|Sonido de platos lavándose y agua corriendo| «Como la extraño, la casa se siente tan vacía hasta sin sus peleas con el señor Ismael o con sus hermanos... ¿Qué estará haciendo la señorita Sally? todo es tan diferente sin ella aquí» Pensó Rita en la inmensa cocina de mármol blanco de la mansión de los Habitt, con sus manos moviéndose mecánicamente sobre los platos en donde ella desayunó mientras su mente evocaba a Saleema. El silencio de la casa solo era interrumpido por el suave tintineo de la vajilla y el murmullo del agua. Sin embargo, mientras ella estaba perdida en sus recuerdos, la atmósfera cambió abruptamente ya que sintió una presencia amenazante detrás de ella, invadiendo su espacio personal. Un pene duro presionó contra sus glúteos, violando su intimidad. Su corazón dio un vue

