas maneras Abril no me dejara en paz hasta que me lo ponga.

Entro al baño y me pongo el vestido, es muy corto y mis piernas se ven demasiado, no sé si esto es una buena idea

−Seguro Roberto va a ir con Pablo –dice Abril desde afuera, Roberto y Pablo siempre han sido amigos, es el hijo del Sr. Roberto, el mejor amigo de mi tío Alex, aunque es un mujeriego empedernido

−Sí, él también regresó – digo mirándome al espejo

−Sí, Pablo y él son muy amigos, Roberto es muy guapo, pero jamás andaría con él, se va a la cama con la que se le cruce, además Pablo lo mata antes de que dé un paso cerca de mí –dice Abril y la escucho sonreír

−Pero tú te mueres por Álvaro –digo mientras acomodo unos mechones de mi ondulado cabello

−Obvio, yo lo amo, pero el muy tonto no se atreve a declararme su amor, ¿porque los hombres son tan inmaduros? – dice Abril molesta, toda la universidad sabe que Álvaro babea por Abril pero él es demasiado tímido, creo que Abril lo intimida un poco, es obvio, ella es muy alegre y todos los muchachos de la escuela están locos por ella.

−Álvaro es muy tímido –digo y salgo del baño, Abril se gira y me mira, puedo ver como tiene la boca abierta mientras se le forma una sonrisa, se acerca  a mí y me abraza

−Estas guapísima, que se preparen los muchachos porque hoy será una gran noche – dice y sonríe, Abril esta loquita, pero así la quiero, con todo y su  locura.

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ESTÁ HISTORIA ES PARTE DE UNA SAGA, LES DEJO LAS NOVELAS COMPLEMENTARIAS.

Pueden encontrarlas todas completas en mi perfil, ¡agrégalas a tu biblioteca para que no te las pierdas!

1- Alex Cantù

2 - Lindos Ojos Marrones

3 - Siempre Fuiste Tú

4 - Rebeca

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