Noah se quedó perplejo al conocer la realidad detrás del embarazo. Mientras Karina le narraba lo sucedido, ella no culpa a Kevin y eso deja en shock a Noah, por lo ingenua que es la chica y de que no piensa sacar provecho de lo sucedido. —No, yo no lo hice, él llegó en mal estado a mi apartamento, todo pasó tan rápido que no me dio tiempo de pensar en nada. —¡Dios santo! ¿Entonces ese tipo te violo? Es un desgraciado, aunque pierda se merece, aunque sea un golpe certero. —No, tampoco eso, porque yo quería hacerlo también. No es como tú te lo imaginas, a mí me gusta él, pero ya renuncié. —Qué embrollo. ¿Entonces no quieres que él se entere? —No… él está a punto de casarse con otra persona, no tiene caso hacerle las cosas más difíciles. —¡Hay Dios! No me digas que estás hablando de Kev

