La Pequeña Esposa. Segunda Temporada.

La pequeña Esposa: Segunda Parte. Escrito por: Lily Arzola. Portada por: Lily Arzola. Correo: arzola493@gmail.com Intagram: _lapequenaesposa Facebook: Arzola Escritora Lily     Todos los derechos reservados. Cualquiera copia sin autorización, se denunciará. Copyright © (Art. 14; punto 1. El autor tiene derecho a decidir si su obra ha de ser divulgada y en qué forma y punto 3. El autor tiene derecho a exigir el reconocimiento de su condición de autor de la obra) Hecho en México. (2018) Todo el contenido de este libro es ficción, y no tiene ninguna conexión con otra persona en particular. Las empresas y personajes mencionados, no tienen ninguna conexión de la vida real. ------------------------------------------------------------------------------------------ (1) Lo había hecho, le había dicho que no la amaba ¿Por qué razón lo hice? La razón era porque que en realidad no sabía lo que era el amor de verdad. Había sufrido bastantes decepciones, por lo largo de mi vida. Nada fue fácil para mí, aun cuando todos creen que mi vida fue regalada, solo por nacer en una cuna de oro, alrededor de personas importantes. No todo lo que brilla es oro. La soledad, las mentiras y el dinero a base de todo, te demuestra que el amor no puede existir en varias personas, que se dejan comprar solo por dinero. Como por ejemplo amistades, pertenecías y autos, pero con algunas excepciones, que son muy pocas, como Alice, mi familia y mis mejores amigos. El primer sentimiento de amor que sentí en mi vida, fue cuando mi madre me dijo que me iba a amar a pesar de todo después de un accidente. Recuerdo que yo había roto uno de los cuadros más caros de la colección que mi padre tenía almacenado en una habitación secreta, mientras que mi madre me protegió con capa y espada de mi padre. Después de eso, tarde más de diez años para volver a sentir algo en mi seco corazón. Conocí a estos amigos que empezaron como extraños de familias ricas, a convertirse en mi familia.   Después paso mucho tiempo para sentir un pellizco en mi corazón, al ver a una niña hermosa que me robo el aliento. Mi corazón realmente había crecido un poco al verla. Perder a mi amigo en Irak, me lleno de soledad y de odio, repulsión por la vida y los seres humanos. Todos vivimos en un mundo, en donde todos somos de alguna manera iguales. Ser asesinado solo por diferencias que se puede arreglar, no se me hacía justo. Así que empecé a ser arrogante y empecé a actuar como si lo más importante fuera yo mismo, pero por dentro, sabía que solo estaba aparentando ser fuerte, pero era solo que era muy débil. Ella me lleno de emociones, era como si estuviera en una montaña rusa, bajando y subiendo.  En cierto momento me harté de aquél sentimiento, era como una explosión en mi estómago. ¿Cómo el gran Demian Volkova, puede caer rendido ante alguien tan pequeña como ella? Pero era solo que yo era el pequeño gusano que se arrastraba por el suelo, y ella era la mariposa hermosa, que le da vida a todo lo que toca. Mi mundo cambio, la luz cubrió mis días mientras la miraba fijamente, pero aún no estaba preparado. ¡Dios sabía que aún no lo estaba! Intente encerrarme en mi pequeño c*****o, mientras la veía por los huecos de esté, preguntándome: ¿Por qué es tan hermosa?, ¿Por qué quiero amarla hasta que se derrita?, ¿Por qué la amo? Si ni siquiera sabía lo que era el amor, no podía solo decirlo. Pero sí que pude decírselo a mi padre. Literalmente le dije: "La amo tanto, padre", sonaba tan real pero aún no estaba convencido.   Después mi egoísta corazón se dio cuenta que había algo dentro de mí, así que trate de buscarla una vez más, para retractarme y decirle lo que en realidad sentía por ella. Pero al tratar de buscarla, me di cuenta que no estaba ni con Kyle y que tampoco estaba con mis padres. No estaba con nadie. ¿Dónde se había metido? Después les pedí a todos mis conocidos, que se reunieran conmigo en una pequeña sala dentro del hotel, y fue en ese entonces, cuando mi pesadilla empezó.   * Los chicos estaban sentados al lado de los padres Demian, mientras todos estaban envueltos en sus propios mundos, preguntándose: ¿Dónde estaba Alice? -¿Y dónde crees que fue?-Preguntó Chace algo sorprendido, mientras se le ve impaciente por saber el paradero de la pequeña. Por otra parte, Demian lucia muy preocupado, mientras mantenía una cara pálida. -No lo sé, Chace.-Murmuró  Demian, enojado mientras está pasando sus manos por su castaña cabellera. -No te preocupes, aparecerá.-Contesta Chace, intentado animarlo. -¡No Chace, no lo hará!-Gritó Demian volteando a ver a todos en el lugar.-Lo eche a perder, yo...-Demian trataba de compartir todos sus sentimientos con solo una mirada, pero no podía, se sentía bastante avergonzado por lo que había hecho con Alice. -Hijo, no logro entender que paso.-Murmuró Katy, mientras que ella ni Eric, sabían mucho del matrimonio de su hijo, así que estaba preocupados por la mirada perdida que Demian lucia. Así que cundo los padre de Demian estuvieron lejos del panorama, Demian se acercó a sus amigos, para decirles la verdad de la desaparición de Alice. -Tuve una discusión con ella anoche.-Comenta mirando el suelo, mientras se le ve culpable.-Y creo que acabo de echar a perder mi matrimonio.-Murmuró mientras mira hacia la nada. -Perderé a la primera persona que me importa de verdad.-Ahora cierra los ojos, mientras su cara se arruga del coraje. Katy desde lo lejos, se levanta de su asiento, para tomar entre sus manos la cabeza de su hijo. -Ella te ama, no te dejará.-Pronuncio con sus labios color carmín.-Su amor hacia ti es completamente incondicional.-Eso hizo que el corazón de Demian, se rompiera aún más que antes. Las lágrimas del castaño se hicieron presentes, nadie había visto llorar a Demian, más que su padre, cuando le confesó que amaba a Alice dentro de su oficina. La cabeza de Demian cayó al suelo, mientras miró a Kevin directamente a los ojos. Él joven Kevin no puedo decir nada, sabía que Demian había sido demasiado duro con Alice.  Por primera vez, todo era difícil de poder hablar, nadie podía encontrar las palabras para ayudar a Demian.   Sin duda lo apoyaron porque lo amaban, pero si no estuviera ese sentimiento palpitando, harían otra cosa con el pobre Demian. Pero de repente y de la nada, la mente de Demian fue interrumpido por los guardias costeros, que llegaron al lugar con gran imponencia. Demian al verlos, corrió hacia ellos, suplicando e implorando. -Por favor, encuentren a mi esposa.-Dice el castaño mostrándose flexible por primera vez en su vida. -Señor Volkova, estamos haciendo todo lo posible, mandamos a la guardia costera a buscar a su esposa y también en las calles, también checamos el sistema de uso de su nombre, y al parecer ella no ha salido de Newcastle.-Le comenta uno de los guardias, que es de color y luce un bigote bastante grueso. -Tienes que encontrarla.-Repitió Demian.-Por favor.-Era la primera vez que Demian le rogaba a alguien. Nadie jamás había visto a Demian hincarse, ante otra persona que no sea el mismo. Él lloraba como un niño. Los oficiales vieron la desesperación del hombre y empezaron una larga investigación, sobre la desaparición de Alice. *   La noche fue larga para la familia Volkova y amigos. Por otra parte, los amigos de Demian pasaron la noche haciendo llamadas a diferentes investigadores, quienes fueron a Newcastle de inmediato.  El personal y también los invitados de Demian, sabían de la desaparición de su esposa. Así que todos estaban siendo observando con una lupa.   *   A la mañana siguiente, por parte del monstruo llamado Calvin, todo estaba bien mientras reposaba en la piscina, disfrutando del sol, sabiendo que todos buscaban a la pequeña niña, que él había extraviado. Mientras Demian se culpaba a sí mismo. Su color bronceado se desvaneció mientras su cuerpo estaba completamente pálido. Su cansancio era visible, pero no dejo de buscar a Alice, ni por un segundo. Contacto a las aerolíneas tratando de saber si ella había huido de la ciudad, pero nada parecía ayudar. Cuando más desesperación sintió, la aparición de una persona lo sacó de sus dudas. -Yo estuve con ella por última vez.