— No es lo que debes angelito... Es lo que quieres — suelta sentado a mi lado en una plaza de la que nunca había estado. La pregunta que me vengo haciendo en todo el camino, ahora Álvaro me la hace con mayor tenacidad. — No sé... Tengo claro lo que no quiero hacer, pero lo que quiero no lo sé. — estoy tan abatida que el poco razonamiento que me quedaba ya lo he perdido. — Bueno algo más sencillo — dijo mirándome — Dime que es lo no quieres hacer y después de eso vemos tus opciones. El adoptando lo practico en todo, ya que se ha quedado esperando mis respuestas. Luego de varios segundos, respondo — No quiero verlos hoy, no quiero hablarles, no quiero volver a la casa y más que nada no quiero saber de ellos, por lo menos por un tiempo. Alvaro se queda sopesando mis palabras al igu

