“Visité aquellas montañas en que tuviste tu primer enfrentamiento con una bestia, es un lugar con una vista impresionante y el clima es aún muy frío, no vine muy preparado para esto, estoy pasándola mal cada noche, pero sigo sobreviviendo. No quiero imaginar cómo pasaste tú todo ese tiempo en este sitio, desde la primera noche deseaba regresar a casa, pero si tú fuiste capaz de soportar esto lo haré yo también. Te extraño como nunca antes, desearía que jamás hubieras pasado por esto” Su letra era apenas legible, se había esforzado por escribir de manera clara pero seguramente las cosas no iban como él hubiera querido, y eso empezaba a preocuparme. Él no tenía que pasar por todo eso, tenía un hogar y una vida. Esa había sido la primera carta después de casi 2 semanas. “Descansé en un pue

