Pude ver un destello de impresión en el rostro de Sasha. Definitivamente, no esperaba verme en la casa del detective, igualmente yo. Para ambas fue una total sorpresa.
Se hizo a un lado para poder entrar, parecíamos unas completas desconocidas que se cruzan miradas más no se dicen nada.
Senti mucha tensión.
—¿Que haces aqui?—me atrevi a preguntar, paseando la mirada al rostro inexpresivo del oficial.
Vaciló al responder, pude ver como exhalaba aire de su boca.
—Te lo iba a decir...
—¿Decirme que?
—Le conté absolutamente todo al detective. Lo sabe todo Maya.
Mi corazón palpita fuerte que percibo que en cualquier momento se va a salir.
—¿Que le dijiste?
—Todo—dice, mirando al policía.
Me paso las manos al rostro, me cuesta creerlo.
—Maya —habla el oficial con una voz potente. Le presto atención.
—¿Que sucedió ese día junto a la fuente?
La pregunta me toma por sorpresa, de tal manera que me desconcierta un poco.
—¡¿Perdón?!
—¿Que sucedió cuando estabas con Dante?
Le doy una mirada a Sasha, luego a Alexa. El oficial se toca la barba, espera que le responda.
—Bueno, ya se lo dije.
—Vuelvelo a decir...—me anima a hablar.
—Estábamos conversando en la fuente, luego dijo que alguien nos observaba. El fue a mirar, me quedé esperándolo. Apareció Mickey, se escuchó el disparo y pasó todo lo que sucedió.
El hombre sonrío de medio lado asintiendo.
—¿Esta segura que usted se quedó en la fuente?—le miro con confusión.
—¿Que trata de decir?
—¿Solo trato de decir que si usted recuerda a toda cabalidad que permaneció en la fuente o siguió a su marido?. Eso es todo.
Oh no, los flashback regresan... Revivo el momento. La fuente, Dante, una parte de mi quedándose, la otra siguiéndolo hasta el bosque.
Tiemblo... mi mente me lleva a varios portales de lo que pudieron ocurrir ese día.
—Tal vez se le olvidó. Así como olvidó que atacó a una compañera de clase—alzo mi cabeza, mi respiración es acelerada, centro mi vista en Sasha, se lo había contado.
—Oh, ¿va a negar que golpeó a Cristal Montgomery contra el espejo del baño?. Luego, alegó que no lo recordaba.
Mi mente entra en shock, me reubica en ese momento.
La frente le sangraba, Cristal lloraba con las rodillas pegadas al pecho. Sasha trataba de ayudarle. Me miraba con miedo, como si no pudiera creer lo que había hecho.
—Maya...¿que has hecho?—saltó sobre mi, sacudiendo mis hombros con fuerza. Le miré a los ojos.
—No lo sé, no me acuerdo.
Vuelvo en sí. Estoy llorando, me sujeto la cabeza como si fuera una demente.
—Señora Santana, ¿usted atacó a Dante?—ahora es más directo, me acusa y aún no puedo descifrar lo que realmente ocurrió.
—¡Nooo, no lo ataqué!—grito sollozando—.Pregúntenle a Mickey.
—Mickey no es un testigo confiable ya que estuvo en un psiquiátrico, por lo tanto, pierde credibilidad. Tal vez usted le convenció de que guardara silencio.
—¡Nooo, no hice nada de lo que usted dice!—estallo en llanto, mi rostro está completamente mojado.
—¿Por qué quiso deshacerse de él? ¿ por dinero?
—Noo, mi familia tiene dinero, no necesito el de él —informo desesperada. Miro a Sasha y Alexa, ambas no dicen nada.
El oficial busca una carpeta que dice: Familia Santana. De allí extrae unas hojas.
—Según este documento que nos proporcionó el banco de su padre: Están en quiebra. No tienen nada de dinero, están prácticamente en la calle señora Santana—me entrega la hoja, le echo un vistazo con atención. Efectivamente, estamos declarados en quiebra. Hay un depósito de una gran suma de dinero a una persona desconocida.
