Enamorada de mi mejor amigo

Capítulo 1. NOTA* PARA PODER ENTENDER ESTA HISTORIA DEBES LEER EL PRIMER LIBRO: CASADA CON MI MEJOR AMIGO. — Amalia y Lucas— Tras dos años de la muerte de la madre de Lucas su actitud ha cambiado, se ha vuelto un poco más distante, acción que Amalia no le molesta, ya que con sus hijos y esposa es el hombre incondicional, sin embargo, el dolor que lleva a rastras lo invade y no le permite sé completamente feliz, siente que le falta una gran parte de su vida, sus padres a pesar de sus errores lo amaban y dieron todo para que él y sus hijos fueran felices hasta últimas instancias, mientras que Amalia es la mujer más dichosa, es su apoyo incondicional, la madre abnegada que siempre quiso ser y la estabilidad de su hogar, la fortaleza de Lucas haciendo que todo marche con normalidad convirtiéndose en la familia amorosa y unida que siempre quisieron ser, Amalia ha cumplido sus sueños y junto a sus mejores amigos Mateo y Melanie abrieron su propia empresa de diseño de interiores que tanto soñó, se lleva a su pequeña Estrella de tres años al trabajo como hacia su madre está acostumbrada a ella, sus hijos son su adoración, Dylan se marcha con Lucas al Colegio por la mañana y regresa en la tarde tras pasar sus clases de idiomas y hacer deporte que practica con su padre quién llega para jugar fútbol con él, desde hace un año ambos han pensado tener otro bebé, pero las cosas no han estado fácil, la muerte de la muerte de Lucas y el trabajo los aleja de esa posibilidad que posponen para un año más, Lucas trabaja en las empresas de su padre, lo tienen todo bajo control, es un gran empresario como su padre quería, le enseñó todo lo que sabía antes de morir dejando en buenas manos a su hijo. Rodeados de una gran familia y amigos incondicionales, no podría faltarles nada. — Buenos días mi amor. — Lucas besa en el cuello Amalia quien lo abraza sin querer levantarse de la cama. — Solo 5 minutos más por favor. — Hoy quiero salir contigo, por favor deja a los niños con Mary y colócate ese vestido que te regale de aniversario, no vendremos está noche. — ¿Qué planeas? — Le dice abrazada a su fuerte cuerpo que la protege. — Planeo hacerte mía y pasar la noche solos tú y yo. — Cómo órdenes mi amor. Están tan consumiendo en sus caricias que el sonido de la puerta al ser tocada no puede sé más inoportuno, sin embargo, ellos dejarían todo para atender a la pequeña ternurista que espera acurrucarse en la cama con sus papis. — ¿Mami? ¿Papi? Lucas la escucha mientras tiene a Amalia gimiendo en la cama. — Estrella, vamos vístete. — Le dice Lucas corriendo a buscar su toalla para cubrirse. Amalia se cambia con gran premura y se limpia antes de tocar a su bebé, abre la puerta y la toma en sus brazos, es consentida y ama levantarse e ir a la cama con sus papás antes de que Lucas corra a la oficina. — Buenos días mi princesa adorada. — Le dice Amalia dándole un beso en la frente. — Buenos días, mami, papiiiiii…— La luz de sus ojos, su padre, su adoración. — Buenos días mi princesa. — La sostiene entre sus brazos y le hace cosquillas, la besa en la frente llevándola a la cama donde se envuelven los tres. Cinco minutos de descanso entre juegos los lleva a la ducha, Mary viene por Estrella y la lleva a la ducha mientras Dylan se cambia en su habitación, Amalia y Lucas toman una ducha muy calurosa, la familia se reúne para desayunar entre risas y halagos a Dylan quien está mañana se ve más guapo de lo que acostumbra y eso se debe a que él se esfuerza en que su mejor amiga sea igual que su madre, quiere una relación como la de ellos cuando sea mayor, admira a sus