-Murmuró mientras se para con tranquilidad, enfrente de Demian. Los ojos de Demian saltaron de inmediato, así que se levantó de su asiento, tomándolo del cuello de su camisa.   -¿Dónde está?-Preguntó Demian a punto de matarlo, mientras aprieta la mandíbula con fuerza. -Salió corriendo.-Contesta Kyle sin una gota de miedo, mientras quita las manos de Demian sobre de él. -¿De qué hablas?-Preguntó el joven castaño, aún con una agresividad como ninguna. -Le dije que la amaba, pero ella salió corriendo, alejándose de mí.-Comentó con los ojos clavados en la nada, mientras se siente herido. Era una ironía, el joven Kyle se le había declarado a Alice, siendo rechazado, al igual que ella lo fue por su propio esposo. -¡Eres un maldito!-Gritó Demian tirándolo al suelo, pero Kyle era bastante hábil, así que logró defenderse de Demian. Era la primera vez que Demian no podía noquear a una persona, puesto que él era muy hábil golpeando, pero en este caso, no estaba funcionando. A este punto, todo le estaba saliendo mal al joven Demian Volkova. -¡Ella no me ama, te ama a ti idiota!-Contesta Kyle en un grito, mientras se sigue defendiendo de Demian quién intenta golpearlo.  La conciencia de Demian estaba completamente inquieta e insegura, sabía que era su culpa. -¿A dónde corrió?-Preguntó secamente, levantándose del suelo y dejando de atacar a Kyle. -Corrió hacia el oeste de la playa.-Murmuró enojado, mientras su ropa esta desacomodada. Demian saltó y corrió como un loco hacía la playa, en busca de Alice, pero parecía que la tierra se la había tragado.Varios policías y personal de la guardia civil estaban en el lugar, en busca de su esposa. Demian pidió que la buscaran por tierra y mar, pero parecía no funcionar. Después Demian corrió hacía donde Kyle le dijo, sin encontrar nada. Las lágrimas del joven no dejaban de salir, su desesperación era algo terrible. -Se siente como si no estuviera. - Murmuró el joven Damián, tirándose al suelo mientras la tierra y el sol lo cubren.   * Después de una larga búsqueda en vano, Demian se reencontró con todos en la pequeña sala del hotel, que se había convertido una habitación de investigación. -¿Qué pasa?-Preguntó el joven asustado, mientras ve a algunos oficiales en el lugar. Los padre de Demian, no parecían tranquilos. Así que Katy se acercó al chico con un semblante tan pálido como la nieve. -Encontraron a Alice.-Pero eso no parecía ser una buena noticia, por la manera en la que lo decía. *   Demian Volkova.*   Mi mundo se había caído por completo, me sentía tan culpable de que Alice se perdiera, o que se haya ido huyendo del mousntro en que me he convertido. Lo entiendo completamente, soy un completo monstruo sin sentimientos. Es imposible como late mi corazón tan fuerte, como nunca lo había hecho. Pocas veces mi corazón latía tan fuerte, que puedo escucharlo y esas veces han sido al lado de ella. No la culpo si solo trato de huir de mí, yo lo haría de mí mismo si pudiera. Me encerraría en un cuarto donde solo me haría daño a mí mismo, pero sería peor, porque ciertamente yo mismo no aguantaría estar conmigo mismo. Por alguna razón, semanas anteriores me pregunté: ¿Por qué ella sigue al lado mío? Cada vez que regresaba cansado del trabajo, sin ganas de ver a nadie, solo queriendo recostarme en mi cama a descansar, pero ella siempre estaba con esa hermosa sonrisa con sus pequeños hoyuelos dibujados, que me hacían sentir una clase de mariposas en el estómago. Por alguna razón, sus ojos jamás dejaban de brillar y su sonrisa era completamente pura, sin nada de malicia en ella. Ella es completamente inocente y no entendía porque estaba aún conmigo. Después comprendí que ella me amaba, no había justificación aún que me amara, ella tenía que dejarme. Ella tenía que tener el orgullo de dejarme, por lo insensible e inhumano que he sido con ella, pero ella