Capítulo 2

2011 Words
(2) * Las enfermeras corren hacia la habitación de Alice con carros de metal entre sus manos. Tres de ellas sostienes a la pequeña niña, que no respira mientras los latidos ya no pueden ser detectados. Su pecho está completamente inmóvil, mientras tratan de hallar alguna señal de pulso, o algún latido de ese corazón tan cansado. El doctor llega a la habitación con rapidez, con tan solo el primer llamado que se le hizo, para después poner entre sus manos un aparato de dos placas eléctricas que fueron cargadas por dos enfermeras, antes de que él entrara por esa puerta. Las placas se juntan y estas son puestas directamente en el pecho de la pequeña. Ella brinca una vez, sin algún efecto en sus latidos del corazón o pulso. El doctor junta las placas una vez, tratando de no perder a la joven de apenas quince años. -Vuelve, vuelve.-Rogó el doctor con la mandíbula tensa. Y vuelve a poner esas dos placas en el pecho de la pequeña, logrando ahora que su corazón vuelva a ser detectado por el El cuerpo de Alice cae a la cama, mientras luce pálida y sin fuerzas, pero alejada de la muerte que estaba por tener. -¡Bien Alice, bien!-Dijo el doctor con felicidad de tenerla de vuelta. * Los gritos afuera son insoportables, puedes escuchar a Demian rugir como un león desde lejos, mientras que los chicos intentan tranquilizar al rudo e inestable Demian, pero es nulo, cada intento es fallido. Los chillidos de la madre de Demian son imparables, mientras las hermanas de Demian llegan al hospital completamente asustadas de ver a su hermano de esta manera, ya que él jamás ha llorado enfrente de ellas, mientras la noticia de que Alice fue violada, no les cae muy bien. Por un momento el corazón de Alice se encuentra completamente tenue, apenas se puede escuchar el sonido que logra ensordecer a todos en el pasillo, incluso a Demian. Todo está como en cámara lenta, las enfermas y el doctor salen de la habitación que permaneció cerrada por una media hora. El doctor habla con los padres Demian, ya que el joven no se encuentra apto para escuchar nada. La puerta de la habitación de Alice, se empieza a abrir, dejando ver los pequeños respiros de la pequeña, tras esa batalla por su vida. Ella luce bastante angelical, su pecho se contrae con la bata blanca que usa, mientras ella se encuentra hinchada, pero respirando. Una hermosa luz hace que el lugar se llene de paz, como si una fuerza trajera el alma de Alice de nuevo a su cuerpo. La muerte rondaba a esa pequeña de ojos azules, pero por alguna razón pudo escuchar las súplicas de Demian. Dios, Jehová o cualquier dios en el que puedan creer, la ha dejado vivir, ya que ella aún no ha acabado la misión que tiene que hacer en la tierra. Pero por desgracia, a cambio de la vida ha dejado recuerdos en la mente de Alice, ha dejado el miedo en el corazón de la pequeña, mientras borrara cada palabra que escuchó cuando estaba inconsciente. * La oscuridad es tremenda, no puedo ver nada y siento como si estuviera tirada en un lugar, y no pudiera moverme. Recuerdo sus manos sobre de mí, y por alguna razón todo lo que Demian me hizo en ese sueño, fue lo que Calvin me hizo en la playa. ¿Por qué no siento odio por Calvin? ¿Por qué siento el sentimiento de querer a Demian lejos de mí? Aunque mi amor por él no ha cambiado, aún sigue latente por él. Siento la sangre caer de mi corazón, como si varios clavos pasarán por esté. De nuevo empiezo a sentir como mi corazón bombea, y llena mis venas de sangre, circulando como lo hacía cuando estaba feliz y enamorada. No puedo ver nada, pero una voz conocida pasa por mis oídos, de inmediato sé que es Demian. -¡Alice!