Prefacio
Cuando un genio muere
Cuando eres niño y te preguntan, ¿Qué quieres ser de grande? Uno siempre responde pensando de forma vaga objetivos vasados en superhéroes de la televisión. Cuando decidí ser científico lo hice con la plena idea de ayudar a salvar personas, vacunas, medicinas, encontrar la cura para enfermedades incurables. ¿La razón? Desde muy pequeño se me demostró que no hay curas y los salvadores totales llegan con un último suspiro. Vi a mi madre ser una mujer rellenita a ser un esqueleto sobre la cama. El cáncer me la arrebato, la vi sufrir y rendirse para luego volver con más fuerza, una guerrera total que perdió una batalla no había mucho que hacer cuando sus huesos eran los que estaban en el campo.
Bien podría haber escogido la carrera de doctor como decía mi abuela ¿Qué podría hacer?, detectarlo a tiempo, eso se me hace una idea absurda, pero ¿Qué pasa cuando hay tiempo, pero no posibilidades? Debe haber soluciones que llegan de determinadas mentes que quieren un cambio, fue cuando mis ojos se posaron en la carrera de mi padre. Y lo logré, me llena de orgullo decir que el cáncer ya no es un problema grave, las familias pueden disfrutar de sus seres queridos.
Seguir pasos de mi padre que es uno de los más grandes científicos de la historia y que por lo que veo mi hija Merlín superara, mis niños. Cachorros que recogí de la calle como solemos bromear. Merlín es mi hija genética, sin embargo, sé que decírselo a mi padre generara un odio contra ella al ser hija de la mujer que casi logra alejarme de este mundo. Entiendo por qué me abandono, prefirió alejar a mi hija de mi padre. Sin embargo, años después por ironías de la vida me la encuentre vendiendo chicles y luego la carta donde me confesaba todo así que se volvió mi misión tener a mi hija junto a mí, luego llego Tonner un niño enfermizo abandonado en el hospital.
Seguir sus pasos fue maravilloso, conviví con el padre ausente entendiéndolo, sin embargo, también conocí la ambición. Los seres humanos aún no estamos listos, es un mantra que me repito constantemente y que se lo hago saber a mi hija. Toma todo de mí hacer que ella no se ensucie las manos, debe mantener el sueño vivo, es lo que a mí me mantienen en este lugar, me di cuenta de lo que pasaba demasiado tarde. Y Es mi conclusión, de nuevo cuando observo la información que él me entrega. Marcos fascinado “Proyecto Fuerza”. Releo de forma rápida las hojas, chicos desapareciendo y apareciendo en otros lados, sin memorias, con puntos específicos que ahora sé si veo donde desaparecieron y volvieron, aunque él parece más enfocado en la anomalía de los hechos, sé que suena fascinante, pero no lo es, es horrible.
Alguna persona les vendió esto. Estos chicos pronto estarán ocupando algunos cuartos de este edificio, siendo examinados hasta torturados y no lo creo correcto, ¿Qué puedo decir?, ¿He visto de lo que son capaces?, mi padre me creyó preparado, ya que ocuparé su sitio en la empresa que el fundo. Sin embargo, tengo un plan de escape para hoy mismo y no sé si contárselo a mi mejor amigo cuando veo ese mismo brillo ambicioso que vi en mi padre cuando el proyecto “Cíborg” logro ser completado. Mi hijo al borde de la muerte se está adaptando a su nuevo cuerpo, he estado anotando en mis bitácoras supuestas fallas y finjo desesperación, aunque no tengo que fingir si no me doy prisa.
—Quieren examinar a mi hijo —confieso esperando alguna reacción que me indique que mi amigo sigue ahí
—Es por la ciencia —es lo único que dice encogiéndose de hombros, no digo nada y le entrego el folder para darme vuelta
Debo seguir con mi plan, debe ser perfecto para que al menos mis hijos salgan de aquí. Uno debe ser la carnada y estoy listo para enfrentar a mi padre. Camino hasta el pasillo donde esta Tonner, he hecho algunas imperfecciones adrede, nadie debe saber que ya sirve. Me encuentro a mi padre dentro. Un hombre que se ejercita de unos centímetros más bajo mi estatura de 1.80, tengo el mismo color de cabello miel, piel clara y ancho de la espalda. En su uniforme trae las medallas que ha ganado y que el ejército le ha brindado gracias a su apoyo.
—Podría ayudarte —quita la mirada de mi hijo para escanearme, debo de verme patético
—Hemos estado trabajando en una pieza con Merlín, debe funcionar —paso mis manos por mi rostro
—¿Estás seguro? —parece genuinamente preocupado, claro esto significa dinero perdido
—Espero, tengo 24 horas —murmuro en voz baja —O mi hijo muere —observo su cuerpo, sé que me escucha y sabe lo que hago
—Lo lograrás —se acerca para darme un abrazo y un apretón en el hombro
Observo a mi pequeño, su cuerpo está adherido a piezas de acero inoxidable, me encargue de que fuera lo más parecido a un humano, quiero que lleve la vida más normal que pueda. La puerta es de nuevo abierta, Merlín aparece. Lo que supuestamente me unió a mi padre lo hizo con mi hija, debo sacarla estoy comenzando a ver el cambio.
—Nos iremos hoy por la noche he programado un apagón en la ciudad —anuncia sorprendiéndome
Observo a mi hija que me sonríe, ella pisara a su abuelo sin contemplación, me acerco a ella de manera lenta. Debemos fingir la muerte de su hermano, lo que provocará el apagón. Salimos para dirigirnos al dormitorio, cenamos. Observo su cabello n***o y esos ojos vivaces que se parecen a su madre, ¿Este es el momento de confesión? ¿Debo callar? Si se lo digo no cambiaría nada. Independientemente de si compartimos gen o si no, sigue siendo mi hija igual que Tonner.
Entro al baño y me miro al espejo, Lex has logrado grandes descubrimientos que hoy van a morir contigo. Observo los mismos ojos verdes que mi difunta madre me heredo, mi cabello color miel y mi piel canela. Recuerdo sus últimas palabras” Quien protegerá a mi pequeño”,
—Las grandes mentes tienen finales catastróficos —murmuro las mismas palabras que le cite, su sonrisa era tierna, sin embargo, su mirada estaba llena de terror y entiendo la razón
Me doy un baño y salgo para cambiarme y salir. Merlín ya se encuentra esperándome, jalo de ella antes que salga. La estrecho con fuerza entre mis brazos y me lleno del aroma de mi niña.
—No dejes que la oscuridad gane cariño, siempre usa tu don para el bien —murmuro, ella me abraza con fuerza como respuesta
—Tengo miedo —susurra apenas
—Nos veremos en el mismo sitio, si no llego sigan su camino —me alejo para verla a los ojos —Promételo Merlín, no confíen en nadie —demando colocando nuestras frentes juntas
—Lo prometo Padre —su respuesta me tranquiliza
Salimos con nuestras batas hasta donde esta Tonner, la supuesta pieza esta casi lista, enciendo la luz y me acerco a él, sé que nos escucha, pero no puede moverse ni hablar. Coloco las piezas faltantes y hago los ajustes pertinentes y es como abre los ojos, nos escanea atento hasta que se da cuenta de que somos nosotros. Sonríe y se levanta, parece que su cuerpo es ligero se ha adaptado con facilidad.
—Hemos creado vida —murmura Merlín con una sonrisa, colocamos el cebo y al colocar la pieza el apagón llega
Es hora de movernos, ellos salen por la ventana mientras me movilizo cuando la alarma contra incendios se prende, corro por los pasillos hasta llegar al área de proyectos, voy directo a donde están los míos encontrándolos tal como los deje. Dejo caer la gaveta rompiendo todo, lo que genera que la alarma toxicológica inicie, salgo antes de que me quede dentro. No podrán hacer nada con mis reportes, me encargué de que solo yo supiera dl contenido eso me mantendría seguro. Corro por el pasillo para llegar a la salida. Ya deben saber lo que he hecho esquivo algunos de los que se cruzan a mi paso. Coloco mi guante y presiono el primer botón. El tanque “Libertad” se ha liberado, segundo botón, satélite Loucan apagado.
—¿Qué es lo que haces? —grita Marcos acercándose, el caos apenas comienza
—No usarán lo que cree, para actos egoístas como tu proyecto —grito con toda mi amargura, por su expresión fue un golpe
Botón tres, Cheos. Botón cuatro, Selene. La tecnología del edificio comienza a apagarse. Salgo del edificio, todos están preocupados por sus proyectos. Botón 5, Tonner, activación completa. No podrán encontrarte. Sigo caminando por el bosque. La única forma de detener mis proyectos es destruyéndolos.
El tanque era para el ejército una nueva tecnología que imagine tontamente que podría llevarnos a la paz hace años, Loucan es un dispositivo de rastreo militar, cuando dicen que el gobierno te observa lo dicen de verdad, lo hacen. Me detengo entre los árboles y comienzo a destrozar el guante. Cheos es una asistente flotante su alcance es total, Selene es seguridad avanzada manejo de armas y despliegue de robots. ¿Cómo hice todo eso? Sigo mi camino cuando escucho pasos debo llegar a la carretera ahí deje un auto. Bajo la colina corriendo, puedo ver a mis hijos escondidos entre los árboles, decido desviar mi camino para ir directo al auto. En cuanto llego subo para arrancar, me pongo alerta cuando la puerta copiloto se abre, me encuentro a la esposa de Marcos.
—Debes irte —intento sacarla, pero se niega
—Él ya no es mi esposo —está al punto del llanto, gruño ella solo será un estorbo no puedo cuidarme yo más tampoco a alguien más
Cuando mi mirada va frente me encuentro con Marcos que tienen lágrimas en los ojos, luego veo a mi padre que está furioso retrocedo de forma rápida para irme por la carretera, sé que no me dejaran vivo. Arranco esto es una señal para que mis hijos corran, Melisa se coloca el cinturón mientras yo llamo a Marcos que me contesta al primer pitido.
—Tu esposa se coló, la dejaré —no termino la frase
—Dicen que me fueron infiel —dice con molestia
—Él ya no es mi esposo —vuelve a decir Melisa —Prefiero morir —señala
—¿Si sabes lo que hacen Marcos? —no quiero que piense eso de mi
—No sé qué creer —dice con voz quebrada
Voy a hablar contestarle cuando Melisa grita cuidado, me doy cuenta de que hay una línea militar que me intercepta, doy vuelta de forma brusca evitando chocar, puedo escuchar la voz de Marcos llamarnos
Bajamos por la colina mientras intento volver a tener el control del auto. Choco con un árbol, el impacto hace que mis huesos crujan y el aire falte, hay un pitido que me ensordece.
—¡Lex! —logro escuchar a lo lejos, pero no tengo fuerzas un intenso dolor me envuelve
—¿Lex? —escucho la voz de Melisa —Ha muerto —parece que busca algo hasta que logro reaccionar veo a mis hijos luego vuelvo a ella que ve asustada el retrovisor
Vienen a rematar, vuelvo la vista a mis hijos que están renuentes a irse, pero lo hacen. Sonrió. Es hora de que sigan su camino. Busco el teléfono hasta encontrarlo, la llamada aún sigue cuando veo los segunderos seguir.
—¿Lex? —parece que el niño llorón ha regresado
—Cuando muere un genio no es el día de su oficial muerte. Es cuando olvida la razón de sus sueños cuando la ambición juega un papel más importante en tu vida, cuídate, querido amigo, y si aún estás ahí a mis niños —cuelgo y observó que tengo una rama cruzando mi abdomen, el dolor hace imposible que me mueva
Observo el fuego que inicia envolviendo el auto haciendo toser el humo a Melisa, la escaneo hay sangre, pero no sé si es mía o suya, esto parece sacado de una novela, el titular de los periódicos ya sé lo que dirán.
—Autodestrucción —murmuro, Melisa se queda agarrando mi mano dando un apretón antes de la explosión lejana y la nuestra