simplemente no lo hizo, se quedó al lado mío, cuando millones de mujeres han salido de esa puerta dándose por vencidas; Sarah, Caroline y otras más, quiénes se fueron de mi lado por no conseguir suficiente de mí. Pero ella jamás se rindió y por alguna razón en este momento estoy buscándola para no hacer que se rinda. No puedo comprender cómo puede amarme, yo mismo no me amo y en este momento me odio, quiero matarme, pero quiero encontrarla antes para luego tomar un arma y asesinarme. Quiero volver a ver su rostro para poder confirmar lo que siento por ella. Corro y corro por ella logrando encontrar trozos de mi corazón rotos en el suelo, puedo ver sus pasos en la arena de alguna forma que nadie puede ver, hasta puedo oler sus lágrimas que estuvieron en el suelo de esta hermosa arena, puedo sentir su dolor. Mi cabeza está retumbando, ya que no encuentro nada, así que regreso al hotel. Y cuando entro a la pequeña sala blanca del hotel, me encuentro a unos policías hablando con mis padres, lo primero que mi mente dice es: - "encontraron a Alice" -Pero mamá no se veía feliz ni tranquila, algo andaba mal. -¿Qué pasa?-Pregunté esperando una respuesta del policía, o de mis padres pero nadie contestaba. Mis padres parecen completamente unos fantasmas, mientras que la mirada de mi padre está completamente desolada. Algo malo estaba pasando y tengo miedo, así que repito mis palabras una vez más. -¿Qué está pasando?-Pregunté aún estable y listo para escuchar lo que me tenían que decir. Mi madre se acerca a mí, con su piel completamente blanca, mientras sus manos se están moviendo con miedo. -Encontraron a Alice.-Me siento aliviado, pero  no puedo ignorar el notable estrés de mi madre. Hay algo más aquí que ella trata de decirme, pero no puede.-La encontraron en la playa.-Pero todavía eso no me tranquilizaba, hay algo más, su respiración es nerviosa y se nota que está apuntó de colapsar enfrente mío. Después de una larga plática consigo misma, dice las peores palabras que he escuchado en este  mundo. -Encontraron a Alice en una pequeña bodega, en donde los salvavidas guardan la utilería.-Yo mismo pensé que habían asesinado a mi esposa. Ella no terminó sus palabras, ya que corrí hacía el policía que le trajo noticias a mis padres. Lo tome de su traje y frenéticamente, le dije: -¿Qué le pasó a mi esposa?-Grité como un maldito loco.-¡Dígame que no está muerta!-Dije entre lágrimas y jadeos. No quería que esto fuera una escena del crimen, y que hayan matado al amor de mi vida. -La señorita fue encontrada inconsciente y con demasiadas heridas en su cuerpo.-Comentó el policía un poco nervioso. ¿Heridas?, ¿Inconsciente?, ¿Quién demonios le haría daño a un ángel como a Alice? -¿Dónde está ella?-Pregunté en un gritó fuera de mí, ya que nada lucia aparentemente bien. -Están por llevarla al hospital más cercano de aquí.-Dijo el policía aún nervioso de verme en este tipo de situación. -¡Quiero ver a mi esposa!-Grite una vez más, como un niño berrinchudo. -Amor se la han llevado, vamos al hospital.-Dijo mi madre tratando de tranquilizarme, pero no podía, así que grité otra vez. -¡Quiero ver a mi esposa! ¡Ella puede morir!-Dije como un completo caprichoso. No podía entender quién le haría daño a Alice, ella es completamente buena, es hermosa y es un ángel caído del cielo, que se puso en mi camino. Yo tenía la culpa de lo que le ha pasado. No podía seguir de pie, lo único que pude hacer, fue llorar como un niño. Todos me desconocían de alguna manera, pero no me importaba nada en este mismo momento, solo quería verla viva. Los chicos me tuvieron que llevar arrastrando al auto, ya que no podía ni siquiera mover los pies. No podía mantenerme en pie. No podía ni siquiera respirar sabiendo que Alice sufrió y pueda estar muerta, en este mismo momento. No sabía en qué estado encontraría a mi pequeño ángel, mi cabeza no dejaba de moverse y decirme que yo tenía la culpa de todo.   