-Dice mi nombre mientras suspira profundamente. Por alguna razón, siento sus dedos pasar sobre mí brazo. ¿Dónde estoy? ¿Por qué no puedo moverme? ¿Qué paso? Nadie me responde, es como si yo estuviera dormida y la gente al mi alrededor estuviera mirándome como una exposición, pero yo escucho lo que dicen, mientras ellos piensan que estoy en un largo sueño. ¿Estoy muerta? Me pregunto a mí misma y algo me dice que aún no lo estoy, pero que estuve caminando sobre la muerte.-No me dejes.-Mi corazón se empieza desmoronar al sentir sus palabras en mis oídos, mientras siento como toma una parte de mí y la estruja en sus manos, para luego poner sus dulces labios sobre mí.-No me dejes.-Repitió una vez más.-Olvídate de todo lo que dijimos a noche. Ni siquiera importa lo que dije, ni siquiera conozco a ese hombre que te dejo. Los dos nos dividimos, o quizás solo yo me he dividido en dos, por ti.-Sentí caer una lagrima por mi brazo ¿Está llorando? ¿Demian, está llorando? -Sí me diera una hora más, te llevaría a almorzar al lado del que tanto te encanta, y así hablaríamos de todo lo que hicimos mal. Todo lo que hice mal.-Mi corazón late y de verdad quiero estar al lado de él; comiendo al lado del lago y disfrutando de su compañía; esa imagen aparece en mi mente como un buen recuerdo que jamás pasó. Él tomando de mi mano, mientras alimentamos a los gansos y nuestras risas sale graciosamente de nuestras bocas, por algo que ni siquiera fue gracioso, pero era solo el hecho de estar juntos. -Siento como si solo pudiera ver el cielo color gris, mientras está muy azul. Siento como si estuviera dando vueltas desnudos, soy la mitad de un corazón sin ti.-Escucho como solloza más de una vez.- Date cuenta lo perdido que estoy sin ti Alice Jefferson.-Hace mucho que no escuchó mi apellido de soltera. He estado tanto tiempo de mi familia, y de lo que solía hacer, que ni siquiera recordaba aquél apellido que lleve por solo quince años. Después siento como sus manos se contraen con las mías, y de alguna manera no puedo respirar. Escucho un sonido aturdidor, está totalmente descontrolado.- Alice, no apagues tu corazón.-Me pide al escuchar ese zumbido, y creo que estoy conectada a una de esas máquinas que miden los latidos de tu corazón, pero si él supiera que mi corazón late demasiado, o muy poco por él.- Prometo que si abres esos pequeños ojos, te haré la mujer más feliz de este mundo. Lamento no haberte hecho feliz antes, pero tenía miedo.-Pero era feliz, lo era hasta que él dijo que no me amaba.-Tenía mucho miedo, temblaba de tan si quiera poder pensar en que amaba alguien. Alice me has hechizado de una manera en la que no puedo vivir sin ti ahora. No espero que logres entenderme, ya que yo entiendo que tú me odies con toda tu alma.- ¿Odiar? Solo un poco. -Yo me odio a mí mismo desde que nací, me aborrezco de una manera terrible. Mi vida ha sido bastante triste, pero cuando tú llegaste a mi vida, he sido regocijado en felicidad, y aunque a veces parezco enojado, estoy feliz por dentro, pero es mi manera de ser. Jamás he sonreído demasiado, jamás he sido muy platicador y jamás fui muy abierto con nadie, solo contigo.-Ahora suspira mientras está siendo honesto por primera vez ante mí, y sé que ante él también.-Has hecho mi vida un sueño Alice.-Él guarda silencio por unos segundos, para luego proseguir.-Sé que en este momento tengo que dejarte de ir, y que trates de descansar por todo lo que te hicieron.-No sabía el daño que me habían hecho, realmente no sentía nada.-Pero soy demasiado egoísta y no puedo dejarte ir de mi vida. Te necesito al lado mío. Tenemos que estar juntos, es nuestro destino, y luego envejecer juntos, compartiendo nuestras dichas y nuestros fracasos.-Sus palabras eran completamente importunas, jamás pensé que Demian pudiera hablar con tanta fluidez, ya que jamás suele hablar de esa manera, solo cuando está enfrente de empresarios importantes, pero jamás con el sentimiento que hoy utiliza.