padres y ella amor que ellos reflejan, todos se disponen a marcharse a sus actividades. — Cuídate mi amor, te amo, si necesitas algo no dudes en llamarme, ¿De acuerdo? — Amalia besa a Dylan en la frente y le da un fuerte abrazo. — Gracias mamá, te amo. — Yo a ti cariño, un beso al hermano mayor. — Estrella sonríe y le da un beso y un abrazo a su hermano. — Te amo hermanito. — La pequeña Estrella ama a su hermano de forma incondicional. — Yo a ti pequeña. — Un amor que fortalece el corazón de Amalia, sabe que está haciendo un buen trabajo. — Ven aquí. — Lucas besa a su esposa en los labios, ese beso sigue transmitiendo cada día esa electricidad que les impide poder alejarse, sus corazones laten como el instante en que se besaron por primera vez, esa noche aunque él la confundió con Leticia él sintió exactamente lo que ella sintió y mucho más, desde ese momento los sentimientos por Amalia han crecido sin detenerse y desea que esto continúe así.— Te amo tanto Amalia. — Yo a ti Lucas. Se despiden como acostumbran todas las mañana, Amalia conduce tras de Lucas hasta el primer semáforo dónde cada uno toma su camino, por alguna razón Amalia ha sentido la necesidad de estar abrazada a Lucas hoy y es que siente una extraña sensación como ninguna antes, como hace mucho no la sentía, conduce hasta la empresa donde se reúne con Melanie quién le da de comer a Hannah. — Buenos días, ¿Dónde está la sobrina más hermosa que tengo? — Dice con una gran sonrisa a Hannah. — Tiaaaa Amalia. — La pequeña la adora, es su tía favorita a pesar de que Mateo tiene dos hermanas. — Llegando un poco tarde, me imagino que tu esposo no te dejo salir de la cama, ven con la tía mi Estrella adorada. —Dice Melanie quién es feliz estando en compañía de Estrella y Amalia, sin tan unidas que parecen hermanas. — No lo sé, está mañana se me ha hecho difícil salir de la cama, siento algo extraño en mi pecho, es como un mal presentimiento, algo que me incomoda. — ¿Qué puede ser? ¿Qué te preocupa? No te había visto así desde lo de Leticia, amiga, eres feliz, tienes una gran hogar una hermosa familia y si se ponen en la tarea creo que podrán tener otro bebé y es lo que ambos quieren, no pienses en cosas malas ahora, solo relájate y disfruta, que la vida te sonríe, yo sé que la felicidad jamás es completa, pero en este caso tú lo tienes todo. — Melanie lleva a las niñas a su sala de juegos. — Tienes razón, me enfocaré en esta noche, saldremos, esto me emociona, ya que hace mucho no lo hace la y sé que él me quiere impresionar, ¿Mateo? — Eso sonríe y revisa los planos de este proyecto, Mateo está con la constructora, el hijo del dueño quiere reunirse con nosotros a final del mes y quedé en que tú irías, ya que nosotros estaremos muy metidos en el proyecto, seque lo podrás manejar como siempre lo haces. — Siempre es igual, quieren una reunión para saber los detalles y dar su opinión constructiva y destructiva, algo que puedo fácilmente manejar. — No me queda dudas. Ambas trabajan en su nuevo proyecto mientras cuidan de las niñas, Mateo llega para una reunión sobre el tema y las nuevas presentaciones, la mañana se va como llega y todos se reúnen con Lucas para almorzar como acostumbran, tras una emotiva despedida vuelven a sus labores, está vez Lucas está en una gran junta, un proyecto nuevo se ejecuta en su empresa, ambos están es la cúspide del éxito, tras una llamada de un número desconocido Lucas responde sin problemas pensando que quizás es un socio. — Buenos días. — ¿Lucas? — La voz tras la llamada que se ejecuta le deja un mal sabor. — Leticia, ¿Qué quieres? — Lo sé, lo sé, sé que no quieres verme, pero