Esta noche es muy especial, nuestro presidente nos dedicara unas palabras.
Nathan hablaría, daría un agradecimiento tanto a sus empleados como a los presentes y compañías asociadas, pero en ese momento Nathan se había quedado en blanco, no recordaba nada de lo que iba a decir, Raymond apareció y le dio unas tarjetas.
— ¿Estás bien?
Pero Nathan al verlo le comento en voz baja.
— Está aquí, Clara esta aquí Ray.
Raymond lo sabía, pero solo asintió y le dijo que no se preocupara, que diera su discurso y después podría hablar con ella.
— No hagas un escándalo Nathan, concéntrate y terminemos con esto.
Ante la atenta mirada de los invitados, Nathan respiro profundo y comenzó su discurso, él le agradeció a los presentes, el apoyo de todos los implicados, los asociados, las empresas que hab