No respiro, mi ritmo cardíaco aumenta al punto que siento que en cualquier momento el corazón se paralizará. Estoy sudando, en mis manos, cuello y frente. Además, de temblar como una hoja.
—¿Sus padres le pidieron que lo atacarán, y como quedó vivo por eso volvió para ejecutarlo en el hospital?
—¡¿Que?!
—No hay señales de que alguien estuvo en el hospital aparte de usted. Dígalo, libere esa culpa, la verdad la hará libre. Confiese que intentó matar a su esposo.
—Noo, fue Sandy—me desborono en lágrimas —.Fue Sandy Salvatore.
—¿En que se basa en decir que fue Sandy Salvatore, tiene alguna prueba?—cuestiona.
—Mató al padre de Sasha.
Todos se quedan en silencio, solo se escuchan mis sollozos. El detective sostiene otro documento en sus manos, quiere que lo vea.
—El señor Bustamante fue asesinado por un hombre la cual le debía mucho dinero. Fue apuñalado y ahorita mismo, ese asesino esta siendo arrestado.
《¡Que! no era posible》
—No, yo la vi, ella lo apuñaló.
—No señorita Santana. Encontramos el cuerpo del señor Bustamante en el pueblo de Mila. Totalmente decapitado.
—Nos enviaron un obsequio con su cabeza
Él suspira.
—Lo se, la señorita Bustamente nos trajo esa parte del cuerpo restante para así hacer una autopsia. No sé encontró huellas de Sandy Salvatore, solo las de un criminal llamado Lucke Pieterse.
Otro Flashback.
Revivo la escena cuando estuve en el bosque. Como Sandy le apuñalaba, era demasiado claro en mi mente.
—La pregunta es Maya: ¿Que realmente vio? o ¿que inventó para salvarse usted y su familia?
—Noo, esto no está pasando. No, yo sé lo que vi.
El detective se acerca, me pone la mano en el hombro con condescendencia.
—¿Ha pensando ir a un psiquiatra?
Lo miro mal. Busco la atención de Sasha que está llorando.
—Sasha, ¿Tu me crees verdad? dime que me crees.
Puedo ver la incredulidad en sus ojos llenos de lágrimas.
—Alexa, ¿me crees? —la busco, ella no responde.
—Quizás miraste mal Maya. No comes mucho, no duermes bien, estás sometida a un enorme estrés y ansiedad al mismo tiempo con todo lo que esta sucediendo. No simpatizas con la familia Salvatore, los odia desde que tus padres te dijeron que te casarías con Dante. Tienes ojeras, estás muy delgada, pierdes la memoria, tienes problemas para pensar en otra situación que no sea la que estás pasando ahora. Tienes sensación de peligro constantemente, pánico. Mirate, actúas como una demente —declara Sasha, sus palabras me encierran en una cuarto oscuro difícil de salir.
—No, tu no. Vimos la cabeza, ¿te acuerdas?—lloro.
—La envió ese asesino para demostrarme que había matado a mi padre porque no le había pagado su dinero. Conoces a mi padre Maya y si adicción al juego.
Estallo en llanto.
—¿A quien proteges Maya? ¿ Te proteges a ti misma o a tus padres?
—¡Es suficiente!—interviene Sasha sollozando. Me siento en el suelo, pego mis rodillas al pecho, estoy temblando, sudando frio, me falta el aire, siento que voy a morir. Escucho a lo lejos:
—¡Es suficiente detective!
—¡Maya!—me sacude Alexa. La vista se me nubla, parezco estar bajo una hipnosis.
—Hay que sacarla de aqui—escucho la voz de Sasha muy lejana.
Salimos de la casa, escucho una discusión entre Sasha y Alexa.
No puedo más...
¿Intenté matar a Dante?
¿Me inventé al sujeto que lo atacó en el hospital?
¿ En realidad qué vi en la casa de los Salvatore?
De esas tres hipótesis, solo en una alguien podía sacarme de la duda: Mickey.
☆☆☆☆☆☆☆
Pequeña notita: Bien, a partir de aquí leos sus hipótesis. ¿confian en nuestra protagonista narradora? ¿ Creen que Maya intentó matar a Dante? déjenlo en sus comentarios.