
Chiara desde pequeña ha sentido un gran amor por los animales, a pesar de que su padre y su abuelo eran cazadores, ella odiaba lo que hacían y siempre acompañaba a su familia a sus viajes de caza para encontrar la manera de ayudar a los pequeños animalitos. En uno de los viajes de caza ayudó a un pequeño lobo a huir de una de las trampas de su padre, lo que no sabe es que esa pequeña acción le cambiaría la vida.
