Era la segunda vez que los interrumpían, era una señal de los cielo diría Sebastian si estuviera consciente de que aquella mujer era capaz de hacerlo perderse en su mundo de locuras.
Abrió la puerta era el servicio del restaurante su pedido ya estaba listo. El dio las gracias y cuando cerro vio que Samantha ya no estaba allí. Oyó el cuarto de baño, ella se estaba bañando. Así que las ideas que se le habian metido en su cabeza por ahora no pensaba hacerlas realidad.
-Cariño, servicio de restaurante. No tardes mucho. A los cinco minutos Samantha ya estaba con su bata de baño, afuera.
-Vamos ve a bañarte yo te espero para que comamos los dos juntos,- dio ella con cierta tension.
-Ok, no tardo.
Ella estaba nerviosa pero a la vez ansiosa de estar en sus brazos. Pero de pronto sintió miedo, si él le hacia el amor y luego el se marchara. Él no era Juan. No quería recordarlo pero...la invadió el miedo de ser abandonada que ...
-¿Pasa lago cariño?, pregunto Sebastian.
-No nada te estaba esperando para comer.
-Si pero te he estado hablando y nuevamente te perdiste en tus pensamientos. Dime en quien o que piensas.
-En nada ni nadie. Solo te estaba esperando.
-Muy bien entonces ven vamos a comer.
Sebastian sabia que ella aun no estaba preparada para dar aquel paso aunque su cuerpo le decía otra cosa. No pensaba seguir seduciéndola. Era algo peligroso para los dos y no quería arrepentirse de nada y mucho menos hacer que ella se arrepienta.
-Tú crees que Cesar y Victoria vengan para acá luego de venir de la piscina o estarán roncando aun.
-Jajaja yo creo que lo mas seguro es que pasen directo a arreglarse sabes como es mi madre con respecto a los compromisos. Ya luego irán a cenar al restaurante.
-Los pobres, por mas que peleen no pueden vivir uno lejos del otro.
-Si eso le llamo amor verdadero.
-¿Y lo de nosotros como le puedes llamar?
Ella bajo la cabeza, quería decir que lo amaba. Pero tenia miedo. No quería pensar en eso pero...
-Cariño, quiero que sepas algo y no quiero que lo vallas a tomar mal. Desde un principio que nos vimos he sabido que algo te ha estado pasando una vez le pregunte a Janet sobre ti. Pero no me quiso decir nada. ¿Recuerdas el día que Janet se quedo contigo?, bueno al día siguiente llego muy enojada, diciendo que eras una chica malcriada que si querías morirte sola lo hicieras pero que ella no seria testigo de eso. Yo, quise averiguar algo mas pero ella fue muy terca peor que tú y me dijo. Pregúntale a ella si quieres saber. Yo no soy una delatora. Así que deduje algo.
¿Que dedujiste?
-Que habías cometido un error y estabas embarazada? Cosa que después, borre de mi mente, no te creía capaz de ser tan tonta. Pero me puse a pensar luego. ¿Se enamoro? .- Él estaba siendo directo eso era algo que no le podía criticar a ninguna mujer. En este mundo existen los machistas que les gusta burlarse de las mujeres inocentes, y ella era una de esas. ¿Me equivoco, Sam? Pero antes de que me contestes, como te dije no quiero que lo tomes a mal. Y si estas segura de querer hablar del asunto.
Samantha lo miro directo a los ojos y unas lagrimas brotaron de sus ojos. Él quiso estar cerca de ella y poder limpiarlas pero necesitaba que ella tuviera el valor de hablar. No quería que ella diera un paso sin estar completamente segura de lo que iba a pasar.
Ella respiro hondo y sin dejar de llorar lo miro, se lleno de fuerzas para hablar el merecía que ella le contara todo, no quería comenzar aquella relación bajo mentiras y dudas.
-Janet tenia razón, soy una cobarde por que estaba tirada al abandono por tonta. Aquel día cuando me oíste hablar con Janet era de Juan de quien yo estaba hablando. Sin querer creo que me habia enamorado de él, tenerlo en mi casa se hacia verlo de una manera muy diferente, recibía de parte de el muchas atenciones y me confundió. Pero cuando tu te fuiste, me olvide de lo que él me hacia sentir. Y mis pensamientos y mi dolor se acentuó cuando te marchaste, lloraba todos los días aferrada a que regresaras pronto. Estaba muy triste, no quería ni comer, me la pasaba escribiendo cartas y nunca me atreví a enviártelas por que sin querer él leyó una de esas. Me dijo que ningún hombre merecía tanto amor. De allí en adelante él empiezo a cambiar mi vida, me hacia reír mucho, salíamos a montar a cabalo, busco las mil y una manera de que yo me olvidara de ti. Y así sucedió, por un tiempo. Pero luego el se marcho a estudiar en la Universidad, iba y venia los fines de semana, me llevaba al cine a comer fuera. En fin hasta que una vez llego con una novia, la presento a mis padres como su novia formal. Eso a mi me pego mucho pero no le di importancia mi padre decía que Juan era un hombre que no tomaba la vida con seriedad que le daba meses para verlo con otra chica. Él no dejaba de cuidarme y de tener atenciones conmigo. Hasta que duro unos cuantos años fuera, cuando regreso me vio hecha toda una mujer. Y yo sentí, que mi vida habia vuelto a renacer, aquello que él habia sembrado. Pero cuando llegue al rancho me di cuenta que habia regresado con la misma mujer con la que se habia ido años atrás. -Samantha respiro profundo necesitaba recuperar fuerzas mientras mas recordaba aquellos momentos mas dolor producía aquello.
-Sí, no quieres continuar déjalo así, Sam. Tú no estas obligada a contarme todo de tu vida.
