hechizo de poder

lobo

Black

· Me voy a presentar, me llamo Black y soy el lobo de Marcos y si, tengo consciencia, se pensar y hablo con mi humano, dirigimos una manada, todos dependen de nosotros, de nuestras inversiones, de que el ejército no nos venciera, siempre entrenando, siempre ganando dinero, todos dependían del alfa, de mí, pero mi humano está cansado y más por no tener a nuestra luna, nuestro apoyo con nosotros. Normalmente nunca gobernaríamos sin nuestra luna al lado, pero bueno, teníamos que hacerlo ya que los padres de mi humano murieron, me dolió mucho su muerte ya que todos éramos familia, mi humano y yo defendíamos el territorio muy bien, no habíamos vuelto a sufrir más muertes desde las de mis padres, los vampiros habían parado y los roges también, los roges son lobos que no tienen manada, ellos son agresivos y aunque no tengan manada, atacan en grupo a otras. Como se solía decir, era el principio de una buena tormenta, estábamos esperando a ver si alguien quería ir al lago maldito, Dios, parece mentira que sean tan caguetas y supersticiosos, al final decidió ir mi hermana y acepte, no me gustaba, pero bueno, sabía que su loba era igual de fuerte que yo. No sé cuánto tiempo pasó, pero mi hermana se comunicó conmigo porque había vampiros y perseguían a una niña, decidimos ir a apoyar y proteger a la niña, cuando llegamos mi hermana estaba en una mala posición y el vampiro estaba por morder a la niña, sin importarme la batalla aullé fuertemente y al final acabamos en una pequeña batalla. Finalmente ellos se fueron y mi humano cogió a la niña en brazos, esa pequeña me inspiraba protección, quería cuidarla como si fuera mi cachorra, mi instinto de protección hacia ella era más grande que incluso el de hacia mi hermana, al principio la veía a través de mi humano, veía como la cuidaba, como ella solo asentía o negaba sin decir palabra, como no sabía comer, como no reaccionaba, se tensaba o huía de la nana, todo, veía todo y al final decidí acercarme a ella, Marcos estaba en contra, pero yo quería, tenía que saber por qué la quería proteger tanto… Lo que no me esperaba es que ella fuera tranquila al estar cerca de un lobo, pensé que se asustaría, pero no lo hizo, solo me mire y me acarició el pelaje, me hizo ronronear cosa que nunca hacía, Dios ¿Que me hacía esta cachorra? Lo que más me sorprendió es que hablo, ¡hablo! Si con marcos y los demás no hablaba pensé que no sabía hablar, pero si que sabe y lo hizo conmigo ¿Por qué? Ella me dijo que tenía miedo ¿Miedo de que o de quién? Quería preguntarle, pero para ello tendría que salir Marcos y se asustaría o no hablaría, igual le da miedo hablar con humanos pero no con animales, no lo sé, no lo entendía muy bien, solo sé que ella se relajó a mi lado, estuvo acariciándome hasta quedar dormida, en el instante que se durmió di paso a Marcos, la cogió en brazos y la llevo a su cama, él tampoco entendía el por qué ella había hablado conmigo y no con él, pero daba igual al menos sabía, podía hablar y su voz era tan tierna tan dulce, me encantó que hablara conmigo así que Marcos y yo decidimos que me dejaría salir de vez en cuando para ver si conseguíamos averiguar lo qué había sufrido nuestra pequeña cachorra, por qué sí, Marcos estaba en contra, pero para mí ella era nuestra.

Pasaron los días y ella parecía más nerviosa, cada día tenía ojeras como si no durmiera bien y no dejaba que nadie la tocará ni siquiera Marcos, parecía que quería alejarse, pero luego lo miraba con cara de extrañarlo, nadie sabía que le pasaba ni siquiera yo, ella solo salía al patio y me acariciaba el pelaje, a veces se dormía encima de mí, pero se despertaba enseguida asustada, yo le lamia la cara y ella reía.

- Sabes hoy soñé algo raro, era una señora, decía que se llamaba diosa Luna… Me dijo que la perdonará por haberme hecho sufrir de esa manera, pero que era necesario ya que me esperaban cosas muy importantes, dijo que yo era especial pero no me quiso decir el porqué, yo creo que fue un sueño bonito, ella me cogió en sus brazos, me sentí querida, nunca me he sentido así.

