capitulo 1

1230 Words
Amanda Observó desde mi asiento como dos niños entre los ocho Y nueve años se pelean por un pequeño auto azul de juguete mientras su madre ojea de forma muy entretenida una revista de modas, no se por que las personas, más que todo las mujeres, se fijan tanto en lo que usan personas que supuestamente son un gurú de la moda para así copiar su estilo y estar en, según ellos, lo mas top, yo pienso que cada uno debe tener su propio estilo y no debería importarnos usar cosas que la sociedad considera como raras o feas. -Amanda collins. - Dice la enfermera sacandome de mis pensamientos rebeldistas. -somos nosotras. - Dice mi madre levantando la mano por mi ya que sabe que yo estoy algo asustada y no lo voy a hacer. Nos levantamos y seguimos a la enfermera por el pasillo largo y muy blanco para mi gusto el cual deseaba no volver a pisar en mi vida, observó como cada vez nos vamos acercando mas a la puerta blanca con la placa en color dorado, que es casi de las únicas cosas con color aquí, la cual tiene grabado en color n***o Dr. Peterson, la enfermera da dos toques a la puerta y la abre después de el pase que nos dio esa voz grave que tanto terror me daba de pequeña, y no lo digo Por qué fuera malo conmigo, sino más bien porque yo asociaba su voz con tratamientos dolorosos. Aprieto la mano de mi madre en busca de un poco de valor para adentrarme en ese pequeño cuartito que tan malos recuerdo me trae, recuerdo que de pequeña solía amar y odiar este, lo amaba por que cada vez que veníamos el doctor siempre me daba una paleta muy rica y lo odiaba por qué mientras que me la comía veía a mi mamá llorar y a mi papá contener las lágrimas, mi madre es la primera en entrar dándole un pequeño tirón a mi mano para que la siga. -buenos días doctor peterson. - aunque mi mamá no lo demuestre se que también tiene miedo por los resultados que nos vallan a dar, y me odio por preocupar a mi madre de está forma otra vez. -buenos días señora collins, señorita Amanda cuanto tiempo sin verla, como ha crecido me hubiera gustado que nos hubiéramos reencontrado en otra situación. El doctor peterson me saluda amablemente pero yo solo le puedo dar un asentimiento como saludo por qué parece que mi voz se perdió en algún lugar de mi cuerpo, el doctor nos da una señal para que tomemos asiento, está vez soy yo la primera en hacerlo ya que siento que mis piernas van a dejar de funcionar en cualquier momento. -doctor no es por ser grosera ni nada pero podría decirnos rápido los resultados de los exámenes, creo que me va a dar algo de los nervios. - y es verdad creo que toda la calma que mamá a mostrado estos días de espera se acaba de esfumar. -bueno señora collins, después de revisar varias veces los resultados y preguntarle a varios colegas he incluso pensar en volver a tomar las mues... -podría ir al punto por favor. - interrumpo su discurso que no me sirve de nada, necesito saber el resultado y con la cara de lástima que tanto odio ver en las personas creo que ya se cual es. -son positivos, estas teniendo una recaída. Eso me hace desconectarme de todo sólo oyendo de fondo los sollozos de mamá, aunque era obvio, por todo los síntomas que he tenido todo este tiempo, que me lo acaben de confirmar se siente como un golpe en todo el cuerpo, por que cuando te da la primera vez las posibilidades de superarlo son altas pero una segunda vez con leucemia, la prabalidades de superarlas son muy pero muy bajas. El camino de vuelta casa se siente como si yo no estuviese presente, escuchó a mamá darme palabras de ánimo pero yo no puedo responder, sólo puedo pensar en todo lo que tuve que pasar a mis nueve años y se que todo lo que voy a tener que pasar ahora va a ser mucho más difícil por que las recaídas siempre son las peores, cuando empiezo a observa las casas de mi vecindario me imaginó las reacciones de mi papá y mis hermanos, también las de el resto de mi familia, no quiero recibir sus miradas de dolor y preocupación la cual es causada por mi culpa. Por eso apenas mamá estaciona el carro me bajo y corro a mi cuarto para evitar las preguntas de todos, mi hermano mayor que estaba en la sala se levanta de el sillón con preocupación he intenta acercarse a mi, pero mamá que venía detrás de mi lo detiene del brazo al mismo tiempo que papá sale de la cocina, no se dónde está mi hermano menor y no me molesto en preguntar ya que lo único que quiero hacer es estar sola, por lo menos hasta mañana, pero se que eso no será posible y en unas horas ya tendré a mi hermano mayor tocando la puerta con un par de potes de helado con la idea de una noche de hermanos, pero yo se que sólo lo hace para no dejarme sóla, hacia lo mismo cuando estábamos pequeños, y me duele que el sea otra de las personas a las que voy a preocupar. -.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-. Toc toc toc Los golpes en la puerta resuenan antes de lo esperado, está vez sólo me dejaron un par de horas sola. -adelante. - digo justo cuando mi hermano mayor Maximiliano, o como yo le digo, Max, asome su cabeza por la puerta y me muestre los dos tarros de helado de menta con chocolate, mi favorito. -¿que dices, noche de hermanos?. -max no es necesario que finjas que nada está pasando. -no estoy fingiendo, sólo quiero una noche de hermanos con mi hermana favorita.-intenta darme una sonrisa que parece mas una mueca -ok tal vez si intento distraerte, pero no quiero que pienses en nada que tenga que ver con hospitales. -es salgo difícil sabes, si es casi obvio que muy pronto voy a estar viviendo en uno. -lo vas a superar me oyes, eres la persona más fuerte que conozco, ya pudiste superarla una vez y está vez también lo harás, y yo voy a estar ahí para ayudarte a mandar a volar esa estúpida enfermedad. -no creo ser tan fuerte, sabes que las recaídas atacan con más fuerza.- le digo corriendo la mirada hacia mi ventana para que no veo mis ojos que se empiezan a cristalizar, aunque de nada sirve por que igual lo nota. -hey mandi no te me pongas así, dime que puedo hacer para hacerte sonreír.- Dice con el mote cariñoso que me puso cuando tenía siete años. Pienso, que puede hacer para hacerme sonreír, y creo que ya tengo una idea, si hay un más de cincuenta porciento de posibilidades de que no sobreviva está recaída creo que debería aprovechar el tiempo que me queda al máximo, y creo que ya se como hacerlo. -necesito que me ayudes a hacer una lista.- se que suena como algo sin sentido pero confío en que será algo me ayude a distraerme lo suficientemente de todo lo que vendrá.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD