Simón.
Abro mis ojos y no puedo creer que el fin de semana en realidad, haya sucedido.
¿Alguna vez les pasó?
Es como cuando tenés un deja vu y no sabés si en realidad pasó, si es un recuerdo, o si tu mente te está jugando un mal truco.
En fin, me levanto, desayuno algo sencillo como siempre. Y arranco mi día.
Hoy entro a las 8am, asi que salgo de casa cuando el sol todavía no alumbra.
Recorro los pasillos de la oficina, prendo la computadora antes de hacerme un café, y escucho los zapatos retumbando.
Esa es mi señal. Comienzo a preparar su café y cuando llega a la cocina, sus brazos se enredan alrededor de mi espalda.
El calor de su cuerpo me toma por sorpresa. No pensé que fuera a hacer algo como esto en nuestro lugar de trabajo.
Me doy la vuelta para apartarme y cuando veo su