-Sí, Sebastian quiero estar segura de muchas cosas y lo que menos deseo en este momento es que hallan dudas entre tu y yo.
-Pero, nuestros pasados, son eso un pasado. Nosotros somos un futuro.
-Eso es lo que mas deseo Sebastian, pero así como tú me has dicho que algo me sucede también necesitas que yo este segura ¿verdad?
Él la miro y asintio con los ojos, así que dejo que ella continuara.
-Cuando regrese al rancho estaba Melissa charlando con mis padres. La salude y subí a mi habitacion no quería verlos solo deseaba que se fueran y desde ese día mi agonía empezó. Por mas que tratara de no cruzarmelos, Juan estaba en todas partes, no habia lugar en el rancho que no me encontrara. Un ida decidí salir con David lo recuerdas el hijo de la señora Ines. Para tratar de sacármelo de la cabeza pero fue imposible. Hasta me regaño por que ese día David quiso propasarse conmigo. Bueno pasaron los días y ya solo quedaban unos días para que se marcharan pero... Samantha sintió que su corazón iba a estallar la rabia la invadía.
-Olvídalo Sam. Ya no te castigues mas deja eso ya.
-¡No!, quiero sacar esto que me esta matando por dentro. Cometí un error en mi vida que me esta consumiendo, ¿no lo ves?
Sebastian aun no se daba de gran error que ella habia cometido o no quería aceptarlo, por haberse marchado y no haber luchado por su amor con aquel supuesto amor, que ella creía que sentía.
-Una noche estaba en mi cuarto esperando dormirme y no podía conciliar el sueño, así que decidí ir a darme un baño al estanque cuando me lo encontré yo ya estaba dándome un baño cuando me di cuenta que habia alguien entre los arbusto y era él, estaba borracho se habia peleado con Melissa y habian decidido separarse, cosa que yo como una estúpida quise aprovechar y... me deje envolver por sus palabras y lo seduje también y...creí en todo lo que me decía... me empezó a besar y a tocar y...
-Te entregaste a él,- Sebastian sintió que su corazón iba a estar de rabia. No por que ella se habia entregado aun hombre que ella creía que amaba lo habia hecho por amor. Pero Juan estaba borracho como le hizo eso a Samantha. Era su primera vez.
-Sí, caí como una tonta, pensé que él, seria el único hombre al que yo amaría. Luego que me hizo el amor me dijo que me marchara a casa que luego hablaríamos pero nada de eso paso. Al día siguiente se marcho y me dejo sola sin ninguna explicación. No sabes cuanto lo odio. Jamas pensé que odiaría a alguien como odio a Juan Andrade. Ella se puso las manos en la cara quería gritar y de pronto tomo uno de los cojines que estaban a su lado y empezó a gritar con el en la cara, se golpeaba queriendo desahogarse. Hasta que Sebastian la tomo de los brazos y la apretó contra su pecho.
-Vamos grita todo lo que quieras. Golpeame si quieres. Yo también tengo la culpa por haberte déjalo sola.
-Si, tu me abandonaste, por tu culpa me deje llevar por algo que no era real. Por que me dejaste si yo te amaba era a ti.Por que? ¿porque fui tan estúpida y no supe retenerte cuando debí hacerlo?,- Samantha golpeo su pecho varias veces hasta que él, la separo y la beso con tanta pasión.
-Te amo Samantha Normat, y jamas te volveré a dejar sola te lo prometo. Nunca mas me separare de tu vida te lo juro. Perdóname por no haber luchado por tu amor. Perdóname por haber sido tan tonto en alejarme de tu vida. Te amo, mi amor. Te amo.- Él sintió que todas aquellas dudas habian desaparecido . Pero tenia miedo de que Samantha creyera que el era igual a los demás hombres y en especial a Juan. Él no se cansaba de besarla, hasta que la sujeto muy fuerte contra su pecho y le dijo:
-Sam, yo no soy Juan, ni tampoco igual a los demás hombres que se aprovechan de las mujeres y luego se marchan. Yo te amo, y sabes que lo he hecho toda mi vida.
-Pero me dejaste cuando mas te necesitaba. Igual que él.
-Yo no soy Juan, y yo no sabia que tú me amabas igual que yo. Me confundí Samantha al oírte decir que amabas a alguien mas. Eso me dolió mucho que preferí huir, antes de verte en brazos de otro hombre. Nunca tuve el valor de decírtelo y ese fue mi error. Perdóname.
-Tengo miedo Sebastian, tengo mucho miedo de que nuestras vidas sean un error. No se si pueda perdonar a Juan y de perdonarme a mi misma por haber cometido el grabe error de haber seducido a un hombre por simple capricho. Hoy tengo mucha rabia y no se si esto dañaría algo entre los dos. Tengo miedo de no hacerte feliz como te lo mereces. Y si algo ha cambiado entre los dos.
-Todo a cambiado Sam, todo. Ahora estoy mas seguro de que la decision que tome ahora de pedirte que te casaras conmigo. Ahora se que siempre me has amado y que aun me amas. Y no voy a perderte de nuevo. Cometiste un error pero eso no quiere decir que nuestras vidas deban cambiar por eso. Olvídalo y ya. Yo jamas te recordaría eso. Y tú tampoco lo deverias de hacer. No pienses mas en él y empieza de nuevo pero esta vez conmigo a tú lado.
Samantha lo abrazo quería que todo aquello que estaba escuchando fuera la única verdad entre los dos. Pero no estaba segura si ella volvería a dudar de su verdadero amor. Aunque habia algo que si demostraba a quien amaba verdaderamente, pero ella no se atrevía a regresar, ¡no todavia!.