Había pasado varios días de mi visita a Ana. Estaba bostezando por vigésima vez en el mostrador. Este día no había ido mucha clientela, por lo que estaba aburrida. Ya había repasado todo. Los pisos. Los muebles. Los adornitos de mierda Perdon digo los bellos adornitos que me tomo una hora . Y estaba aburrida , Gustavo había salido a hacer trámites. Así que tampoco podía poner mi plan de conquista en marcha. Le escribí a Nacho. "¡Marido!" Al cabo de unos minutos me respondió. "Dime marido" Sonreí tontamente "¿Esa palabra existe?" "No, pero eres mi marido" "bueno marido de Marida ¿No estabas en clases?" "Si pero estamos en la sección de práctica y al parecer entendieron ls clases porque están todos concrntrados haciendo los ejercicios" "Jajaja, igual que yo cuando te acosaba"