salí en libertad, estoy mejor y solo quería que supieras que este es mi número, quiero pedirte perdón por todo lo que te hice, Lucas, estoy tan arrepentida que no quería marcharme sin antes despedirme de ti, pedirte disculpas. — No me llames Leticia, no sé cómo encontraste mi número, pero no, vuelvas a llamarme, ¿Te queda claro? No me interesan tus disculpas, utiliza tu salida para ser feliz y una vida lejos de mí. — Lo lamento Lucas, sé que me odias yo espero que algún día puedas perdonarme. — No te odió, odiarte solo contaminaría mi vida, simplemente has tu vida por qué ya en la mía no te quiero, no existe, no vuelvas a llamarme. Lucas cuelga dejando a Leticia en gran agonía, tras su encarcelamiento y su rehabilitación solo pensaba en Lucas y lo feliz que él la hacía, se odia por todo el daño que le he acusado y que la atormenta, día y noche, de camino a su casa ella ve a lo lejos la mansión Ferrer que permanece intacta llevando en ella la carga familiar y los últimos recuerdos de felicidad que en ella habita, Lucas la mantiene, pero no la visita desde hace mucho, tras todo el tormento que paso Leticia siente que le debe mucho a Lucas, no tiene cabida en este mundo y no encuentra su lugar siendo una mujer nueva y renovada, la vida le ha dado una nueva oportunidad de empezar de cero y quiere hacerlo como es debido, su padre le envía dinero y ayuda más no se hacen cargo de ella, ya que no aprueban los actos que su hija hizo y el daño que ocasionó a tanta gente que ahora simplemente es feliz y viven su vida como lo desea, entre ellos pandora quien se volvió a enamorar, por medio de su carrera y la ayuda de su padre encuentra una pequeña clínica donde empieza a ejercer su carrera mientras que esa llamada deja a Lucas en una gran angustia, guarda el número de Leticia por si en algún momento se le ocurre llamar, debe decirle a Amalia sobre esto, ellos no se guardan secretos y siempre están en completa comunicación, se prepara para una gran noche con su esposa y no quiere arruinar lo que preparo para ella, al anochecer toma su chaqueta y sale para ponerse en camino a buscar Amalia en su casa quién se prepara dejando todo organizado tras buscar a Dylan al colegio y ayudarlo hacer sus tareas, sube a su habitación para cambiarse, luce tan hermosa como siempre, ahora brilla más y su belleza Natura cautiva al quién la conoce, sin embargo, ella solo tiene ojos para Lucas el amor de su vida, quién conduce por la carretera de vuelta a casa, se siente un poco incómodo y los recuerdos de lo que vivió con Leticia lo molestan, su pasado vuelve y lo menos que quiere es dañar su relación con Amalia a quien ama con locura, su temor le juega una mala pasada, siente un poco de dolor en el pecho nublado su vista mientras un camión de cargar va sin frenos en su dirección voltea el coche de Lucas que da vueltas en el aire, cayendo al fin en un aún lado de la camioneta, el conductor del camión pierde la vida tras salir disparado por el vidrio mientras Lucas sé debate entre la vida y la muerte, varios coches que llegan llaman a emergencias y lo trasladan a emergencias, una sensación de dolor invade el corazón de Amalia quien se sienta en la cama tratando de calmarse cuando una llamada en su celular la deja en desesperación. — ¿Bueno? — Señora Ferrer, la estamos llamando de la clínica Santander para informarle que su esposo fue ingresado de emergencia tras un grave aciden automovilístico. — ¿Qué dice? No, no, no, debe haber un error, mi esposo, él…— Amalia llora. — Señor, lo sentimos, ¿Usted es la señora Amalia Roberts? — Dios, no, no, mi Lucas, no…NOOOOOOOOOOOO, LUCAAAAS, NOOO.