Te encontré

¿Un accidente?

Me desperté por las caricias de mi esposo, disfrutaba dejando besos por todo mi cuerpo, yo comencé a disfrutar del placer que el me produce, ¿Cómo es posible que aún dormida sienta este deseo?

El deseo de ambos siempre fue mutuo pero ahora con el embarazo me siento más sensible, más fogosa.

Al notar Ángel que me desperté y los gemidos comenzaron a salir de mis labios el me beso, se apoderó de mis labios queriendo saciar su sed pero no hay nada que nos sacie, sus labios pasaron de mis labios a mis pechos los cuales se hicieron más sensibles y mis gemidos comenzaron a salir sin pensarlo.

-Me encantas- regreso a mis labios- estas más sensible cariño- sentí como su mano bajo a mi feminidad y comenzó a acariciar ocasionando más gemidos saliendo de entre nuestros labios, poco después me libero para bajar y comenzar a pasar su lengua en mi feminidad, su movimiento provocó que desatará el clímax en mi haciéndome explotar en un minuto, el se acomodo entre mis caderas y entro en mi con un solo movimiento, se dejó caer en la cama haciendo que yo me girará y quedara sobre el, me ayudaba con los movimientos, nuestros gemidos se hacían cada vez más intensos, nuestros labios se rosaban y nuestros cuerpos chocaban entre si, haciéndonos sentir como llegábamos al clímax al mismo tiempo, el me recostó en la cama con delicadeza y se recostó a mi lado, por necesidad me coloque en su pecho sintiendo los latidos de su corazón.

-Te amo Ángel te he amado siempre- dije tratando de recuperar mi respiración agitada

-Te amo Hanni siempre estaré contigo y con mi hijo, nunca los dejaré y te amaré toda la vida- me dio un beso en el cabello.

Perdimos la noción del tiempo y cuando nos levantamos ya era medio día, mientras desayunamos juntos recibí un mensaje de Michelle.

-Cariño iré de compras con Michelle- dije dejando mi móvil a un lado y tomando su mano sobre la mesa el me miró e hizo una mueca de desagrado, pues es más que obvio que no la tolera

-Te llevo al centro comercial - beso mi mano

-Ella pasará por mi

-Entiendo- se quedó pensando un momento- le diré a mi guardaespaldas que te acompañe no quiero que andes sola y menos en tu estado cariño- no pude evitar sonreír

-De acuerdo te amo- le dije lanzándole un beso

Minutos después el se fue a la empresa yo me aliste para ir con Michelle la cual llego puntual.

-Señora la señorita Michelle la esta esperando en el auto- dijo Alexis mi guardaespaldas

-Gracias ¿Nos vamos?- el asintió

Salimos de la mansión y yo iba en la parte trasera con mi hermana, todo el trayecto íbamos en un incómodo silencio, nuestra relación se fue deteriorando una vez que conocí a Ángel cuando teníamos 7 años, ella cambió mucho, ni siquiera quiso venir a mi boda pero todo eso es cosa del pasado lo que importa es que ella regreso y me gustaría retomar nuestra hermandad y ser lo que no fuimos antes.

-Gracias por invitarme a salir Mich- dije ofreciéndole una sonrisa una vez que llegamos al centro comercial

-De nada Hannia ya te hacía falta cambiar de ambiente- dijo un tanto intrigante

-Soy feliz ahí y lo sabes- seguía con mi sonrisa

-Más que bien

Caminamos por el centro comercial, Alexis no se separaba de mí eso era lo mejor, las órdenes de mi esposo no se objetan.

Después de caminar ella compró algunos vestidos y lencería nueva, yo no compre nada para mi dado a que mi esposo compra todo y manda hacer mis vestidos a mis gustos y medidas, pero si pasamos por una tienda de ropa de bebé, ahí compre algunos trajecitos de color amarillo y blanco, pues aun no se que será pero mi ilusión de ser madre se hace más grande.

-¿Te parece si comemos? - dijo acercándose a mi con todas sus bolsas, mientras que Alexis cargaba las mías

-Claro hermana- le sonreí y nos dirijo a un restaurante pedimos y le pedí a Alexis que se sentará a comer con nosotras, es un tanto grosero no invitar a comer a tu guardaespaldas, pues a pesar de hacer su trabajo te cuidan y hay que responder con amabilidad a su trabajo.

Después de comer ya me sentí cansada, el embarazo me agota mucho y después de una tarde caminando y comprando ya me pesaba.

-Mich ¿podemos regresar a casa? Estoy agotada- dije dejándome caer en una banca

-De acuerdo- musito con una Sonrisa- será la última vez que te sientas así mi querida hermana- sus palabras me dieron gusto ella nunca me dice así

-Te quiero hermana- le di un abrazo y bese su mejilla

- Y yo a ti- caminamos hasta el auto de Michelle ahí nos esperaba su chófer, mi guardaespaldas se iba a sentar de copiloto al igual que cuando veníamos pero ella lo Detuvo- Yo iré enfrente, quiero descansar tu ve con Hannia- fue casi una orden, aunque no entendía porque su insistencia, Alexis no tuvo más que aceptar y se subió de mi lado derecho.

El camino iba tenso tenía la impresión de que algo pasaría

-¿Se encuentra bien señora? - me pregunto Alexis y asentí con un movimiento de cabeza estaba por decir algo cuando sentimos un golpe en el auto.

Mi cuerpo se tenso y cuando menos pensamos el chófer se detuvo, pero otro golpe impacto de mi lado, solo pude sentir los brazos de mi guardaespaldas rodearme y un fuerte golpe en la cabeza y un quejido de salir de los labios de Alexis sentí como me llamaba, quería responderle pero perdí el conocimiento.