Cuando el auto llegamos al frente del hospital, mis piernas volvieron en sí. Salí corriendo del auto hacia donde estaba mi pequeña. No sabía en donde estaba, entre como un completo desconocido a ese lugar donde podía escuchar y oler la muerte. Pidiéndole a dios que ese olor y ese horrible sonido, no fuera de mi pequeño ángel. Entre llorando, así que dos enfermeras se me acercaron por detrás, tomándome de los hombros para que no cayera al suelo, ya que no podía mantenerme en pie por la adrenalina de mi cuerpo. -¿Joven, está bien?-Preguntó una de las enfermeras, mientras me ve como si fuera un enfermo mental, o peor, con lástima. - No, ¿dónde está Alice?-Pregunté como si todos conocieran a mi mujer, desde hace años. Yo solo pregunte cómo un niño que no encontraba a su madre. Mis padres me lograron alcanzarme, haciéndose cargo de mí. -¿El cuarto de Alice Volkova? -Pregunta mi padre, deteniéndome de los hombros para que no me les fuera de las manos. -Cuarto número 347.-Dijo la joven enfermera de pelo rubio. -¿Seguro qué estará bien?-Le pregunta a mis padres por mi inestabilidad emocional. Pero no estaba bien, así que salí corriendo del lugar, para buscar la habitación de Alice. Por otro lado, sabía que mis padres estaba tras de mí, ya que podía escuchar la forma en que sus zapatos golpeaban el piso blanco y desinfectado del hospital. Pocos segundos después de mi búsqueda, me encontré de frente con el destino. Estaba enfrente de una puerta blanca y con un pequeño cartel con su nombre, tan perfecto junto a un apellido completamente grotesco: "Alice Volkova" No podía ni siquiera abrir esa puerta, mis padres lograron estar al lado de mí, mientras decidía que hacer. Ellos me miraron con tanta lástima, ya que entendían que en este momento, me estaba debatiendo muchas cosas en mi cabeza. Incluso sabía que ellos también estaban pasando por el mismo proceso que yo. Sabía que si me encontraba con la sorpresa de que fue atacada por alguien más, era capaz de matar e ir por el responsable que hizo que ella sufriría. Pero cuando entre a esa habitación, mis peores pesadillas se hicieron realidad. Cuando pise esa habitación y pude escuchar el ruido de un aparato, que me decía que su corazón estaba muy débil. Cuando por fin pude ver su cara, caí al suelo de rodillas llorando y diciéndole a mi Dios, un mensaje privado: "¿Por qué le hiciste algo tan malo a Alice?, ¿Por qué la pusiste en mi camino? ¿Por qué dejaste que llegara esté momento para que me diera cuenta que yo no la merezco?, ¿Por qué no solo pudiste hacer que su corazón amara a Kyle?, ¿Por qué no solo dejaste que a mí me hicieran esto? No a ella. Su pequeña y hermosa cara estaba completamente irreconocible. Su piel estaba morada, supongo que de tantos golpes, mientras que sus labios color rojo sangre, se convirtieron en unos labios deformes y morados. Su cabello que era n***o olivo originalmente, ahora es de un color grasiento, mientras que sus ojos estaban hinchados.   Segundos después, pude escuchar la reacción de mi madre al ver una masacre en el cuerpo de Alice. No pude evitar llorar como un loco  mientras sostuve su mano, una mano que estaba completamente helada, era como si ella estuviera muerta. ¿Ella es Alice? Me pregunté una y otra vez, ya que se parece a ella pero al mismo tiempo no creo que sea ella. Pareciera como si su alma estuviera volando, como si no estuviera metida en su bello cuerpo. Pero quizás era mi egoísta corazón, que solo quería negar todo para no enfrentar esta realidad. Su mano se mantiene frías y con moretones,  mientras que en su dedo, lleva nuestro anillo de casados, que aún carga y sigue brillando como nunca. La enorme roca hace ver la sangre de su mano de un color más fuerte. Incluso puedo decir que es la mujer inconsciente, más hermosa del mundo ahora, pero simplemente eso no era lo importante. Tenía que encontrar a esa persona. Quería matar a la persona que le hizo esto, pero mis piernas no me dejan caminar, mientras que mis labios no paran de dejar de besar su mano morada y fría. Mi corazón no deja de culparme a mí mismo, y ahora mi boca deja salir todo lo que jamás he dicho o hecho. Sé que quizás no era el momento, pero también sabía que si no aprovechaba la oportunidad, probablemente quizás no tenga otra. Tenía que culparme. -¡Maldita se! ¡Fue mi culpa!