Y sí, ella ya hablaba mucho mejor, a veces solo me decía lo que soñaba, otras veces me decía que le pasaba en el día, pero la verdad es que ese sueño me sorprendió, la diosa Luna era quien nos había creado a todos a los hombres lobo, mi pregunta era ¿Por qué hablaba con ella? Era una simple humana o eso creía, ya que de ella no salía ningún olor y de lo que me daba cuenta era que nunca se quitaba una pulsera de su mano, la llevaba siempre, era roja y estaba entrelazada, me preguntaba de donde había salido. Un día se lo señale con el hocico, ella solo se apartó de mí y estuvo una semana sin salir al patio a pesar de que me veía desde la ventana, solo me miraba y se daba la vuelta, no quería verme y eso me ponía triste ¿Por qué se había alejado de mi por haber señalado la pulsera? ¿Será que es importante para ella? Al final ella volvió, se abrazó a mí y lloró no sabía que la pasaba hasta que me lo dijo.

Tengo mucho miedo, ella dijo que los mataría si no me iba, creo que la veo en la ventana vigilándome, me persigue en sueños…, no quiero volver con ellos, no quiero más dolor, más mordiscos, son malos conmigo…, Marcos ha sido bueno y la nana…, pero tengo tanto miedo de que les hagan daño, por eso no me acerco, me alejo de ellos, no quiero que sufran, no por mi culpa, no debí nacer…, mi mamá me lo decía siempre, yo era una desgracia por ser tan lista, por hablar, por ser distinta, yo no veo que sea distinta… Luego me vendió, me llevo a esos seres, cogió su dinero y me dejó allí con ellos ¿Por qué con ellos? ¿Qué querían de mí? ¿Por qué no me dejan libre…? ¿Por qué vienen de nuevo a buscarme? ¿Por qué siguen diciéndome que les harán daño? no quiero que les dañen…

Siguió diciendo que no quería que nos dañaran una y otra vez, que tenía que alejarse, hacer que la odiaran, pero se nunca lo haríamos, siempre la protegeríamos, gruñí ligeramente solo de pensar que alguien la vigilaba por la ventana y no nos habíamos dado cuenta, teníamos que protegerla. Alisa

Hablar con alguien me sentaba tan bien, aunque ese alguien no hablara y fuera un lobo, me sentía bien hablando con él pudiendo decirle mis miedos, mis sueños, todo…, porqué podía, no me lo impedía la pulsera…. Si, la pulsera que llevo me impide hablar con la gente, la diosa Luna me la dio, me lo dijo que me protegería, pero creo que se equivocó no me protegió de los vampiros y sé que son vampiros gracias a ella. Últimamente me visita mucho en sueños, me dice perdón casi siempre y que mi destino es grandioso. Lo dudo, solo soy una niña ¿que podría hacer yo tan sorprendente? Pero ella no quiere explicarme más, dice que es pronto para explicármelo, que debo esperar, yo no la insisto porque tampoco creo que sea verdad, a veces pienso que es mi imaginación y otras que es real, solo sé que la pulsera me impide hablar con Marcos y los otros y también sé que no puedo quitármela, el único con quién puedo hablar es con el lobo de Marcos, ella me dijo que me permitió eso porqué lo necesitaba tanto él como yo. No entendía ¿por qué un lobo necesitaría que le hablara? Ella me decía que ya lo entendería, pero yo la miraba con duda. Le conté al lobo que veía a la diosa Luna, no pude contarle sobre mi pulsera, pero si otras cosas, al menos ya no me sentía sola, pero si seguía con miedo sabía que ellos volverían a por mí y me harían daño de nuevo, y no solo a mí, sino también a ellos y eso me aterraba, pero intentaba creer a la diosa cuando dijo que no vienen a por mí porque estaba en el lugar donde me tocaba estar ahora, al final la entendí, pero no quiso explicarme, ella era así, nunca explicaba nada, pero bueno tampoco iba a pelear con ella y que me dijera las cosas porque ella era así enigmática. Aun así, era divertido hablar con ella, me enseñaba muchos lugares hermosos y nunca me llevaba al mismo sitio, decía que eso era peligroso, pero no sabía por qué, después de todo era un sueño ¿no?

Un día me llevo a un campo que estaba lleno de flores, pero no tenían color, eran trasparentes y hermosas, tenían brillos propios, me sentía llena de paz allí. Otro día me llevo a un sitio donde había nieve, pero la nieve era caliente, jugué en ella todo el rato hasta que al final me desperté, ella hay veces donde hablaba y hay otras veces que no decía nada y solo me miraba jugar.

