¿Que sucede con Aliss?

2437 Words
Evans se levanta por la mañana  y lo primero que hace es colocar la toma de la formula en la mesa auxiliar de Patrick, al verla este sabrá que debe tomarla, hace algunos años que el tío Evans la deja allí y el rutinariamente toma el antídoto. Luego de ver que está profundamente dormido baja al recibidor, donde toma el café con Clara y Eleanor.  _¿y como amaneciste?_ Le pregunta Eleanor.  _bien madre, muy bien_ En ese momento Rahab entra al recibidor a avisar que el desayuno está servido. Al ver a Evans titubea en el habla poniéndose muy nerviosa, teme que este la haya descubierto en el atrevido beso.  _eh, co... eh, Corazón les manda decir que... que el desayuno está servido.  _ay muchacha ¿qué te pasa últimamente? Pareces distraída_ Le señala Eleanor.  _madre, déjala en paz, no la tomes contra la pobre muchacha, te decía que dormí muy bien, tuve un sueño muy dulce con Antoneth_ Rahab respira hondo. Simula marcharse y se queda escondida oyendo a su amor secreto e imposible.  _vaya, ¿dulce? Ni Clara ni yo teníamos que saber eso_ Dice Eleanor echándose aire con su abanico. Clara sonríe cubriendo su boca con picardía.  _no seas mal pensada madre, dije dulce, no picante_ Clara suelta a reír. Eleanor los mira acusadora.  _soñé que me dio un beso madre, uno suave, muy efímero_ Rahab muerde su labio.  _además, creo que la vi, y si solo fue un sueño fue muy real madre, sus labios estaban suaves y sabían a miel de abejas, por eso digo que fue un sueño dulce_ Eleanor lo mira de ceño fruncido.  _ay Evans, mejor calla de una vez, harás que a tu madre le dé jaqueca_  dice Clara.El ríe haciendo una negación.  _ay muchacha ¿ qué haces allí? ¿Avisaste a los amos del desayuno?_ Corazón sorprende a Rahab, quien da un brinco del susto y tira al piso un florero alertando a los demás. Todos miran a Rahab con sospecha, la mirada tímida de ella se cruza con la de Evans quien frunce el ceño al descubrir que la joven espiaba su conversación.  _señor Evans,¿ le gustó el chocolate que le mandé al sótano anoche con Rahab?, creo que no lo probó, esta mañana lo conseguí intacto en la taza_ _¿con Rahab?... ah, sí claro Corazón, lo probé pero tenía mucho sueño, no tenía energías ni para una taza de chocolate, discúlpame.  _bueno, creí que no le había gustado, bien, el desayuno está servido, pueden pasar _ Rahab ruboriza ante la mirada de Evans, teme sepa que no fue un sueño, que ha sido ella la atrevida que le besó.  .............................. Evans se acerca a Eleanor en el jardín, los jóvenes ya han despertado, han desayunado, Alissa corre jugando en el jardín y Patrick salió a dar un paseo con amigos.  _¿por qué tan pensativa?_ Le pregunta Evans  a su madre, llegándose por detrás y sorprendiéndola.  _pensaba en Abrahán... lo extraño_ Evans se coloca frente a ella.  _y él a ti madre, me lo ha dicho, lo volveré a ver en estos días, le daré tus saludo_ Ella le sonríe.  _no me conformo con enviarle un saludo, le escribiré, ¿le darás mi carta cierto?_ El asiente sonriente.  .......................................... algunos días después.... _de modo que Patrick seguirá siendo normal con tus descubrimientos_ Evans y Abrahán se encuentran como cada cierto tiempo en unas lomas fuera de Adelaida.  _si padre, afortunadamente él no pasará por la amargura de la maldición.  _me alegra mucho por él, ¿y Alissa? Ella podría transformarse, ¿no crees? _nunca ha sucedido en la familia Granchester que se transformen mujeres padre, lo sabes.  _¿no temes que haya una primera vez en este caso?... no ha sucedido en los Granchester pero....  _no seas ave de mal agüeros padre, no debe pasar, no tiene por qué.  _bien eso espero, sinceramente, ¿y tu madre? dame razones de su bienestar.  _ ella se encuentra bien padre, ah, te ha enviado esta carta , te extraña, me lo dice siempre, ¿Por qué no regresas con nosotros? Podríamos tomar medidas _ Abrahán respira hondo mientras toma la carta. La mira sonriente luego mira a Evans.  _¿has escuchado sobre las muertes fuera de Adelaida?_Evans niega con la cabeza.  _no tienes por qué ser tu padre.  _no estés tan seguro, he encontrado sangre en mis manos, entre mis uñas, en algunas de mis pertenencias, las noticias vuelan, descuartizamientos, muertes horribles, tal como en lacock, la bestia ha vuelto a atacar Evans, no puedo volver, solo los metería en problemas, encuentra la cura, solo así volveré, dile a Eleanor que la amo_ Dice Abrahán marchándose a caballo a toda velocidad, dejando a Evans allí, mirándolo, consternado. ¡Lo haré padre, aunque se me consuma la vida en ello, te lo juro!. Piensa Evans. Él sabe que lleva sobre sus hombros un enorme peso. El peso del compromiso con su padre y consigo mismo. Evans monta a su caballo y decide pasar por el pueblo, quiere comprar golosinas para Alissa. Se detiene en una tienda donde compra algunos dulces, está a punto de pagarlos cuando se da cuenta que una astuta mujer toma la bolsita de dinero del pantalón de un desprevenido caballero mayor. Evans paga rápido la golosina y camina de prisa hasta donde está la ladrona, entonces frunce el ceño al ver que es la misma mujer, la aldeana que le había robado su dinero en la tienda de madame Tabita. Entonces camina de prisa y alcanza a arrebatarle la bolsita a la mujer. La devuelve a su dueño quien se sorprende de lo fácil que se  le había quitado su dinero. La chica lo mira sorprendida y sintiéndose descubierta corre alejándose de él. Pero él no la dejará ir tan fácil esta vez. Así que se apresura a seguirla, alcanzándola antes de cruzar el puente sobre la laguna vieja. De cruzar el puente habría desaparecido pronto en el bosque. Evans la alcanza y le impide moverse abrazándola con fuerza contra el imposibilitándola. Ella lo mira desafiante.  _tu otra vez, la pequeña ladrona ¿Qué haces en Adelaida? _déjame ir, solo hago mi trabajo.  _¿tu trabajo?_ Ríe sarcástico. Evans nota que la mujer se pone nerviosa al no poder huir, entonces la villanía de sus ojos se transforma en fragilidad. Ella lo mira intermitente. _por favor, déjame ir_ Le suplica.  _no puedo dejarte ir , seguirás cometiendo fechorías, además ese comportamiento  no es para señoritas. _¿que harás al respecto?_ Le pregunta ella moviéndose con fuerza para liberarse. Él respira hondo y entonces la sube sobre su hombro.  _haré que te encierren en prisión, eso haré.  _no, no, no, déjame ir_ Dice y golpea su espalda con fuerza. El camina de vuelta al pueblo ignorando sus gritos. La llevará a las autoridades correspondientes, la chica debe aprender una lección. Entonces ella comienza a silbar muchas veces, haciendo que mas de una docena de hombres salgan del bosque. Los hombres corren hasta ellos apuntando a Evans con filosas espadas y flechas. Evans gira a ver sorprendiéndose ante la amenaza que está ante sus ojos.  _es mejor que dejes ir a Azucena_ Dice uno de ellos.  _no les conviene intervenir, o todos irán a la cárcel_ Les amenaza Evans. Entonces sin previo aviso, una flecha roza su pierna haciéndolo sentir un fuerte dolor en la misma. Evidentemente solo han deseado asustarlo. La mujer aprovecha para liberarse de Evans a toda prisa y correr junto con los hombres que la resguardan. Evans toca su pierna herida, la cual comienza a sangrar. Evans levanta la mirada hasta la mujer que lo mira victoriosa.  _que se te cure pronto la pierna bonito_ Le dice. Entonces corre y todos desaparecen de la vista de él.  _¡márchate y no te metas con nosotros!_ Le grita uno de ellos. Evans nota que son muchos y no podrá solo y herido contra ellos, así que camina con dificultad herido, más que en su pierna, en su orgullo.  Evans entra a la mansión evidentemente muy enojado, todos lo miran y se dan cuenta que ha llegado herido, entonces  entra directamente a su habitación sin saludar a nadie, pero Eleanor lo sigue apresurada al ver su pantalón manchado de sangre. Corazón y Clara también lo siguen. Evans no desea dar explicaciones incomodas. Solo dice que fueron unos salteadores, cosa que no se aleja mucho de la verdad. Pero en su soberbia no desea hacer aspavientos de la situación, así que ordena a su madre y los demás lo dejen solo, por ahora la aldeana se le ha metido entre ceja y ceja, en vista de que el cambio se aproxima escribirá a Elliot sugiriéndole que escriba a la reina y pida un edicto contra los aldeanos.  Una vez solo, Evans revisa su herida, se ha descubierto la pierna y mira como la herida es un poco preocupante y debe ser curada, Evans se haya solo en camisa y ropa interior sentado sobre la cama , está a punto de vestirse y bajar para buscar algo con que curarse, cuando su madre entra sin avisar acompañada de Rahab, quien trae una palangana con agua tibia, jabón y desinfectante.  _¡madre! _mira como tienes esa herida, si no deseas que te la limpie, hazlo tú mismo, y no te angusties por la muchacha, no notará tus fachas_ Dice saliendo de prisa. Rahab coloca las cosas del lado de Evans en el piso, evitando mirarlo, pero antes de salir lo oye quejarse por la herida, así que se devuelve,  lo mira enternecida y camina hasta él, se sienta en el piso a su lado, toma una esponja y le lava la herida. Él la mira sorprendido, Rahab coloca luego el desinfectante y le venda la herida.  _mañana amanecerá mucho mejor señor.  _gracias muchacha, eres muy gentil_ Ella le sonríe, de pronto la fuerza del cariño y la inocencia hacen que ella sin planificarlo recueste su mejilla de su pierna  de forma sonriente. El frunce él ceño, no lo esperaba. Entonces ella sube la mirada y sonroja. Él le sonríe con afecto.  Evans la mira un momento analizando sus facciones atrayentes, delicadas e inocentes.  _eres muy bonita_ Ella se levanta de prisa y está a punto de salir.  _espera_ Dice y se levanta. Ella gira a verlo y baja su mirada hasta debajo de su cintura sintiéndose ruborizar y queriendo salir a toda prisa de allí. Él ríe malicioso.  _tranquila, no te pasara nada malo, estoy herido_ Dice. Ella ríe tímida, si le pasa algo con el señor Evans, está segura que no será nada malo. Rahab se marcha flotando entre nubes y Evans se queda pensativo, es tan inocente, buena, todo lo opuesto a la aldeana, bella, si, muy bella, pero un demonio vestido de ángel, pero a él no lo engañará. Esta dispuesto a hacerle la guerra cueste lo que le cueste.  .................... Evans está en el despacho cuando entra Eleanor un poco sobresaltada.  _¿qué te ha pasado madre? ¿acaso viste a un fantasma?_ Eleanor se sienta de prisa.  _es Alissa.  _¿que sucede con la niña madre? _la he visto extraña los últimos días ¿sabes que ha estado presentando fiebre? _Si, Clara me mantiene al tanto, pero el medico la revisó_ Responde Evans.  _si, y dice que no tiene nada.  _¿y entonces? No te preocupes madre.  _precisamente Evans, si no tiene nada ¿porque le da fiebre?.... Me recuerda..._Eleanor respira hondo mientras frota sus manos nerviosa.  _¿qué madre? _a ti Evans, cuando estabas pequeño, antes de la transformación_Evans se levanta. _no, no madre, no es lo mismo.  _a veces está ausente, como si no estuviera aquí, a veces dice que oye voces, lo mismo te pasaba Evans, a veces me mira con odio, y bien sabes cuanto me ama mi pequeña.  _nunca le ha ocurrido a Las mujeres Granchester madre_ Dice Evans empezando a preocuparse.  _ no es totalmente cierto Evans_ Dice Eleanor levantándose.  _¿qué dices? _hay un tercer libro, uno que no has visto, al parecer sucedió una vez_ Evans se resiste a la idea de que Alissa sufra la condición.  _¿porque nunca lo dijiste? _por qué sucedió en otra familia, no en la nuestra, pero hay posibilidades, debes ir por ese libro Evans.  _no hay tiempo madre, pronto me iré, esperemos que solo sean fantasías de niños, un amigo imaginario o algo así, ahora solo debemos esperar madre_ Evans sabe que ir por ese libro seria viajar a lacock, eso llevaría mucho tiempo, y no puede darle la formula a la pequeña, pues de hacerlo y no ser la condición tendría efectos muy adversos en la niña, no le quedará otra opción que dejar que el tiempo pase, además, es solo una niña, la transformación no debe ocurrir en esa etapa.  ...................... Clara corre emocionada hasta la habitación de Evans, Elliot ha vuelto, está debilitado pero feliz de verla. Todos celebran, especialmente la pequeña Alissa. Los días pasan y Patrick debe volver al internado. Elliot y Clara lo visitan y le  escriben frecuentemente.  Elliot estudia la posibilidad de escribir a la reina por la petición de Evans, en contra de los aldeanos, le parece algo extremo y debe analizarlo bien, pues solo antipatía no le basta para tomar medidas como las que Evans sugiere. Este evitó escribirle sobre sus temores con respecto a Alissa, pues se aferra a la idea de que sean solo malos presagios.  Todos comen durante la cena, Alissa no deja de ver a Eleanor, una mirada incomoda.  _¿sucede algo cariño?_ Pregunta Eleanor. la niña hace un silencio, luego.... _¡te odio!_ Le grita Alissa dejando a todos consternados.  _Alissa_ Reprocha Elliot. _discúlpate con la abuela.  _no, déjala, déjala_Exclama Eleanor. Clara no entiende lo que le pasa a la niña. De pronto Alissa empieza a llorar.  _¿por qué me miran así?_ Pegunta al tener las miradas acusadoras de todos en la mesa.  _¿por qué le has dicho a la abuela que la odias?_Pregunta Clara. La niña hace una negación. Eleanor no puede evitar llorar pues le ha dolido oír de la boca de su pequeña nieta que la odia, ya otras veces la ha sorprendido mirándola con recelo, pero jamás esperaba oírla decirle algo así. Alissa la mira.  _no es cierto_ Eleanor frunce el ceño, Alissa se levanta y la abraza.  _lo siento mucho abuelita, no te odio, te amo, no soy yo abuelita, es ella, ella es mala, te odia, odia a todos_ Todos se miran perplejos. 
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