-Dije gritando y rompiendo mi garganta, mientras aferro los uñas contra la pared blanca. Después pude escuchar como los chicos ya estaba en la puerta. De inmediato pude sentir como Kevin tomo de mi hombro, intentando darme su apoyo. -No fue tu culpa, hermano.-Dijo con las mejores intenciones, pero sabía que era mentira. Así que yo mismo lo empujo con fuerza. -¡Lo fue!-Grité fuera de mí.-Ella quiso alejarse del monstruo que hizo que ella esté aquí.-Solloce con una tristeza pura. -Solo que alguien más termino con ella. Yo sabía que ella terminaría lastimada de alguna forma, pero nunca creí que de esta manera. ¡Ella no podrá amarme más!-Le grité aferrándome a mi cabello, que fue arrancado por mis manos ansiosas. -Ella te ama más que a nada.-Kevin siempre tratando de ayudarme, mientras que intenta que no pierda los estribos en un hospital. -Eso es el problema, Kevin.-Le contesté poniendo mis manos sobre sus hombros.-Yo no le pude decir lo mismo, la lastime al no contestarle que la amaba. Nunca fui tan débil en mi vida como hoy. Ni tampoco me sentí de esta manera, así que solo deje que el dolor fuera entrando en mi cuerpo, apoderándose de mí. Y al hacerlo, no pude más y colapse en los brazos de Kevin, quién me recibió como un verdadero amigo, entre sus brazos cálidos. También pude ver las miradas de Chace y Liam, al ver como Alice estaba  recostada en esa fría cama de hospital.   Las lágrimas de los chicos, salieron con mucha facilidad. Era algo tan inhumano y tan difícil de describir. Mi querida Alice había sido masacrada, que sabíamos que tenía mucha suerte de seguir con vida. Después pude ver que como un hombre joven y alto de bata blanca, entra a la habitación, sorprendiéndose por ver a tanta gente en el lugar. -¿Disculpen, son la familia de la señora Volkova?-Yo de inmediato respondí, ya que el hombre parecía algo confundido, al ver a tantas personas dentro de la habitación. -Es mi esposa.-Dije con rapidez, mientras me apropio de ella con mis palabras. -Como usted es su esposo, necesito que todos dejen la habitación, necesitó hablar con usted.-Nos dice invitando a todos los demás, a salir de la habitación. Esta vez no tuve que decir absolutamente nada, para que los demás se retiraran, ya que ellos solo pudieron decirme: -"Estaremos esperando afuera" En forma de apoyo. Y cuando ellos dejaron el lugar, el doctor me ofrece la mano para presentarse. -Soy el doctor Flynn, mucho gusto señor Volkova.-No dije absolutamente nada y solo espere a que prosiguiera, solo aceptando el saludo de manos.-Quiero decirle que el estado en que encontramos a su esposa es inusual.-Dijo respirando profundamente, para luego proseguir.-Creo que él que intentó hacerle daño a su esposa, intentaba asesinarla.-Siento como si un balde de agua fría pasara por mi cuerpo entero, al escuchar tal cosa espantosa.-Pero por alguna razón milagrosa e inusual, ella sigue aquí, muy grave señor, pero sigue aquí.-Yo mismo suspiro un poco aliviado, pero sabía que no tenía por qué estarlo, ya que se aproximaba una tormenta y está caería frente a mis ojos muy pronto. -Quiero decirle lo que encontramos.-Tomó su pequeña libreta y me empieza a decir todo lo que tenía.-Él que quiso hacerle daño a su esposa, la golpeó hasta dejarla completamente inconsciente, tomo de su cuello e intentó estrangular la. Tenemos algunas contusiones, para corroborar que hubo algún intento de estrangulamiento. También pudimos observar que sus paredes vaginales están realmente lastimadas y dilatadas.-Me comenta mientras que a pesar de llevar poco tiempo en el hospital, se le han hecho todo clase de pruebas. ¿Paredes vaginales? ¿Eso qué significa? -Su esposa fue abusada sexualmente, señor Volkova.