Emma durante los días antes de la boda, intentó por todos los medios no toparse con Evender, pero era imposible, parecía que la diosa luna, hiciera lo que hiciera, lo cruzaba en todos lados, desde lo ocurrido procuraba no estar sola en sitios públicos, como el salón o el patio del castillo. Eveder la buscaba trataba de tener un acercamiento sin éxito, comenzaba a enfurecerse cuando la veía huir de él sin darle oportunidad de hablar. Sara bastante observadora, se fijó en cómo desde que habían llegado aquellos tres guerreros, Evender, Bruno y Leno, las mujeres del castillo se había revolucionado, todas intentaban ser ellas las que calentaran sus camas, e incluso sus primas habían sido vistas tonteando con un par de guerreros Browne. Marie, por su parte y a pesar de discutir en todo moment

