Amor o Destino

En todas las sociedades están marcadas las clases sociales, no suelen mezclarse el rico con el pobre. Suelen tener más posibilidades las personas adineradas cómo es el caso de Juliana Decker, una exitosa y muy hermosa abogada de treinta años, llena de agallas, jamás en su carrera perdió un juicio. Eso le otorgó posibilidades únicas, como el poder de disfrutar de todo lo que quiso y vivir entre los más grandes lujos, pero aún teniéndolo todo era una persona muy sencilla que en efecto solo disfrutaba lo que la vida le ofrecía. A pesar de eso, siempre se veía como una persona infeliz, su mirada siempre estaba triste, había perdido la cuenta de cuándo había sido la última vez que había experimentado dolor en el estómago de tanto reír. Incluso desde hacía mucho tiempo hasta una pequeña sonrisa se ausentaba de su bello rostro, eso hacía que siempre se viera enojada o amargada, aunque no fuera del todo así. Suele pensarse al ver a una persona como ella, acomodada económicamente, que nada más le falta. Pero al terminar el día y encontrarse a solas, su vida se encuentra vacía, cada noche tras una copa de vino blanco cierra sus ojos pensando porque jamás fueron capaces de amarla. Sufrió muchas pérdidas y tenía partido el corazón. Perdió a su madre siendo muy pequeña y no podía casi recordarla, también perdió a su padre y a su mejor amigo. Por otro lado en un lugar muy alejado de esa realidad se encuentra Pedro Trinquelague un hombre para nada poderoso, ni rico. Muy atractivo, de unos treinta y cinco años y lleno de sueños, su mirada del mundo no pasa por el dinero y mucho menos por el poder. En su rostro siempre había dibujada una encantadora sonrisa, que parecía iluminarlo. Su visión es tan sencilla, pero a la vez para muchos, compleja de entender, porque la mayoría de las personas suelen complicar la simpleza de la vida. Su mirada está basada en el amor, las risas y de vivir cada momento a pleno. Un hombre que es capaz de hacer sonreír a todo aquel que lo rodea, incluso sin intención, siempre con una energía única, un niño atrapado en el cuerpo de un hombre. No tuvo las posibilidades de forjar una vida exitosa aunque tuviera las para lograrlo, su posición económica no le dio la oportunidad, ni pudo disfrutar de grandes lujos porque siempre tuvo que sobrevivir el día a día. Sin embargo, eso nunca le quitó el sueño. No obstante, siempre hubo algo que sí logró perturbarlo y fue la ausencia de un amor en su vida. Aunque estaba seguro que esperaba a la mujer correcta y que no tenía intención de apurarse, no quitaba el hecho de que en ciertos momentos deseara una compañía. Cómo vemos en estos dos extremos dónde se plasma el éxito y la simpleza, dos mundos totalmente opuestos, dos personas muy diferentes pero que de igual manera la falta de un amor les provocaba una sensación de vacío. Esto solo deja en evidencia que la necesidad de amar y la dificultad de encontrar a la persona correcta no distingue entre clases sociales. ¿Será que existe la posibilidad de que nuestros personajes se crucen? ¿Sus vacíos estarán relacionados a que su posición social no dejó que el destino pudiera cruzar sus caminos? Para descubrirlo deberán seguir sus historias, donde pasarán varias situaciones personales y nos develará si es posible que el amor esté en el lugar donde menos nos imaginemos. Solo de ellos dependerá ser capaces de dejar de lado las brechas que los separan, solo una vez los caminos se unirán para ellos, y no tendrán otra oportunidad. Tal vez puedan llenar ese vacío que los invade y dejar de pensar al fin que no son suficiente para nadie. Porque tal vez esa persona estaba más allá de los estándares impuestos, en un lugar donde nunca se hubieran vuelto a ver. La cuestión no es que no llegue nuestra media naranja, sino que somos incapaces de dar vuelta el mundo para encontrarla. A esto estarán sujetos nuestros personajes, después de haber recorrido casi la mitad de su vida, tendrán que descubrir el mundo otra vez. Dejar de lado todo eso que aprendieron, volverse un libro en blanco, para solo así, poder ver eso que jamás vieron y encontrar eso que nunca buscaron.