-Me lo dice con mucha frialdad, mientras que entiendo lo que hace, ya que es doctor, trata estos casos con tanta frecuencia, que en algún momento sabrá solo decirlo y ya. Pero para mí fue como mil quinientas agujas pasar por todo mi cuerpo.-Lo siento mucho.-Me comenta el doctor, mientras todo mi mundo se cayó por completo enfrente de mis ojos Así que de inmediato, tomé de mi cabello intentando jalármelo y arrancarlo por la ansiedad. -¿A-Abusada?-Pregunté tartamudeando, mientras siento que mis piernas no están aguantando mí peso. -Lo lamento.-Es lo único que me puede decir, al verme tan petrificado, consumido y tan miserable. -¡No!-Dije en un grito de ayuda, mientras caía al suelo, dejando al doctor completamente perpetuo. Golpee el suelo una y otra vez, rompiendo mis nudillos, mientras maldecía con todas mis fuerza. ¡Vaya, que era tan desdichado! Después pude escuchar la puerta abrirse. Todo era borroso para mí en ese momento, solo pude ver como alguien tomo de mi mano, para después darme cuenta que ese alguien, era mi padre. -Hijo.-Dijo levantándome del suelo y poniendo mi cara sobre su pecho por primera vez en su vida. Lo cual yo no pude resistirme, así que lo abrace. Llore encima de su traje de edición limitada, como un pequeño niño, que pareciera llorar porque quizás cayó de un columpio, destrozándose la rodilla con las piedras duras. Nunca en mi vida había abrazado a padre con tanta fuerza, ni él a mí, siempre fue muy duro conmigo y supongo que yo también lo fui con él. Por lo tanto, yo también fui una persona fría.   -¡Padre!-Grite en un chillido ahogado.-La tocaron, padre.-No podía decir más. Lo único que mi mente podía pensar era en la masacre que le dieron a ese ángel caído del cielo. No puedo pensar en cómo alguien pudo tocar a alguien que nunca ha dañado a nadie. ¿Pero quién? Mi mente solo quiere tomar un arma y matar a cada hombre de este mundo, que esté relacionado con Alice. Lentamente suelto a mi padre ferozmente, para salir corriendo al corredor, donde me encuentro con todos mis amigos, mirándome asustados como si fuera un fantasma. Inesperadamente y luciendo como un loco, tomé a Chace del cuello de su chaqueta, mientras le murmuró: -¡Tienes que encontrar al responsable! Te lo suplico.-Dije rogándoles clemencia a cada uno de ellos. Chace por su parte, pone su mano en mi hombro con lástima, para decirme: -Encontraremos a ese hombre.-No puedo dejar de retorcerme del dolor que hay en mi corazón, mientras sé que ellos pueden mover a todas sus influencias. No por nada éramos los herederos más famosos de nuestra clase.   * Todo era completamente oscuro. Y para mí,  la oscuridad era totalmente inexplicable. No sabía en donde me encontraba. Yo estaba parada en medio de la nada, vestida con un pequeño vestido hecho de una ligera tela blanca, que lograba llegarme a mis tobillos descalzos. Mi piel estaba manchada por algún tipo de suciedad que no tenía procedencia, mientras que el olor a miedo se podía sentir. Así que corrí entre el suelo rocoso y frio, mientras que aún no sabía con exactitud a que le tenía miedo, pero sin duda era algo maligno, que estaba tras de mí. Después caigo al suelo, después de haber corrido por mucho tiempo. Estoy indefensa y no hay nadie que pueda ayudarme. Por un momento me siento cubierta por unas alas de color negras, sus plumas se acomodan en mi piel como si estas se impregnaran perfectamente en mi cuerpo. No puedo ignorar el hermoso sentimiento que siento con el tacto de sus alas cubriendo mis brazos desnudos, así que cierro los ojos y me encuentro con él. Una especie de hombre obscuro con un antifaz n***o cubriéndole los ojos, nariz hermosamente perfecta, labios rojos, piel ligeramente bronceada. De inmediato me siento a salvo entre sus alas. Por un momento pienso que es Demian, así que cierro los ojos dejando que sus alas me cubran mientras me siento paz y lista para irme. Pero luego logró abrir de nuevo mis ojos,  ya no hay nadie más que una pobre niña indefensa en el suelo. Esa soy yo. Después de algunos minutos de vagar en la nada, me encuentro con este hombre de nuevo. Él enfrente