—¿Qué piensas hacer?— cuestiona Violeta con la cabeza reposando sobre el pecho desnudo de Rodrigo.
—Todavia no lo sé — responde acariciando el brazo de la rubia —han pasado tantos años, que dudo podamos hallar pruebas en su contra; además, fue catalogado como un accidente, pero juro que buscaré la manera de hacerla pagar...
Una vez vestidos, la pareja sale de la habitación, listos para irse a la empresa.
—Buenos días, ¿ustedes no van a desayunar?— pregunta Diego con picardía —después de hacer ejercicios hay que alimentarse bien— agrega el menor sonriendo con malicia, al ver que los colores han subido al rostro de su hermana y el hombre no puede evitar una carcajada y abrazar a su mujer, que aprovecha para esconder el rostro en su pecho.
—Tienes toda la razón cuñado— responde él complac
