Al borde...

3114 Palabras

Todas las puertas de la casa se cerraron de inmediato; incluso escuchó que la del vestíbulo se había cerrado con pasador. —No intentes huir, cobarde. Adrik retrocedió un par de pasos, mirándolo de frente. Su padre, al detectar un atisbo de nerviosismo en sus ojos, avanzó con una sonrisa apenas contenida. —¡Todavía eres demasiado débil! ¿De verdad crees que algo en nosotros puede ser sano? Igual que yo, te alimentas del peligro y del poder. Lo sabes, te excita tener el control. No conoces otra cosa. Saboreas el caos. Te atrae el fuego. Y, como yo, no das el brazo a torcer. Adrik lo mantenía bajo vigilancia, alerta, pero su expresión no temblaba. —No pretendas saber quién soy. Tú y yo no somos iguales. —¡Imbécil! Te conozco mejor de lo que tú te conoces. Vi en tus ojos ese deseo retorc

Lectura gratis para nuevos usuarios
Escanee para descargar la aplicación
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Autor
  • chap_listÍndice
  • likeAÑADIR