está de mí con un pequeño látigo de cuero ante de mis ojos. El hombre pasó de ser un ángel que bajó del cielo para ayudarme, al ángel n***o que viene a castigarme. Su látigo golpea mis piernas, dejando un rastro de sangre. Yo gimo al sentir ese látigo encima de mí. Él lo vuelve a hacer y después de escuchar mis quejidos sin importarle, lo hace de nuevo. Todo esto duele mucho. Luego se quita su capa negra y la deja caer, como si esas alas fuera falsas. Se quita el antifaz y puedo ver su cara, es Demian. Él ríe al ver las grandes marcas que ha dejado en mi cuerpo. Después él se deja caer encima de mí, mientras sus ojos lucen tan angelicales, tan jóvenes y llenos de esperanzas, pero sus manos dice lo contrario. Su cinturón se desabrocha, oyendo el horrible sonido la hebilla cayendo contra el suelo. Puedo sentir sus manos subiendo por mis piernas hasta llegar a mi sexo,  sintiendo como metes sus dedos haciéndome dentro de mí, haciéndome chillar. Esto dolía mucho y él parecía no tener piedad de mí. Después él pronuncia mi nombre peligrosamente. -Alice.-Puedo ver sus intenciones de lastimarme. Quiere una parte de mí, que yo le daré.-Lo único que puedo hacerte es esto.-Mete su puño entre mis piernas, haciéndome gritar fuertemente. Después deja lo que hace, de inmediato empecé a  sentir un bulto entre mis piernas, sabía que era su erección. Sentía repulsión, quería matarme a mí misma para no poder sentir lo que me esperaba. Lo mete dentro de mis piernas, haciéndome sentir un dolor, no puedo evitar gritar con fuerza. Cuatro sombras enfrente de nosotros se posan, al principio no logro saber quiénes son por el terrible dolor que siento entre mis piernas, pero luego logro ver claramente la palidez de Chace con esos labios rojos, mirándome sin hacer nada al respecto. Los ojos de Kevin resplandecen como diamantes azules, mientras Liam luce enojado, su cuerpo es como un arma fuerte entre esa capa. También esta Kyle en el lugar, mirándome sin hacer nada, sus labios rojos se llamen más de una vez, como si deseara lo que Demian hace conmigo, ellos miran pero no hacen nada. Gritó con más fuerza con todas las envestidas que me está dando, para después sentir como la sangre pasa por mi vestido. Estoy completamente manchada de sangre. Después puedo ver la boca de Demian, está llena de sangre mientras me sonríe fascinando por el rojo de mi sangre. -Sabes tan rico.-Dijo lamiendo la sangre de su labio inferior. Mi cabeza cae al suelo mientras siento como si me hubieran matado, como si un enorme cuchillo hubiera por mi corazón,  desangrándome con mucha tortura. Me siento completamente usada de una manera asquerosa. Y cuando abro mis ojos, otra vez toda se han ido. Estoy sola y sigo usando ese vestido con manchas de sangre, pero por otra parte, ya me siento tranquila sabiendo que él no está aquí más.  El sentimiento es tan relajante  mientras su cara, es la de un bello satanás con cara de ángel. Demian volvió  con su mirada que te puede decir lo que está deseando en el momento. Mis manos se pierden en mi cabello mientras la mirada de tres ángeles blancos está enfrente de mí. Completamente bellos, me susurran:  -Alice, Alice, Alice.-Una y otra vez, como si intentara decirme algo. Cierro los ojos otra vez y puedo encontrar una hermosa luz resplandecer con tanta intensidad. Uno de los ángeles me señala la luz, que es completamente hermosa y tan atractiva. Mis pies descalzos caminan hipnotizada por esa hermosa luz brillante, mientras intento caminar, pero una fuerza extraña me jala de vuelta. Miró a uno de esos ángeles que me dice con su mano que me retire, mientras yo trato de caminar adelante y seguir esa luz tan hermosa, llena de tranquilidad que me estaba llamando, pero es imposible poder caminar. Intento una vez más jadeando con fuerza, pero es imposible, una fuerza completamente extraña me jala de vuelta. Luego esa luz se apaga y me deja en una oscuridad completa. Solo logro escuchar una fuerte voz decir: -¡Doctor Flynn a la habitación 347, paro cardiaco!