CAP. 35 - AQUELLOS OJOS VERDES … Cuando ella entra en cualquier sitio, la temperatura parece bajar unos grados. No necesita levantar la voz ni hacer movimientos toscos. Es la fuerza de su mirada, la forma en que respira con calma mientras el peligro aguarda, lo que hace que incluso los más valientes vacilen. Sus ojos verdes no solo son impasibles, son un juicio. Quien recibe su mirada siente que está siendo desnudado, que cualquier debilidad será usada en su contra. Su cuerpo pequeño no limita su presencia, al contrario, la hace más letal, porque la sorpresa de su dominio sobre el espacio deja a todos sin reacción. Los traidores bajan la vista cuando ella los observa demasiado tiempo. Los aliados la siguen sin cuestionar, no por lealtad ciega, sino porque saben que, si dudan, ella lo no