Así paso un mes, un mes donde yo cogí peso, también crecí un poco, Marcos me cuidaba mucho y me sentía en paz con él, pero también es verdad que no me gustaba encariñarme con él por qué temía que le pasará algo por mi culpa. También pasaba tiempo con nana, me enseñó a plantar, a cuidar verduras y también a cuidar unos conejos que tenían, me encariñe mucho con uno blanco y marcos me lo dejo llevar a mi habitación como mascota, a veces dormía en el suelo al lado de su jaula, quería protegerle y cuidarle, por eso no quería alejarme de él. El tiempo pasó rápido, todos los días veía al lobo de Marcos y hablaba con él, otras veces solo me quedaba su lado abrazándole, durmiendo una noche me desperté asustada, la diosa Luna me dijo que ya venían, que me preparara, que avisara a Marcos, que hablara con él, que me quitaba el hechizo para que pudiera hablar con él y eso hice me levante y fui a su cuarto, pero luego no pensé que iba a poder hacer. ¿Qué podría hacer yo contra unos vampiros? Nada… No podría hacer nada, dudaba en llamarlo o no, no sabía que elegir, si llamar y hacer que ellos sufrieran, o irme con ellos de nuevo y sufrir yo sola, al final llame a la puerta, pero nadie abrió ¿sería que el destino me decía que no los llamara, que volviera con los vampiros? Pero la diosa luna me dijo que le dijera a Marcos, que él me ayudaría, no sabía a quién creer, me quedé mirando la puerta un buen rato, al final decidí buscarle, supondría que estaría en el despacho ya que me dijo que podía buscarle allí siempre que no estuviera en su cuarto, él me dijo que podía buscarle siempre que quisiera su compañía o le necesitará para algo, así que me decidí apagar las luces, aún estaban encendidas aunque yo llevaba un buen rato dormida, no sé que hora sería, tal vez muy tarde o aún temprano ya que nana me acostaba sobre las 9:30 de la noche. Al final llegue a la puerta y llamé, estaba asustada, pero no quería que se me llevasen, Megan me abrió la puerta y yo entré allí, estaban Marcos, Demon y Megan, parecían que había estado hablando hasta que yo llegué a interrumpir, igual solo iba a molestarles…, igual lo mejor sería marcharme de ahí.

- ¿Que pasa peque? Es tarde, deberías estar durmiendo ya - la voz de Marcos sonaba preocupada, yo lo miré, quería decirle, así que abrí la boca, luego la cerré de nuevo y suspiré, al final mi voz salió temblorosa, tenía miedo de que mi voz no saliera, que la diosa Luna hubiera mentido, que no pudiera hablarles y que en verdad ellos vinieran a por mí. Un cumulo de emociones se escuchaba a través de mi voz y yo lo sabía.

- E… Ellos vienen y… os mataran, es mi culpa, debí volver con ellos, pero no quería más dolor…, lo siento…, entregadme ahora y no os harán daño…, decid que no sabíais nada…

- ¿Venir quién peque?

- Ellos…, los vampiros…, me lo dijo la diosa Luna, también me dejó hablarte…

- Mierda… - Marcos se puso tenso, su cara paso de estar preocupada por mí a estar cabreado, le había enfadado y todo era mi culpa…

- Megan tu y nana llevaros a la peque a la habitación segura, Demon llama a la guardia y evacua a todos los niños y mujeres al refugio, que los demás de preparen para atacar.

Sentí como Megan me cogió en brazos, yo no quise al principio, pero al final me dejé, no quería enfadarla también a ella. Megan busco a nana y juntas fueron hasta el comedor, allí había un cuadro enorme que movieron y entraron por una especie de pasadizo, después de caminar unos minutos, salimos a una habitación, en ella había unos sofás, una cama, agua y comida, Megan me dejó sobre la cama y nana me abrazó, yo no entendí por qué me abrazaba, después de todo era mi culpa ¿por qué no me entregaban si Marcos se había enfadado…?

- Tranquila todo estará bien.

- Les harán daño los vampiros, deberían entregarme, no quiero que sufráis más…

- No nos harán daño para algo somos lobos.

- ¿Lobos?

- Marcos te contara todo cuando termine peque.

- Y ahora que puedes hablar ¿cómo te llamas? ¿Puedes decirnos algo de ti?