-Te necesito al lado mío, aunque no lo entiendas, aunque nadie lo entienda. Olvídate de los negocios, y de lo que mi padre me dará, he rechazado todo de mi padre cuando estuve contigo, para demostrarte a ti mi pequeña, que eres más que un contrato. Eres más que todo el dinero que poseo, eres la persona a la que más he querido en este mundo, y me niego a vivir sin ti.   - ¡Demonios, Demian! Solo di que me amas, por favor.-Te confesare por que no se amar.- ¿Hay otra razón? ¿No era solo por su padre?-De pequeño me hicieron daño Alice.-Oigo como traga saliva, mientras empieza a respirar un poco más rápido.-Le he temido a toda clase de amor desde pequeño. Mis padres no se hacían cargo de mí, porque siempre se iban de viaje, y me dejaban con extraños que llegaban a nuestra puerta con un papel de recomendaciones, y de lo tanto que sabían de niños y cuidados. Todas ellas eran viejas y dulces conmigo, y por alguna razón siempre fui un chiquillo callado, sin muchas palabras que decir, aunque me aprendí el abecedario desde los cuatro.-Ahora guarda silencio, ¡Demonios, sigue hablando!-Una de esas mujeres llegó a mi vida como una persona más. Se llamaba Denis, y era una mujer demasiado hermosa y joven, tenía la sonrisa de un ángel y tenía el cuerpo de una diosa griega.-Demonios, ¿Qué te pasa? ¿Por qué demonios me cuentas esto? Me estoy enojando.-Ella siempre traía sus vestidos pequeños, y sus tacones de diez centímetros, siempre seductora para mí. Yo era un chiquillo solamente, era curioso pero no morboso. Ella lograba atraerme de alguna manera, ya que jugaba con sus pechos enfrente de mí y subía su falda que era corta, cuando jugaba con mis pequeños carros en mi habitación de juegos.-Él me explica, pero parece ser bastante complicado.-No entendía nada, ella era hermosa pero jamás había sentido aquél acoso s****l de ninguna de las niñeras de antes. Ellas solo me alimentaban, jugaban conmigo y hacían los deberes conmigo, nada extraño bizarro.-Ahora se detiene, quizás para encontrar las palabras para decirlo.-Una vez ella me estaba duchando, y empezó a tocarme con sus manos y sus uñas largas, me sentía bastante extraño a su amor. Ella me decía que me amaba, pero siempre me tocaba y eso no me gustaba. Ella me hizo cosas horribles a los cuales no les he dicho a nadie en este mundo, nada más a ti.-Suspira con dolor, mientras intenta seguir aquí. -Ella me hizo daño, decía que me amaba y yo no podía comprender por qué ese amor era tan duro y cruel. Era pequeño y callado, pero después me volví una persona sin confianza y anti-social, no dormía por las noches y mis notas bajaban y bajaban, hasta que la despidieron por mis notas bajas y mi estrés máximo. Cuando fui creciendo, el diseñado amor que me enseñó Denis, se hizo presente. No podía entender otra clase de amor que no fuera el que ella me enseño. Así que solo me acostaba con las mujeres, y les hacía lo que me hizo Denis a mí, explorando sus cuerpos y mostrando el morbo que ella mostraba. Dañándolas e incluso lastimándolas hasta sangrar, pero ahora veo que ella se equivocó.-Ahora suelta mi mano, mientras yo grito por dentro.-Ella no sabía que es amar, porque yo...-¿Qué? No te quedes callado.-Es complicado.-Ahora balbucea temeroso.-Ella no sabía que era amar y yo tampoco lo sabía hasta ahora. Mi querida Alice Jefferson.-Dio un gran suspiro, mientras sostiene mi mano otra vez.-Eres la persona más hermosa, bella e inteligente que conozco, y por eso no cambiaría nada de mi vida, incluso los abusos, la soledad, las pérdidas, todo...-Ahora siento como llora de nuevo, pero sus lágrimas son constantes, así que puedo afirmar que está llorando a mares.-Porque sé que te tengo ahora, y te amo.-Murmuró un poco extrañado con la palabra.  Después él aclaro su garganta, para decirlo con más seguridad.-Te amo, te amo, te amo, te amo.-Repite más de una vez.-Eres el verdadero amor de mi vida. ¡Por fin! ¡Gracias, Demian! Yo también te amo.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD