1. Mi Esposo
Era el primer día del último año de universidad me faltaba solo un año y podría recuperar toda mi vida, era estudiante de arquitectura y aquí estaba, pronto todo llegaría a su fin, hoy llegaba un nuevo profesor a dar la asignatura, nadie sabía quien era pero se decia que era uno de los mejores arquitectos del país, que él fue el genio detras de museos, corporativos y auditorios, se decía incluso que había diseñado para varios famosos, en realidad a mi no me importaba, lo único que quería era poder graduarme, siempre fui la mejor de mi clase y estaba segura este año sería igual.
Todos estábamos a la espera del tan famoso profesor, yo estaba sentada junto a Aiden mi novio, llevábamos juntos poco más de 4 meses, era una relación corta y definitivamente lo quería aunque no podía decir que lo amaba, yo tenía en mi mente a Kyle, mi primer y gran amor, el único hombre que siempre iba a amar, aunque esa relación no pudo ser aún guardaba la esperanza de estar con él, tal vez en un par de años, yo tenía todo planeado, Kyle y yo nos casaremos y formaremos una hermosa familia pero mientras eso sucede decidí pasarla bien con Aiden, él no era malo, en realidad nos divertimos mucho, en el poco tiempo que llevábamos juntos.
La puerta se abrió, terminando con la charla que tenía con mi novio sobre el fin de semana en los Hamptons, era el nuevo profesor y no pude quedar más asombrada, era él, definitivamente era él, claro lucía muy diferente a como lo conocí ya no parecía el hermano perdido de Kurt Cobain, no tenía ya el pelo largo, ni esas fachas de indigente, pero por supuesto que ese rostro jamás en la vida podría olvidarlo y su voz cuando saludo a toda la clase solo termino por confirmar mis sospechas, definitivamente no era otro que mi esposo Evan.
Si ya sé se estarán preguntando, como es qué está casada, tiene novio y esta enamorada de otro hombre, pues si, así es, pero la historia es mucho más complicada de lo que piensan.
Hace 5 años, me vi obligada a casarme con ese hombre, mi madre estaba a punto de fallecer y yo me quedaría huérfana, mi padre murió cuando yo tenía 8 años y ahora era mi mamá, el único familiar que tenía era mi tío, el hermano de mi papá, pero era una persona ambiciosa que siempre vivió a la sombra de su hermano y que solo esperaba que me quedara sola para hacerse de la empresa y la herencia de mis padres, por supuesto que ella no quería eso para mí, era muy probable que terminaría arruinada antes de poder asumir mi puesto.
Así que la única opción que mi mamá pudo encontrar fue casarme con Evan, el hijo mayor de una de las familias más poderosas del país y que eran socios comerciales de nuestra empresa, yo hubiera preferido casarme con Kyle, el hermano menor de mi esposo, pero al igual que yo era menor de edad, y necesitábamos a alguien que pudiera asumir el cargo de mi empresa y administrarla hasta que yo terminara la carrera, hasta ese momento y solo hasta ese momento podría divorciarme, así lo quiso mi mamá.
Fue el momento más frustrante de mi vida, estaba a punto de quedarme sola y tenía que casarme con tan solo 16 años de edad con un hombre 6 años mayor que yo, que ni siquiera me gustaba por más de 5 años, pero no tenía opción ni opinión, solo tenía que acatar el último deseo de mi mamá.
La boda se llevo a cabo solo por lo civil, con un vestido muy sencillo, un prenupcial, sin velo, sin invitados más que mi madre y sus padres, afortunadamente Kyle no estaba, probablemente no lo hubiera hecho con él ahi, sin ramo, sin amor y en un hospital, siempre soñé con una gran boda y por supuesto esta no era, eso fue todo, despues de eso mi mamá insistió que pasáramos la noche en un hotel, para qué? no sé, ella sabía que no lo amaba, es más sentía repulsión, era una niña malcriada que siempre tuvo todo cuanto quiso y él no era el príncipe con el que quería estar, no cumplía con mis "estandares", obviamente no hubo noche de bodas, después de todo Evan sabía que esto era un error y no podía tocarme, aunque estuvieramos casados sería contra mi voluntad, y desde luego se lo hice saber, tal vez no fue de la mejor forma, pero ya había aguantado demasiado.
- Ni se te ocurra tocarme.....no te quiero y no me gustas, así que no pienses que algo va a pasar, antes muerta que ser tuya- les dije no fue lo mejor.
- Descuida, lo tengo muy claro..... lamento que tengas que pasar por esto- él siempre fue muy educado pero para mí no era suficiente.
- Si tanto lo lamentas te hubieras negado.
- Lo hice pero al parecer mi opinión tampoco cuenta.
- Ni siquiera eso pudiste hacer, siempre has sido un cobarde, eres patético, valiente esposo me toco!!, tal vez mi mamá se equivocó por elegir a un perdedor- estaba frustrada y fuí grosera y cruel, sé que lo lastime, sabía que sus padres nunca se sintieron orgullosos de él a pesar de lo buen estudiante que era, todos sabían que se casaron porque ella estaba embarazada, y que debían guardar las apariencias, no supe si se querían o no, aunque lo segundo era lo más probable y de alguna u otra manera se lo hacían saber a Evan, para ellos era el culpable de su matrimonio, y por consecuencia su favorito siempre fue Kyle, el hijo si planeado, pero era una adolescente molesta, triste y sola, así que no lo pensé, salio de la habitación después de eso y no volví a saber de él hasta este día, por supuesto estuvo conmigo el día que falleció mi mamá, una semana después de mi boda aunque no nos dijimos nada, ni siquiera nos despedimos.
En realidad no puedo decir que fue un mal esposo o administrador, asumió su cargo con mucho éxito, yo aunque no entendía mucho, recibí anualmente sus informes financieros y cada que quería comprar algo por muy absurdo que fuera él liberaba el dinero para que lo obtuviera, para mí resulto bien, tenía lo que quería sin verlo.
- Davana Hudson.
Evan había pronunciado mi nombre por primera vez desde que nos casamos, y eso me sacó del trance, él ni siquiera me miró, solo lo dijó como el de cualquier otra alumna.
- Aquí- dije tan bajo que creo que ni yo me escuche.
- Bienvenidos todos, cómo saben el Profesor Duncan se jubiló y yo me haré cargo de su asignatura para su último año, mi nombre es Evan Garrett - dijo apenas termino de pasar lista, en realidad no sabía porque lo hizo, ningún profesor lo hacía, seguía siendo el mismo- estaré trabajando parte del temario del Profesor pero agregaré un par de títulos a la bibliografía que les serán muy útiles, también modificaré la forma de evaluarlos, estaremos trabajando por módulos que se calificarán de forma independiente y de ese modo obtendrán su nota promedio al final, cada módulo tendrá un proyecto y un exámen, alguna duda?
Si yo tenía una: Por qué estabas aquí?, por supuesto que solo la hice en mi mente, no iba a gritarle a los cuatro vientos que ese hombre era mi esposo, no necesitaba esa clase de vergüenza sobre mi, suficiente era que yo supiera que estábamos casados.
Evan dió la clase de forma muy tranquila, se enfocó en hacer su trabajo, tenía que admitir que sabía hacerlo y sabía de lo que hablaba, era todo un genio a decir verdad, y para mi fortuna no me presto atención, me trató como a cualquier otra alumna, de hecho me ignoró, lo que me agradó, eso creo.
Como sea, la hora se me hizo eterna ya quería que mi tormento con este hombre terminara, quería salir corriendo del lugar, no sabía por qué, pero necesitaba que esto acabará y poder enfrentarlo en privado, ya era suficiente con tener que estar casada con él ahora también tenía que aguantarlo aquí, le iba a dejar en claro que no tenía permitido interferir en mi vida
Afortunadamente la clase terminó sin contratiempos, y era la última así que podía salir de la universidad, Aiden me invitó a comer, teníamos planes de ir a la casa de playa de mi familia este fin de semana, pero no era el momento yo necesitaba aclarar muchas cosas con Evan, tuve que poner un buen pretexto y para mí fortuna él lo creyó, lo despedí en el estacionamiento de la facultad y me dirigí a la oficina de mi esposo, claro antes dí un enorme rodeo, no quería que los rumores iniciarán, respire profundo antes de tocar y.....
- Adelante- tenía una voz profunda y muy varonil, escuchar su voz del otro lado, me erizo la piel, gire a ambos lados del pasillo para comprobar que nadie me viera y entré.
- Buenos días Profesor- dije tan fuerte que parecía le estaba gritando, pero solo era para despistar- qué haces aquí?- pregunte a penas cerré la puerta.
- Buenos días, no entiendo tu pregunta?- dijó de lo más tranquilo.
- Por qué estas aquí? a caso quieres fastidiarme la vida?.
- Sabía que vendrías con tus reclamos de niña malcriada, pero no tan pronto- ok, esto era suficiente para mí, ni siquiera me miró, tenía la vista clavada en su computadora.
- No sé que pretendes pero te advierto que no vas a fastidiarme, mantente alejado de mí, oíste?, no quiero que nadie sepa que tuve la desgracia de casarme contigo, esto va a terminar pronto y espero que no pretendas que sigamos casados, si estas aquí por eso ya puedes largarte.
- Primero que nada, no vuelvas a hablarme así, entendiste? te comportas como lo que pretendes ser, una mujer de "clase", segundo si estoy aquí es asunto mío, no tengo porque darte ninguna explicación y tercero deja de pensar que todo tiene que ver contigo, por muy difícil que te parezca, la vida de las demás personas de este mundo, porque hay más personas en este mundo, no gira a tu alrededor, empieza a ubicarte- me quedé sin palabras, nunca me había tratado así, bueno no es que convivieramos mucho pero siempre fue muy educado y respetuoso.
- Más te vale, te advie...
- Tú a mi no me adviertes nada, ahora retirate, es muy pronto para que los rumores sobre el profesor y la alumna empiecen, no vuelvas a buscarme aquí, si tienes algo más que decir, me mandas un mail, así lo hiciste estos años, no veo por qué deba ser diferente ahora, te queda claro?- quería decir algo más pero él volvió a enfocarse en su trabajo, me estaba ignorando por completo, no tuve más remedio que salir de la oficina, pero no me iba a quedar con las ganas, así que azote la puerta, bueno no fue mucho pero al menos sé que lo incomode.
- Idiota- fue lo único que pude decir, y salí del edificio, estaba hecha una furia, tenía ganas de matarlo o alguien no me importaba a quien, tomé mi Camaro y fuí directo a casa, Nani seguramente sabría que decir para calmarme.
Al fin estaba en casa, aunque entre azotando y aventando todo a mi paso, cómo era posible que ese idiota me hablara así?, de verdad necesitaba golpear algo a alguien, para fortuna de mi casa Nani estaba ahi, ella era una mujer mayor de 54 años, me había cuidado desde que era una bebé y fue mi única familia desde que me quede huérfana, incluso podía decir que era como mi abuela.
- Davy- era el apodo de Nani- qué te paso?- preguntó apenas salió de la cocina- por qué traes esa cara?- si, la furia en mi rostro era evidente.
- Ese estúpido Nani, se atrevió a lo presentarse en la universidad, ahora es mi maldito profesor- arrojé mi mochila con todas mis fuerzas al sofá- ashhhh, como lo odio.
- Ay mi niña, si siempre ha sido un idiota cómo va a ser tu profesor?, ni siquiera podría enseñarle a un mono.
- De qué estas hablando?- me detuve para ver a Nani con el ceño fruncido- lo acabo de ver, el maldito idiota está ahí.
- Por Dios Davy, ni siquiera acabo la primaria, dudo mucho que este dando clases en una universidad.
- A ver Nani, de quién estas hablando?
- Del único idiota que conoces, Kyle, quién más?- si a Nani no le caía bien Kyle, ahora todo tenía sentido.
- Nani, te prohíbo que vuelvas a hablar así de él, esta claro?- podía ponerme un poco medieval si insultaban a mi chico- y no habló de él, si no de su estúpido hermano, Evan, esta dando clases en mi universidad y ahora también es mi profesor.
- El Señor esta aquí?.....ay mi niña que gusto, cuándo piensas traerlo?, le voy a preparar todos sus platillos favoritos y de postre una tarta de chocolate y frutos rojos que tanto le gusta- no podía dejar de ver a Nani con duda y asombro, cómo era posible que ella conociera tan bien a Evan, bueno a ella siempre le agrado mucho y lo quería.
- Nani, él no es ningún Señor y no pienso traer a ese....a ese.....a esa mosca a mi casa.
- Davy, es tu esposo, eso lo vuelve el Señor de esta casa, y no veo nada de malo que lo traigas, están casados, cuál es el problema?
- No por mucho, te aseguro que me voy a divorciar y al único que llamarás Señor es a Kyle, créeme- dije con una sonrisa de triunfo en el rostro.
- El día que eso ocurra me largo de aquí, cómo es posible que estés tan ciega?, Davy tienes el esposo que todas quisieran y quieres dejarlo por un intento de simio, porque ese ni siquiera para eso sirvió, espero que el día que te des cuenta no sea tarde.
- Mira Nani, te quiero mucho pero si tengo que elegir entre tú y Kyle, sabes que ocurrirá.....- la mire con soberbia- así que no vuelvas a insultarlo en tu vida, esta claro?, él será mi esposo y si no te gusta- le hice un ademán con la mano señalado la puerta- yo no voy a arrepentirme jamás.
- Como diga Señorita Hudson- Nani se retiro hacia la cocina, había sido un poco dura pero era mejor dejar las cosas claras desde ahora.
Estaba por irme a mi habitación, cuando ambas nos disgustamos era mejor estar separadas, mi mamá siempre dijo que yo no pensaba en los demás cuando estaba enojada y que podía llegar a ser muy grosera, y justo en ese momento tocaron a la puerta, Nani salió a abrir, sabía perfectamente cual era su trabajo y nunca, por más enojada que estuviera, dejaba de hacerlo, en mi rostro apareció una enorme sonrisa, era Kyle, mi Kyle.
Nani por supuesto no disimuló su desagrado, le hizo una mueca de fastidio cuando lo dejó entrar y se retiró a la cocina.
- Hola ricura- Kyle siempre fue muy....muy directo?
- Hola guapo- le dí un gran abrazo- cómo estás?, ya te extrañaba - dije haciendo un puchero.
- Lo sé y sabía que me necesitabas, el estúpido de mi hermano regreso, ya supiste?- él me seguía sosteniendo de la cadera.
- Créeme lo sé, no vas a creer en dónde lo ví?- caminé hacia el sillón, Kyle rozó mi trasero con su m*****o cuando me dí la vuelta, fue algo......es Kyle supongo que esta bien, no?
- No me digas que ya vino a joderte más la vida?- Kyle se sentó a mi lado, sus manos siempre parecían muy inquietas cuando estábamos a solas, a veces eso era un poco inquietante y no de buena manera.
- Es mi profesor en la universidad.....- la sonrisa de Kyle se borró de inmediato, parecía que era algo que no esperaba.
- Disculpa, qué?
- Si, como lo oyes ahora tengo que aguantarlo en la universidad.
- Hijo de perr.....- Kyle se paró a toda prisa y se dirigió a la puerta, pero se detuvo en seco- ricura, necesito un favor, necesito dinero, crees que sea posible?
- Cuánto necesitas?- esto era algo muy frecuente entre nosotros pero se supone que debes apoyar a tu pareja, es verdad aún no lo somos, pero en un futuro.
- Solo mil dólares- ok, eso era una enorme cantidad.
- Eso es.....mucho....yo no tengo esa cantidad, tendré que hablarlo con él- a Kyle no le gustaba que yo me refiriera a Evan por su nombre en su presencia y yo estaba decidida a complacerlo.
- En serio nena, espero que esto acabe pronto, no soporto que te tenga tan controlada- mi dulce Kyle, siempre tan lindo-yo quería estar contigo pero mi estúpido hermano siempre lo arruina todo- se acerco a mi de nuevo y me beso, si nos besábamos, estábamos enamorados cuál era el problema?, sus besos eran muy intensos, siempre metía su lengua hasta mi garganta y mis labios quedaban un poco mojados de su saliva.
- Te llamaré cuando lo tenga- le dije a penas nos separamos, él me sonrió de lado y se fue no sin antes darme una nalgada.
Tengo que ser honesta, a veces me incomodaba un poco sus demostraciones de afecto pero tal vez él era muy intenso y yo debía acostumbrarme, decidí que debía enfrentar a Evan de una vez, claro que necesitaba ese dinero lo más pronto posible y ahora que lo vería más seguido sería mucho más fácil, tomé mi teléfono y por primera vez le marqué, mi corazón estaba latiendo muy rápido con cada timbre hasta que finalmente escuché su varonil voz.
- Hola!-me quedé muda por unos segundos y no sé por qué- hola?!- tenía la garganta seca y un extraño nudo en el estómago- hola?
- Evan- dije muy bajo- soy Davana.
- Qué necesitas?- su tono cambio de inmediato y eso me molesto.
- Necesito dinero, liberalo- estaba enojada por la forma en que me hablaba.
- Cuánto?
- Mil dólares, me avisas en cuanto este- estaba dispuesta a colgar.
- Mil dólares?!?!, justo la cantidad que Kyle quedo a deber en.....- Evan se detuvo, se había dado cuenta para quién era ese dinero- no es mi asunto pero espero que cuando te cases con él no seas tan tonta de seguir pagando sus.....sus..... diversiones, tu mamá no quería que te quedarás en la ruina por eso nos casaron.
- No es tu problema - seguía molesta y el que mencionara la boda con Kyle no hizo más que agravar mi estado- no te metas, es mi dinero y si quiero dárselo al perro lo hago, deja de arruinar mi vida.
- No te preocupes, ya he arruinado muchas vidas, no te haré lo mismo- su tono se volvió melancólico, sentí feo cuando se refirió a si mismo de esa manera, quería decir algo, pero...- te aviso en cuanto este- y sin más colgó.
Me quedé pensando por unos minutos que tan difícil habrá sido para él saber que sus padres no lo querían, tener que esforzarse más para poder obtener algo o estar solo cuando necesitaba un consejo o un abrazo, en ese sentido yo lo entendía, así fueron estos últimos años de mi vida y por un momento desee poder abrazarlo, por qué?, no lo sé.