Mi niñez se volvió una pesadilla desde ese día, ese día en que un hombre tocó mi cuerpo sin mi consentimiento, pero él llego, me salvó y me demostró que el amor es el sentimiento más bonito y puro que un humano puede experimentar. Pero no todo puede salir como tú lo planeas. Siempre habrá personas que querrán lo que tú añoras, amas y proteges. ¿Que por qué?, por que el mundo es egoísta. Y ella solo es una intrusa en nuestras vidas. Una mujer que hizo temblar mi mundo de miedo por perder al hombre que amo.
—¡Me mentiste!— Grite llena de resentimientos contra él. Nunca discutíamos, y si lo hacíamos, era por que era un tema grave, y por supuesto que esto era grave.
—Cálmate, Alice— Su tranquilidad era más gasolina que avivaba el fuego en mi pecho. Mi corazón se había roto en miles de fragmentos. Pensé que él nunca me haría algo como esto— Estas confundiendo las cosas.
—¿Confundiendo las cosas?— Mi voz perdió fuerza ante sus palabras llenas de mentiras— Confié en ti, Santiago.
— Lo único que me une a ella, es el niño—Yo no soy mi madre, yo no puedo aceptar hijos de otra mujer— Nunca te engañaría, no estando consciente.
—¿Por que me sigues mintiendo? —Se casaría con ella , no le importaría dejarnos a mi y a mi bebé.
— Arreglare las cosas— Murmuro con la mandíbula tensa. Se acercó a mi y tomándome de mis mejillas habló —Te amo, Alice— Le creía,para él, yo era la niña de sus ojos. Pero esa mujer lo arruinaría todo, lo presentía.
Las cosas no siempre salen como uno espera o desea...