De Regreso a clase. ¡Me arrestan!
Gustavo, Robert, y yo presentamos cargos de violación.
Nos declaramos inocentes ante esa acusación sin sentido. Ángela mentía, y no era capaz de admitirlo. Nuestros padres mueven cielo y tierra para ayudarnos. Confesamos la verdad, lo que realmente sucedió y la policía comienza a investigar a Ángela.
Una mañana nos declaran inocentes. Simplemente, como si la tierra se la hubiera tragado, Ángela desapareció.
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Pasaron los años. Me casé. Tú madre y yo estábamos en un mal momento, así que, Robert me invitó a reunirnos como los viejos tiempos. Gustavo se había ido lejos a estudiar, y él había quedado para vernos. Ya mi amigo Salvatore tenía un hijo, y una esposa. Robert una esposa y una hija, y yo a tu madre y a ti.
Ese fin de semana sería de lo mejor. Después de tantos años finalmente estábamos reunidos. Bebimos, bebimos hasta el cansancio, y cuando desperté, estaba en la cama de Sandy.
Crei que nunca la volvería a ver, hasta que apareció como su esposa.
La investigué y descubrí que Ángela y ella eran la misma persona. Sandy no sólo se acostaba con Gustavo Salvatore, si no con Robet y ocasionalmente, conmigo.
¡Lo siento! ¡Cometi un grave error!
Una noche la confronté, discutimos, y me confesó tener un hijo mío cuando estuvimos la primera vez. Hijo que dió en adopción apenas nació.
Maya, sé que tiene muchas preguntas, pero esto es solo un resumen de lo que ocurrió. Ahora, Robert está muerto, Gustavo a punto de morir y yo a estas alturas estaré en la misma condición que ellos.
Hace un año Sandy comenzó a enviar cartas de amenazas. Obligándome a depositar una gran cantidad de dinero. Dante se enteró de mi amorío con ella, y estaba dispuesto a contárselo todo. Sin embargo, intervine. Sabia que al muchacho le gustabas, así que... te ofrecí con la condición de su silencio, y de su inversión en la empresa. ¡Fue un error!
Dante lo pensó. Finalmente, terminó aceptando, tal vez porque... si se enamoró de ti. O le gustabas demasiado. Maya te convencí en casarte con Dante, a pesar de que te negabas, sin embargo, un trato era un trato. Y su silencio salvaría nuestra familia. Lo que nunca previne fue que a Dante alguien más lo tuviera amenazando.
Nada de lo que sucedió después, fue parte del plan.
Espero puedas perdonarme querida hija. Cometi muchos errores, y no puedo dar la cara para afrontarlos y ver su mirada de odio. No, eso me mataría. Solo quiero que sepas que te amo.
Y que todo lo que hice, fue por su bien.
Las amo.
Con amor: Tu padre.
Lloré.
Lloré al cerrar la carta.
Papá y Sandy. Sus amigos y Sandy. ¡Era asqueroso!
Por alguna razón no podía creer el argumento de mi padre, ya me había mentido lo suficiente.
Su versión no concuerda. No creo que Sandy le hubiese gustado tener sexo con los amigos de mi papá. Y no creo que mi padre sea tan inocente como lo expresa en esa carta.
Respiré hondo. Fui a la habitación de mamá. Estaba profundamente dormida. Esta carta la destruiría por completo, por eso, dudo en mostrarsela. Bajo las escaleras, doy un par de vueltas por la casa. Pienso en las letras de mi padre, su acusación de violación, y en su hijo que probablemente sea mi hermano.
Derex Salvatore pudiera ser mi hermano.
Mi hermano era el asesino de la hermana de Mickey. Todo estaba enredado, parecía un laberinto sin salida alguna. Cada vez que se abría una puerta rumbo a la verdad, todo se complicaba más.
Noooo, no podía quedarme con la versión de mi padre. Tenía que escuchar a la que comenzó todo este asunto: Ángela, o Sandy.
Enciendo el auto. Me sumergo en la oscuridad de la carretera fría.
No, el hombre perfecto no puede ser un violador.
El padre que siempre soñé y lo hice héroe de mi vida, no puede tener una doble vida.
Crei que nos amaba lo suficiente. Crei en él cuando me convenció en casarme por un supuesto contrato. Ahora, hasta dudo de si en realidad estaba enfermo o todo fue un teatro para salvar su culo.
Siempre se protegió a él mismo.
Siempre protegió sus secretos.
¡Que decepción!
Acontinuacion, me estacioné frente a la casa de los Salvatore. No sé porqué razón me importaba todo un carajo, solo quería verdad. Esa verdad que nos ha mantenido prisioneros. Aquella que ahora nos está cobrando.
Toco la puerta.
Siento la brisa fría. Miro todo a mi alrededor, está en completo silencio.
Insisto con la puerta. Necesito que Sandy me dé la cara. Me explique lo que realmente pasó. Escuchar su versión y si concuerda con la de mi padre.
Quería saber sobre mi supuesto hermano.
Ella abre la puerta. Se sorprende al verme.
Mi rostro le da a entender que quiero hablar, por lo tanto, se aparta de la puerta para que pueda entrar. Lo hago.
—¿Que haces aquí?—pregunta, frunciendo el cejo.
Le miro con odio, con ira, con todo lo malo que siento.
—Quiero saber la verdad...
—¿Que verdad?—arruga la frente mientras se cruza de brazos
Vacilo antes de soltar la lengua. Ella mira las escaleras, al parecer teme con que alguien nos escuche hablar.
—¿Mi padre te violó Angela?—escupo. Su mirada es de asombro. No dice nada. Su rostro se torna rojo. Su mirada fija y aguada.
—¿Como sabes mi verdadero nombre?
—Eso no importa. ¿Te violó?
Estoy temblando. Asustada por su respuesta. Sin embargo, no lo demuestro, frente a ella permanezco firme, fuerte, y sin titubeos. Decidida a saber la verdad a si me duela.
—Si. Todos ellos me violaron.
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Pequeña nota: Dejen sus comentarios. Nos vemos mañana para ahora leer la versión de Sandy.