- Alisa, aunque hace mucho que nadie me llama así… y siempre he podido hablar, solo que ella hizo algo para que no hablara ni hiciera ningún ruido al llorar ni al caminar, lo hizo para ayudarme, para que no hubieran más castigos…, aunque yo no sabía por qué había dejado de hablar, ella me lo explico hace poco…

Ellas me miraban en silencio, nana me acabo abrazando de nuevo y acariciándome el pelo, me dijo que me durmiera, que todo estaría bien y que cuando todo acabara saldríamos a plantar tomates y flores, pero yo me negaba a cerrar los ojos por muy cansada que estuviera y lo estaba, pero no podía dormir, no sin saber si Marcos estaba bien, incluso Demon y el resto de la gente que no conocía…, después de todo se iban arriesgar por una niña que nada tenía que ver con ellos, no era nada como ellos ¿por qué hacían todo esto por mí? El quererme, enseñarme a comer, peinarme, ducharme, comprarme ropa, todo lo que estaban haciendo por mí era demasiado y yo solo era una completa desconocida…. Me dolía que pudiera pasarles algo…Marcos

Escuchar su voz por primera vez a través de Black fue lo mejor que me había podido pasar, me encantó su voz dulce suave hasta con ese deje de indecisión, me gustaba, me encantaba la pequeña, me sentía a gusto con ella y feliz. Hacía mucho tiempo que no me sentía así, bueno, desde la muerte de mis padres la felicidad era algo que se había evaporado, y la pequeña en poco me había hecho feliz de nuevo y no solo eso, era como si un lazo nos uniera, pero no sabía por qué.

También tenía mis dudas de si ella era humana o al menos eso parecía ya que no emitía olor alguno. ¿Por qué la diosa luna se había puesto en contacto con ella…? La diosa luna fue nuestra creadora, se podría decir que era la madre de todos los hombres lobo, , y la diosa Lilith creo q los vampiros , ya que eran hermanas y rivales y por ello en nuestra sangre corre el odio hacia las otras criaturas, pero la verdad últimamente el odio se había calmado, la diosa que nos bendijo con los mates .

vampiros y lobos nos empezaremos a emparejar, por lo tanto el odio estaba disminuyendo pero no eso no quería decir que hubiera acabado.

La pequeña hablaba muchas cosas con Black, pero nunca nos dijo su nombre, queríamos saberlo, pero Black no podía hablar con ella, así que solo la escuchaba, jugaba con ella y saldrían juntos al sol. En poco supimos que le gustaba nana, lo espaguetis con nata y los bizcochos, vimos que en poco tiempo estaba creciendo y engordando y eso nos hacía felices, ella realmente lo necesitaba, estaba tan débil cuando llegó, la verdad nos sorprende que pudiera mantenerse en pie, pero era como si una fuerza la impulsará a seguir en pie.

Megan y Demon sabían que ella hablaba ya que se lo había contado, pero nunca conseguíamos que nos hablara a ninguno de nosotros, de momento al único que le había hablado era a Black, pero estábamos reunidos para hablarlo y hacer que conociera a los lobo de Megan y Demon ya que ellos sentían curiosidad por la niña y queríamos ver si con ellos hablaba o solo era con Black, estábamos hablando de ello cuando la puerta se abrió y apareció la peque temblando de miedo, en su rostro de reflejaba la duda, el miedo y la angustia.

- Que pasa pequeña ¿Has tenido una pesadilla? – era lo único que se me ocurría del por qué estaría despierta y que la habíamos dejado dormida hacia poco.

- N… No…, la… la diosa ha dicho que ellos vienen… y ellos van a mataros, no puedo dejar que os hagan daño…. Entregadme a ellos….

Nos quedamos mirándola sorprendidos, era la primera vez que nos hablaba y nos ponía felices escucharla por fin, pero luego analizamos sus palabras, cuando decía “ellos” se refería a los vampiros que la tenían cautiva. No quedó de otra, le dije a Demon que prepara a la guardia, que llevarán a niños y mujeres al lugar seguro y le dije a Megan que buscara a nana y que se fueran a la habitación con la peque, Megan cogió a la peque en brazos y marcharon. Fui con Demon e hicimos que la guardia estuviera preparada en el perímetro del lago, pero sin acercarse ya que seguían temiendolo.

Los vampiros aparecieron por ese lado, eran bastantes y el líder era el mismo que el de aquella vez, su aura seguía siendo oscura, pero parecía más débil, no era tan fuerte como la otra vez, había más como él que su aura se notaba más, pero no tanto como la de él.